La breve primera temporada de 'The Good Fight', el spin-off de 'The Good Wife', supo a poco. Acostumbrados a la veintena de episodios de su serie madre, sus diez episodios pasaron rapidísimo, pero por fin sabemos cuánto más tendremos que esperar para ver la segunda temporada. CBS All Access ha anunciado que el primero de los trece nuevos episodios debutará el 4 de marzo de 2018, es decir, en menos de tres meses.
Cush Jumbo, Christine Baranski y Rose Leslie, protagonistas de 'The Good Fight'
El arranque de la temporada nos situará en un mundo que se está volviendo loco, y la tasa de homicidios en Chicago está en aumento. En medio de esa locura, Diane (Christine Baranski), Lucca (Cush Jumbo), Maria (Rose Leslie) y el resto de la firma de abogados se encuentran bajo una amenaza psicológica cuando un cliente de otra firma mata a un abogado por cobrarle de más.Tras la aparición de un asesino imitador, la firma comienza a sospechar de sus propios clientes.
Por si esto no fuese suficiente, Diane lucha contra una nueva socia de la firma, Liz Reddick-Lawrence (Audra McDonald), que llegará en sustitución de Barbara Kolstad. Maia, por su parte, se hace más fuerte después de que el escándalo de sus padres la lleva a juicio, y Lucca regresa a la órbita de Colin tras su ruptura. Delroy Lindo, Sarah Steele, Michael Boatman y Nyamby Nyamby volverán como regulares en los nuevos episodios, mientras que Erica Tazel, la actriz que interpretaba a Barbara, abandonará definitivamente la serie.
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Un inicio muy prometedor
La primera temporada de 'The Good Fight' arrancaba un año después del final de la serie original, con Diane Lockhart dimitiendo de su antiguo bufete para irse a vivir al sur de Francia y escribir sus memorias. Pero sus planes se vieron truncados después de que le salpicase un enorme escándalo financiero protagonizado por Henry Rindell, su asesor financiero y uno de sus mejores amigos, que la deja sin sus ahorros. Ante esta perspectiva, Diane decide volver a trabajar y se incorpora a una nueva firma en la que no se lo han puesto nada fácil.