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El final de 'Juego de Tronos', una de las series que más sensación a nivel internacional ha causado, no podrá conocerse como mínimo, hasta el año que viene, en 2019, tal y como ha afirmado más de un actor del elenco principal. Preparar la producción de una ficción de semejante magnitud y llevarla a cabo conlleva cantidades ingentes de trabajo, lo que provoca que sus seguidores tengan que sobrevivir el día a día a base de pequeños detalles y escuetas declaraciones de su equipo.
Megan Parkinson y Harry Grasby en 'Juego de Tronos'
El papel de la nueva sangre
Sansa Stark lo tenía claro: los traidores no merecen perdón y quien vivió las vejaciones y el maltrato de los Bolton durante tanto tiempo no está por la labor de aceptar a los Karstark y los Umber. Por otro lado, Jon Snow cree que los hijos no deben asumir el error de sus padres y merecen una segunda oportunidad.
Lo que puede parecer una subtrama insignificante entre tantas otras cosas sobrecogedoras como épicas batallas, esperados incestos y desgarradores muertes, quizás cobre más importancia e influya en el desenlace del norte después de que se confirme que Megan Parkinson y Harry Grasby, quienes interpretan a los herederos de los Karstark y los Umber respectivamente, volverán a formar parte del equipo artístico para la octava y última temporada.
El final se acerca
Además de pequeñas dosis de información sin contrastar, poca cosa más se sabe. La propia Emilia Clarke, Daenerys Targaryen en la ficción, ha confirmado que la seguridad para evadir las filtraciones es muy diferente a lo que habían hecho antes y bastante más estrictas. Tras los rumores de que utilizaran la misma técnica a la que había recurrido 'The Walking Dead', Clarke ha terminado por reconocer que nadie conoce el final real.
Sophie Turner, por su parte, ha admitido leer un final en el rodaje, junto al resto de actores, aunque se desconozca si es el real o no y que casi todos habían sido incapaces de soportar las ganas de llorar. Leer y escuchar "Fin de 'Juego de Tronos'" ha sido una de las cosas más duras por las que han tenido que pasar, reconoce la actriz.