En 'Granjero busca esposa' siguen intentando encontrar el amor. A uno de los que mejor les va es a Facundo, a quien vimos en el programa emitido el 3 de enero muy compenetrado con Nando, con el que se fue a dar un paseo a caballo con la excusa de enseñarle a montar. "Me está encantando la clase", decía Nando. Por su parte, Facundo le contestaba muy pícaro: "Y a mí me está encantado estar a solas contigo. Ya tenía ganas", confesaba. Pero del romanticismo pasaron al deseo más desatado: "Lo que me apetecía era pegarme un revolcón contigo porque ya llevo varios días aguantando y no lo voy a desaprovechar".
Nando y Facundo en 'Granjero busca esposa'
Nando, al escuchar a su granjero tan directo se cortó un poco pero le siguió el juego: "Pero, ¿por qué te apetece tanto conmigo?", preguntaba Nando. "Porque me das un morbo que te cagas. Me pones...", decía Facundo sin medias tintas. Tras esto, ambos se tumbaron en una manta que el granjero llevaba preparada y, sin más, comenzaron a besarse y desnudarse a la sombra de un árbol. Sin duda, ambos dos tenían química y decidieron no desaprovecharla.
Tras ese torrido encuentro, los dos tuvieron una cita que empezó muy bien. En cuanto Nando llenó las dos copas de vino, ya pudimos ver como se miraban con ojos de deseo, la tensión sexual era más que evidente. De hecho, nada más hacer el primer brindis, el pretendiente de Facundo ya se atrevió a pedirle un beso. "A mí él me gusta. Cuando estoy al lado de Nando, la verdad que me da vidilla", confesaba.
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Pero ese romanticismo de película iba a durar poco. Nando no desaprovechó la ocasión y le preguntó que por qué se había metido en la ducha con uno de sus compañeros. "¿Eres muy celoso? Depende de lo que me contestes puede que no te vuelva a hablar. Tú y yo nos estamos conociendo, tampoco te puedes sentir mal por eso", intentaba razonar Facundo. Pero, al mismo tiempo, Nando confesaba ser un chico infiel y que sus pretensiones con el maestro de hípica apuntaban a "pasárselo bien", por lo que Facundo le confesó: "Ahora me has dejado un poco frío". Fue entonces cuando la evidente atracción previa entre ambos desapareció por la más que evidente tensión.