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El nuevo programa de Samanta Villar, 'Samanta y...', estrenado en Cuatro en la noche del 7 de noviembre, estuvo centrado en la maternidad y contó con Torito y Soraya Arnelas como invitados, ya que ambos dos han sido padres recientemente. Torito, padre por gestación subrogada, reconoce que el proceso ha sido carísimo. "Si ya lo es cuando todo sale bien, imagínate yo, que perdimos al primero", reconocía el reportero. "Estuve en el parto, pero nos separaba una cortina. Nació tan feo que ni lloramos. Mi marido y yo nos mirábamos y decíamos 'no han liado'", decía entre risas Torito.
Torito, Samanta Villar y Soraya Arnelas comen y hablan de la maternidad
Por su parte, la cantante Soraya Arnelas reconoce que, lejos de sentirse rara al salir de casa sin su hija, se siente bien por tener un poco de tiempo para ella . "He renunciado a mí entera. No hago ni la mitad de cosas que hacía antes. Yo, cuando vuelvo del trabajo, le dedico todo el tiempo a mi hija". Además, la cantante reconoce que ser padre está sobrevalorado: "No es obligatorio ser padre" y también entiende a las mujeres que se arrepienten de ser madres porque "es muy duro".
Samanta, por otro lado, recuerda todas las críticas que han tenido, tanto Soraya como ella por hablar claramente de lo que opina sobre la maternidad. "Por decir que tener hijos es perder calidad de vida me han llegado a decir que deberían quitarme la custodia", reconoce la periodista. Al igual que Soraya, que recibió multitud de críticas cuando, seis días después de tener a su hija, la dejó con los abuelos para ir a cenar con su pareja: "Lo peor que me dijeron fue mala madre".
Las crisis de pareja
Torito, con actitud pícara, les preguntó: "¿Cuántas veces os habéis querido separar desde que sois madres?". Tras escuchar esta pregunta, ambas dos se llevan las manos a la cabeza. "Jamás he tenido yo un problema con Miguel Ángel. Nunca, pero desde que ha llegado Manuela, hay muchos problemas", reconocía Soraya. Además, Torito propone hacer un brindis por aquellas parejas que tienen un hijo como salvamento a su matrimonio.
Samanta nos presenta a un hombre embarazado
Trystan es un hombre transgénero estadounidense. Decidió dejar temporalmente su tratamiento de testosterona para quedarse embarazado y ser padre junto a su pareja. El chico cuenta que los efectos de la hormona masculina son irrevocables: "Una vez te ha salido barba o han cambiado tus cuerdas vocales, ya no hay marcha atrás". Sin embargo, unos meses después de dejarlo, tuvo su primera menstruación después de trece años. Ahora, a las 38 semanas de gestación, ya lo tiene casi todo preparado para dar a luz a su hijo.