7 anuncios inolvidables de la Lotería de Navidad

El 22 de diciembre es el día de la suerte para unos pocos y de la salud para la gran mayoría. Durante los últimos meses del año, sobre todo en diciembre, millones de personas salen de sus casas y recorren diversas administraciones de lotería hasta que encuentran el número que buscan. La lotería es sinónimo de ilusión. Las personas que la juegan aprovechan esas fechas para reunirse con sus familiares e intercambiar décimos con ellos, imaginar todos juntos cómo sería la celebración y soñar noche tras noche con todo lo que podrían hacer si les tocara el gordo.

Aproximadamente un mes antes de que los niños de San Ildefonso comiencen a cantar los números y los premios, la televisión empieza a jugar un papel muy importante en la campaña de la Lotería de Navidad con sus esperadísimos anuncios. Esos anuncios que suelen tocar la fibra sensible del espectador. Este año, en 2017, Daniel y Danielle han sido los protagonistas del spot de la Lotería, dirigido por Alejandro Amenabar. En un día tan mágico, desde FormulaTV hemos querido hacer un repaso a los mejores anuncios de la Lotería de Navidad que nos han acompañado a lo largo de los últimos años.

1 Justino y la fábrica de maniquíes

Sin lugar a dudas, el anuncio del año 2015 es el que más sensaciones ha causado en los espectadores desde hace mucho tiempo. Además, como curiosidad, este spot publicitario ha terminado convirtiéndose en el más premiado del mundo. Su protagonista brillaba con luz propia y conseguía transmitir su ilusión a todos los que veíamos una y otra vez -muchas personas en bucle- el spot.

Justino, el guarda nocturno de una fábrica de maniquíes, se despertó una noche y se dirigió, como cada día, a su puesto de trabajo. Cuando se montó en el autobús y se topó con un periódico, se encontró con una noticia que no le hizo nada de gracia: el esperadísimo gordo de la Lotería había caído en la fábrica y él había sido el único que no había comprado ningún décimo.

Una vez dentro del edificio, subió en el ascensor con mirada triste y, justo en la puerta, un maniquí con uno de los décimos premiados en la mano le estaba esperando. En ese momento, todos los trabajadores -con los que nunca coincidía- le recibieron con champán y celebraron el premio. Sus compañeros, entre todos, le habían comprado uno por si ocurría justo eso. La expresión de emoción del vigilante y las celebraciones de todos los trabajadores, nos contagiaron ese sentimiento y acabamos todos soltando alguna que otra lagrimilla. Y eso, que como dice el eslogan, el mayor premio es compartirlo.

2 Manuel, el del bar

Ser asiduo en un establecimiento y que todos se lleven un pellizco grande de dinero menos tú da bastante rabia, ¿verdad? Justo esto fue lo que le pasó al protagonista del anuncio de la Lotería de Navidad de 2014. Manuel era un cliente habitual del bar Antonio y siempre solía comprar un décimo, pero justo ese año decidió no hacerlo. El 22 de diciembre, tras enterarse de que el gordo había caído en el local de su amigo, dudó en bajar pero finalmente se lanzó a ello. Cuando llegó, todos los vecinos estaban celebrando el premio con copas de champán y cantando a los cuatro vientos junto con el dueño.

Llegó, pidió su café habitual y, cuando fue a pagar, le llegó la sorpresa: Antonio le pidió 21 euros en vez de 1 -el precio del café-. Manuel, sorprendido, preguntó a su amigo el porqué de esa repentina subida y este último le entregó un sobre con uno de los décimos premiados. El cliente, llorando a lágrima viva, no dejó de agradecerle su acción a Antonio. Y todos otra vez contentos. No digáis que pudisteis ver el anuncio sin una caja de clínex al lado. Prácticamente imposible.

Después de que el anuncio se rodase en un bar de Villaverde y como curiosidad, miles de personas -quizá supersticiosas- salieron a la calle a buscar a la desesperada el establecimiento para comprar uno de los décimos que los verdaderos dueños habían sacado a la venta. A los pocos días ya se habían agotado y algunos de los clientes habituales que no se dieron la suficiente prisa, se quedaron sin el número.

3 Carmina y su ilusión

Igual que los bebés, las personas mayores suelen transmitir ternura. En 2016, los responsables de Loterías y Apuestas del Estado decidieron que la protagonista del anuncio de la campaña de Navidad fuera una adorable anciana enferma de Alzheimer que vivía en un pequeño pueblo del norte de España. Al inicio de la historia, veíamos a Carmina preparando el desayuno a su nieto cuando de repente escucha embobada y con los ojos como platos el número premiado con el gordo de Navidad y se percata de que es el suyo.

La emoción comenzaba a hacerse palpable en las expresiones faciales y corporales de Carmina cuando salió a la calle y empezó a contárselo a sus familiares y vecinos. De lo que ella no se había dado cuenta y todo el mundo sí era que las imágenes eran de archivo y correspondían a años atrás. Pero eso qué más da. Ver la ilusión reflejada en las personas que nos importan nos basta y nos sobra para hacer cosas tan surrealistas como lo que hizo el pueblo por la protagonista.

Aunque todos eran conscientes de que aún quedaba un día para el sorteo de ese año, se pusieron de acuerdo para no romper sus sueños a la anciana y que así continuara feliz y perdida en su propia imaginación. La sensación que nos provocó ver el gesto de la señora cuando escuchaba a los niños de San Ildefonso cantando el número de su décimo, no tuvo precio. Y por si eso fuera poco, el final fue aún más emotivo. Cuando su hijo iba a contarle la verdad, ella decidió renunciar a su supuesto premio en favor de su familia. Vamos, un mar de lágrimas. De tantas veces que lo vimos en la pequeña pantalla terminamos convirtiendo a Carmina y su familia en miembros de nuestra propia familia televisiva.

4 Daniel y Danielle

Este es el más reciente. Dirigido por Alejandro Amenábar, el anuncio que han creado para la Lotería de Navidad 2017 está protagonizado por Daniel y Danielle, una pareja un tanto peculiar. Daniel, un chico joven, acude a una administración de lotería para comprar su décimo para el 22 de diciembre. Allí coincide con una chica rubia y que parece no entender su idioma porque, sencillamente, es una extraterrestre. Aun así, ambos compran el mismo número.

Poco a poco van conociéndose un poco más -aunque es él el único que habla- y sus sentimientos comienzan a aflorar. Un día, cuando habían quedado para verse, la chica va a entrar al metro para llegar a la zona donde vive Daniel y un operario le comunica que está cerrado. Ella no entiende nada y eso provoca que pasen unos días sin verse. Justo el día de la Lotería de la Navidad, a ambos les toca el gordo y vuelven a coincidir en el mismo sitio de una manera muy espontánea. Y que viva el amor entre planetas.

El anuncio ha dividido a la audiencia. Aunque algunas personas están contentos con su mensaje y su calidad, otras tantas creen que no le llega ni a la suela de los zapatos a los de años anteriores. De lo que más se queja la gente es de su duración -y eso que poca gente ha tenido el valor de verlo entero- que llega hasta los 20 minutos. Esto sacó la vena humorística de muchísimos tuiteros, que no tardaron en bromear con el asunto.

5 Canción de Navidad

Nuestro ranking no podía cerrarse sin mencionar aquella maravilla del 2013. Rostros del mundo de la televisión y de la canción compartieron plano para protagonizar el anuncio de la Lotería de Navidad. David Bustamante, Raphael, Monserrat Caballé, Niña Pastori y Marta Sánchez, cinco estrellas -cada una de su época-, juntos delante de un enorme árbol de Navidad entonando un villancico de manera cuanto menos peculiar. ¿Quién no recuerda ese "La, la, la, la, laaa, la, laaa, laaaaaaaa" de Raphael? ¿O aquella imagen de Caballé que generó cientos de memes?

Este anuncio dio mucho que hablar y no precisamente por la emoción que pudiera causar en sus espectadores. Monserrat Caballé fue la verdadera protagonista de la campaña en las redes sociales, y es que la cantante se convirtió en carne de millones de memes por la cara que ponía en una de las escenas. Debemos reconocer que daba auténtico pavor. Y no solo somos nosotros o los millones de tuiteros los que lo aseguramos. La propia afectada no tuvo ningún problema en admitir que lo que se comentaba era cierto y que en el spot no había salido, ni mucho menos, favorecida.

6 La diosa Fortuna

En 2010, Apuestas y Loterías del Estado revolucionó sus típicos anuncios navideños. En vez de imágenes clásicas de Navidad o Papa Noel como protagonista, optó por probar con algo totalmente diferente. Con el cuento de "Alicia en el País de las Maravillas" como arranque, el spot va haciendo un recorrido por tres de los relatos infantiles más conocidos de Disney. Peter Pan con personajes adultos y la Cenicienta rompiendo su zapatito de cristal y poniéndose unas Converse dan paso a la diosa Fortuna que, levitando, va soltando unos polvos dorados que otorgan suerte a aquellos a los que les cae. Algo muy sencillo a la par que innovador.

7 Hay muchas navidades

En 2006 y 2007, Loterías y Apuestas del Estado decidió ligar directamente la lotería del 22 de diciembre con el significado de la Navidad. El anuncio, repleto de escenas navideñas, varió muy poco de un año a otro. Bajo la frase "hay muchas navidades", en 2006 varias personas o situaciones nos mostraban esta época del año tan mágica desde distintas perspectivas. Incluso pudimos ver al mismísimo Papá Noel comprando un décimo en una administración.

En cambio, en 2007, la frase "hay muchas navidades" fue sustituida por "la suerte es de todos". A continuación comenzaban a sucederse imágenes en movimiento de varias escenas que representaban a un conjunto de situaciones antónimas que terminaban por englobar a casi todo el mundo. "Los pequeños", "los grandes", "los que pasan la Navidad como siempre" o "los que la van a pasar como nunca", son algunas de las frases que se escuchaban en el spot. Aunque estos no han sido los anuncios más emocionantes de la historia, sí merecen estar en este ranking porque marcaron un antes y un después en la Lotería de Navidad: fueron los primeros de la nueva era del sorteo más mágico del año.

BONUS El calvo de la lotería

Todos los anuncios antes mencionados pertenecen a años posteriores al 2006. Los españoles recordamos ese año como el primero en mucho tiempo en el que el protagonista del anuncio de la Lotería de Navidad no era calvo. Literalmente. Desde 1998 y hasta 2005, si esperábamos con ansia el spot cada año era para ver con qué nos sorprendía esa Navidad el "calvo de la lotería".

Clive Arrindell. Ese es el verdadero nombre, que seguramente pocos conocerán, del señor que estuvo tantos años regalando ilusiones a la gente con un solo soplido. Con los ojos apuntando a la cámara y unos polvos mágicos en la palma de su mano, Arrindell solo tenía que soplar para que las ventas de décimos comenzaran a aumentar de manera desorbitada. Aunque era el mismo personaje el que nos acompañaba año tras año hasta el día del sorteo, siempre conseguía dar un toque diferente y único a cada anuncio.

Su intensa mirada penetraba en la mente de las personas, que veían en él la cara de la suerte y la fortuna y no dudaban en jugar un décimo más. Por si tocaba. La marcha de este mítico calvo se debió a una decisión de Loterías y Apuestas del Estado, que prefirió encargar su campaña navideña a otros profesionales. Y ahora, después de todo, no queda más que decir que la suerte os acompañe.