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Los cara a cara vienen siendo una tónica habitual en la nueva temporada de 'Salvados'. Con el transfondo político centrado en Cataluña y la trascendencia que podría tener las próximas elecciones autonómicas del 21 de diciembre, Jordi Évole ha invitado a los rostros representativos de las posiciones más contrapuestas del parlamento catalán enfrentadas por un mismo objetivo, la presidencia de la Generalitat: Inés Arrimadas, líder de Ciudadanos en Cataluña, y a Marta Rovira, secretaria general de ERC.
Inés Arrimadas y Marta Rovira en 'Salvados'
El paro, los refugiados, la educación y la violencia de género abrían la mesa de debate, siendo curioso como en estos campos ninguna de las ponentes tenía exceso de información, por lo que pasaban por los temas de puntillas y solo se resaltaba que podrían estar de acuerdo a lo que a la violencia de género se refiere.
El fascismo Vs los golpistas
Tras las convulsas jornadas que se han vivido en los últimos años, ambas representantes mostraban tener preparado el tema estrella de las tertulias televisivas y de los propios gobiernos. Después de reconocer que no habían hablado nunca entre ellas tranquilamente, ambas explicaban los términos en los que se habían referido al oponente en diferentes medios.
Respecto al fascismo del que ha tachado Marta Rovira a la formación naranja, la política explicaba: "hemos aprendido una lección que es dura. Hemos descubierto que el estado español están dispuestos a hacer lo que haga falta", mientras que Arrimadas le pedía concrección, "Es evidente que Ciudadanos, PP y PSC tienen un concepto de la unidad española que consiste en que la unidad de la nación está por encima de todo y no es posible democraticamente pensar otra cosa", precisando que la líder de Ciudadanos, "Ha asistido a manifestaciones con grupos claramente fascistas".
Inés Arrimadas en 'Salvados'
Inmediatamente, Arrimadas mostraba su malestar con dichas afirmaciones: "Estáis insultando a un millón de personas que se sienten españoles y europeos", y precisaba, "Que quieras relacionarlo con grupos fascistas te retrata y demuestra que no conoces al pueblo catalán. Criminalizas a más de la mitad de los catalanes".
Igualmente, la candidata de la formación liderada por Albert Rivera también se enfrentaba a sus propias palabras, donde ha señalado en numerosas ocasiones al grupo de Marta Rovira de golpista: "Yo digo lo que han hecho. No le digo que sea golpista digo que lo que ha hecho es dar un golpe contra la democracia y no hay justificación", matizando, "el fascismo es una cosa y decir que alguien ha dado un golpe a la democracia es diferente".
Nacionalismo, ¿catalán o español?
Mientras que el concepto del nacionalismo catalán es un continuo en las informaciones al respecto del procés, Jordi Évole ha querido poner el foco sobre la misma vertiente pero a la española. "Me parece que las discrepancias políticas no se pueden resolver con cárceles, es poniendo las urnas. Más del 80% de los ciudadanos piden que se pongan las urnas. Solo hemos pedido durante 5 años la posibilidad de hacer un referendum y no se pueden imponer por encima de derechos fundamentales", comenzaba resaltando Marta Rovira, donde además señalaba, "vivimos en una república declarada no implementada".
Marta Rovira en 'Salvados'
Por su parte, Arrimadas negaba ser nacionalista española porque "sentirse catalán, español y europeo es un sentimiento normal", negando el fenómeno nacionalismo español, "Si existe es minoritario", porque, a su parecer, "no podemos ser nacionalistas al ser europeístas".
La explotación del monotema
Tras un largo proceso de discusiones y enfrentamientos en cuanto a la independencia, Jordi Évole ha querido destacar la importancia de este enfrentamiento en la carrera política del las formaciones. Arrimadas negaba haber sacado partido del mismo aunque: "Electoralmente, a corto plazo, a lo mejor sí" explicando, "queremos acabar con el procés. A nosotros no nos puede ir bien si a los ciudadanos no nos va bien".
"Nosotros también estamos hartos del procés y lo que buscamos una solución democrática", apostillaba Rovira destacando que la estrategia marcada por Ciudadanos de ataque al gobierno catalán demuestra su verdadera cara: "No podéis decir que defendéis Cataluña y explicando historias que no son verdad".
Difícilmente ambas representantes conseguían ponerse de acuerdo, siendo este un debate donde cada una negaba la mayor de las afirmaciones de la otra. Con este programa como precampaña, el periodista ponía el objetivo final en el día después de las elecciones, donde, mientras Arrimadas se negaba a un referendum aunque la opción independestista sea la más votada, Rovira admitía la posibilidad de dimitir si el bloque no independentista gana en escaños y votos.
