En su momento, Comisiones Obreras publicó un informe que denunciaba el poco compromiso de RTVE por conseguir la igualdad de género. Entre muchos otros, uno de los datos más relevantes es que de los 25 directivos que forman el organigrama, solo 4 son mujeres. Por si fuera poco motivo de alarma, llegan nuevas cifras que esta vez ponen en evidencia su implicación con las mujeres que deciden dedicar su vida profesional en la industria del cine.
Andrea Jaurrieta dirigiendo su película 'Ana de día'
De todas las películas emitidas en TVE durante el año 2016, solo un 5,95% han sido dirigidas por mujeres. En este análisis que fue realizado por la cadena pública en respuesta a una pregunta formada por un socialista en el Congreso, se incluyen, por supuesto, todos los canales de la corporación. El dato en sí mismo no es tan relevante como podría ser, aunque sí escandaloso, porque ese resultado es solo un síntoma de la gran enfermedad que asola España en cuanto a darle la espalda a las mujeres cineastas se trata.
Las cifras del cine español en cuanto a igualdad
En 2016, se presentaron 154 largometrajes como candidatos a los Goya, de los que solo un 16% habían sido dirigidos por mujeres, según CIMA, la Asociación de Mujeres Cineastas, único organismo que se preocupa de investigar, pues el Ministerio de Cultura no separa los géneros en ninguno de sus informes.
Por otro lado, las ayudas del ICAA (Instituto de la Cinematografía y las Artes Audiovisuales) son prácticamente inaccesibles a las mujeres si se tienen que adherir a su sistema de puntos. Solo un 27,7% de mujeres han sido destinatarias de las ayudas públicas del Instituto en 2016. Consciente de la situación, están intentando establecer medidas que subsanen la situación, pero la nula participación de entidades como la propia TVE, no lo están poniendo muy fácil.
Isabel Coixet, una de las pocas mujeres de la industria
A pesar de que la publicación en el BOE se modificará a partir de diciembre para que las mujeres tengan más acceso a la industria, no es tanto un problema económico como social si las que consiguen llegar a algo terminan relegadas en ultimísima fila con productos destinados solo para mujeres de la talla "50 sombras de Grey" o "Crepúsculo". Es casi fantasía encontrar a una mujer dirigiendo películas trascendentes.
Las inaccesibles
Obviando que por el momento, parece que se ha ido sorteando el estigma de que las mujeres solo podían participar en el cine si llevan ondas al agua y cantan en un café de Buenos Aires frente a las cámaras, todavía hay profesiones muy blindadas para ellas. Mientras el 83% del equipo de diseño de vestuario y el 75% de maquillaje y peluquería son mujeres, tan solo un 2% consigue ser directora de fotografía, un 3% jefa de efectos especiales y un 8% de sonido.
En España, las películas dirigidas por hombres llegan a tener una media de 2,2 millones de euros de presupuesto. En cambio, las películas dirigidas por mujeres, 1,4 millones. Como dice la presidenta de CIMA: esto es solo un reflejo de lo que se vive en el resto de la sociedad, en cualquier otra industria.
Tal y como informó Comisiones Obreras, nadie se encarga de que TVE cumpla con las medidas que se han instaurado para solucionar tal depauperada situación, de la misma forma que nadie se preocupó de comprobar si llevaban a cabo las recomendaciones que se les había impuesto para solventar la desigualdad de género entre sus trabajadores. En todo 2016, TVE eligió coproducir 6 películas dirigidas por mujeres, bajando dos la cifra en 2015 y 2014.
Paula Ortiz, poco a poco consagrándose tras "La Novia"
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Triste realidad
Muchos de los argumentos recibidos para ayudar a que las decisiones se conviertan en papeles mojados es que no hay mujeres que se dediquen a la dirección de cine o en general al séptimo arte. Sin embargo, además de las ya consagradas como Pilar Miró, Isabel Coixet o la reciente Leticia Dolera, hay muchas noveles de la talla de Carla Simón, Nely Reguera o Paula Ortiz que no dejan de comentar lo mucho que les cuesta conseguir la financiación para sus proyectos, siendo la segunda la que cataloga de "descorazonadora" la situación.