Belén Martín, directora de 'Granjero busca esposa': "Todavía quedan grandes sorpresas esta temporada"

Belén Martín se encuentra en mitad de la emisión de la sexta temporada de 'Granjero busca esposa', el dating show de Cuatro que, desde la temporada pasada, presenta Carlos Lozano. En esta edición la mayor sorpresa ha sido el romance entre Patricia y David, dos de los granjeros que habían ido al programa a buscar el amor, pero no de la manera en la que lo han hecho.

El programa tuvo que reaccionar a tiempo repescando a Sigi, uno de los granjeros de la temporada pasada que no consiguió entregar su herradura, por lo que acabó su edición como la había empezado: soltero. Pero, tal y como nos cuenta Belén, esta no ha sido la única sorpresa de la temporada y quedarían muchas cosas por descubrir.

Tras seis ediciones, ¿qué balance haces del programa como directora y por qué crees que el programa tiene seguidores tan fieles?

Un balance muy positivo, ya que estamos viendo que la gente cada semana nos busca porque es un público muy fiel y les está enganchando mucho la vida del campo y de los granjeros, el ver cómo se desenvuelven en este terreno. Existe un contraste muy grande con las chicas tan de ciudad que viajan al campo a vivir en un entorno que no es el suyo y viven cosas que jamás pensarían que iba a vivir, esa es una diferencia muy grande con respecto a otros dating y creo que es lo que nos hace muy especiales.

Realizar un casting como este no tiene que ser nada fácil, ¿se abre un proceso de selección o sois vosotros quienes vais a buscar a los participantes del programa?

Es un casting muy complicado y nos tomamos el tiempo necesario para ver que pueden hacer un buen grupo. Como tenemos la colaboración de la cadena, se ponen en contacto con nosotros a través de su página web pero también tenemos un equipo maravilloso de redactores que hacen la búsqueda por los pueblos, por ferias agrícolas, mercados, hablamos con ayuntamientos... la verdad que se portan muy bien con nosotros. Después hacemos una entrevista y vamos haciendo la criba, pero es muy complicado.

Este año contáis con un granjero homosexual, Facundo. ¿Buscabais un granjero gay o le conocisteis y decidisteis que debía estar en el programa?

Facundo fue una cosa muy curiosa porque llamó su hermana Rosa al programa. En un principio la llamamos a ella porque nos comentó que tenían una escuela de hípica y pensábamos que ella quería ser pretendienta y de repente nos encontramos con que era el gran Facundo quien quería participar. Fue algo fortuito pero estamos encantados con él.

¿Qué cualidades buscáis para que un granjero pueda participar el programa?

La cualidad principal es que tiene que ser granjero, soltero y con ganas de enamorarse. Hay muchos tipos de granja: agraria, ganadera, pesquera, que se ha hecho en otros países... Y sobre todo que las ganas de enamorarse sean de verdad porque algunas veces hemos descubierto a gente que luego tenía novia y su objetivo no era ese. Además, como grabando pasamos mucho tiempo, si alguien miente se le pilla.

A día de hoy, ¿tenéis constancia de que haya muchas parejas surgidas en el programa que sigan juntas?

Sí, hay muchos que no, pero hay muchos que sí, como pasa en la vida real. Incluso ha habido algún hijo y estamos pendientes de ver si nos vamos o no de boda. En Francia hay 140 hijos entre todas las ediciones.

En las primeras ediciones, en el programa contabais con hasta diez granjeros que se eliminaban en las primeras entregas, pero ahora los que empiezan están hasta el final, ¿a qué se debió este cambio?

Sí, comenzaban diez, pero en la primera gala eran eliminados. Lo hicimos porque nos parecía perder el tiempo enseñar diez granjeros y tener que desechar a cuatro porque sean los que menos chicas han tenido, nos pareció un poco cruel. Creemos que es mejor tener a los seis desde el primer momento y poder centrarnos en ellos. Es un contenido que tampoco va a ningún sitio.

Tras dos ediciones con Carlos Lozano, ¿cómo le veis al frente del formato? Luján Argüelles dejó el listón muy alto...

Yo no me encargué de las temporadas con Luján, pero trabajar con Carlos es una maravilla. Le encanta la gente del campo y la vida en el campo, los granjeros le adoran y se lo pasa genial. Además, les da consejos, grabar es un subidón para él y se nota, hace que el trabajo sea una gozada.

En esta edición ha pasado algo inaudito en el formato, el romance entre Patricia y David, dos de los granjeros, que hizo tambalear todo lo que teníais planificado para la temporada, pero al final supisteis reaccionar. ¿Cómo vivisteis el equipo la decisión de ellos de abandonar juntos el programa?

A nosotros esto nos sorprende en plena grabación. Pasamos muchos nervios por saber esta historia en qué iba a terminar, pero mantuvimos la calma, decidimos contarlo tal y cómo se estaba viviendo, pero había que contarlo bien porque también están las pretendientas que se merecían que todo siguiera su curso. Una vez vimos que ellos iban en serio, decidimos rescatar a Sigi, que en la edición anterior no había entregado su herradura y fue la manera que encontramos de tener una temporada, completa, llena de verdad y sin que nada se viera resentido.

Al final, con la respesca de Sigi, que fue una muy buena manera de dar una solución, ¿creéis que este capítulo ha beneficiado a la trama del programa?

Como yo no sé lo que hubiera pasado y tal y como ha ido sucediendo todo, estamos encantados, no sé decirte si ha venido bien o mal. El caso es que estamos contentos con el resultado, nos ha salido una temporada muy rica en contenido y con muy buena aceptación. Contamos lo que pasó y nosotros estamos encantados porque al final solventamos la situación. Hay que saber reaccionar, son imprevistos en los que no cabe un parche.

¿Cómo valoras la audiencia que está teniendo el programa?

Es una temporada en la que está bajando el consumo televisivo en general pero estamos contentos porque la gente que comenzó a verlo se mantiene. También son fechas un poco malas porque hay mucho cine familiar y la gente que nos suele seguir son jóvenes que en estas fechas no suele ver la tele. Pero estamos muy orgullosos con el consumo que está habiendo a través de Internet. Tenemos unos seguidores muy fieles y eso es de agradecer.

Quedan cinco entregas para el final de esta temporada, ¿quedan sorpresas por descubrir?

Sí, sin lugar a dudas. Parece que con lo de Patricia y David ya lo hemos visto todo, pero para nada, queda mucho por ver. Habrá muchas sorpresas, giros, visitas... habrá gente que parece que se queda, pero se va y gente que parece que se va y nos sorprenden porque se quedan. Habrá muchos sentimientos que cambien porque han visto o se han enterado de algo. De aquí al final lo vamos a vivir con mucha ilusión porque la temporada no se desinfla.

¿Preparáis ya una nueva temporada?

Todavía no estamos preparando nada, pero ojalá. Hasta que no se emita el último capítulo no sabremos eso.

¿Os habéis planteado una temporada VIP?

Estaría muy bien, la verdad. Aunque no sabemos cuántos VIP tienen granja. Quizá lo podríamos contextualizar y que se vengan al campo. A mí me encantaría poder hacerlo.