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Pol Rubio es Pol Rubio. Así se define el personaje que Carlos Cuevas ha interpretado durante las 3 temporadas de 'Merlí'. Antes de la emisión del último episodio, hemos querido hablar con el actor para que nos cuente qué ha supuesto para él este proyecto. Aunque empezó siendo un personaje secundario (con bastante peso), ciertas circunstancias durante las temporadas le llevaron a convertirse en uno de los protagonistas de la serie, habiendo tenido una evolución espectacular.
El personaje podría dar mucho más de sí y hay buenas noticias para los amantes de Pol, pues Carlos asegura que "ha llegado algún rumor para hacer un spin off" de su personaje. Como ha sido alguien tan interesante a quien ha dado vida durante tres temporadas, queremos que el actor, de primera mano, nos desvele todos los detalles de Pol, de sus sentimientos, de Merlí, de Bruno, de Tania, de sus referentes, de filosofía, de cómo vive la fama y de una infinidad de cosas más.Y después de la serie, ¿qué? Carlos tiene pendiente de estreno la comedia "Gente que viene y bah" y ya rueda la nueva temporada de 'Cuéntame cómo pasó'. En esta serie de TVE seguirá interpretando a Marcos, la pareja de Inés. No obstante, el actor asegura que querría tener más tramas con el personaje de Carlos, al ser tan amigo de Ricardo Gómez. Además, todavía tiene alguna conexión más con esta ficción. ¡Arrancamos!
Carlos Cuevas es Pol en 'Merlí'
¿Qué balance haces de esta tercera temporada?
Creo que es una tercera temporada que se entiende mucho teniendo la visión global de las tres. Es una temporada de cierre, de desenlace, de culminación, de etapa de madurez de muchos personajes, se acaban de entender cosas de muchas cosas de muchos personajes que hace que se entiendan las temporadas anteriores. Creo que es una temporada muy culminante y muy redonda que le da un color muy bonito a la serie en global. Al ser una serie de solo 3 temporadas, que no se ha alargado a 7 u 8, como estamos acostumbrados tanto en Cataluña como en casi todo el mundo, permite trazar un dibujo entero de lo que significa toda la serie. Creo que esta temporada evoluciona muy bien con el conjunto de las otras dos porque es más madura, más adulta, si quieres más oscura a momentos, entonces si pones en global todo lo que significa la serie esta es como el inicio de la etapa adulta por parte de todo el alumnado y el adiós a la adolescencia y a la niñez. La primera temporada tiene algo más juvenil y festivo, en la segunda ya empiezan los personajes a revelarse contra sus padres, encuentran sus propios pensamientos, se encuentran con situaciones comprometidas y en la tercera esto se multiplica y creo que los personajes se tienen que enfrentar a conflictos más serios y más propios de un adulto que de un niño.
Estoy contento con mi personaje, creo en la serie y además no chupamos banquillo; tenemos la oportunidad de trabajar mucho
¿Tú sí que eres partidario de que la serie acabe con la tercera temporada?
Egoístamente no, porque nos encanta esta serie, nos hemos sentido muy felices, para muchísimos ha sido el debut actoral, para mí no pero ha sido sin duda uno de los proyectos más importantes de mi vida, por no decir el más completo. Estoy contento con mi personaje, creo en la serie, creo en lo que quiere contar la serie y además no chupamos banquillo, sino que tenemos la oportunidad de trabajar mucho y de que nuestros personajes tengan muchas tramas. Entonces, egoístamente da mucha pena y ojalá la hubieran alargado ocho temporadas pero en otras circunstancias. Creo que es fantástico que 'Merlí' tenga solo 3 temporadas, que sea redonda, que no nos hayamos encontrado con una última temporada que ya nadie sabe qué hacer y nadie sabría qué escribir. Lo bueno si breve, dos veces bueno y creo que también nos permite, que hemos aprendido y crecido mucho en esta serie, afrontar una etapa maravillosa que nos abre a todo lo que estemos dispuestos.
Me parece que tu personaje Pol es uno de los personajes más complejos. Él no quiere ponerse etiquetas, pero ¿cómo le define Carlos Cuevas?
Creo que para describir a Pol hay que conocerle porque ha tenido una vida complicada, a nivel familiar, con problemas económicos, con la muerte de su madre que todavía lleva arrastrando... es una espina que tiene clavada y que cuando muere una persona tan cercana nunca lo acabas superando. En todo caso, lo que hace Pol es ponerse una coraza e intentar que todo lo afectivo le rebote y que con esa coraza pueda presentarse a los demás como un personaje seguro, con capacidad de liderazgo, irreverente, frío de sentimientos, agresivo en algunos momentos... A lo largo de las temporadas estas capas se han ido deshaciendo del personaje y hemos podido encontrar un Pol más en esencia gracias a la irrupción de Tania. Creo que Tania es la única persona capaz de ver a Pol en su faceta más dura, entonces es una persona que con todo lo que ha vivido se ha construido un personaje que domina a la perfección y le coloca en un rol social que para él es el ideal: no ser cuestionado por nadie, que todo lo que él diga va a misa en su clan de la clase. Pese a tener ese rol y llevar esa coraza Pol es mucho más que eso, es un personaje que sufre, es un personaje con miedo que sufre inseguridades, que echa de menos la figura materna, que no está cómodo con su entorno familiar. En la primera temporada también fallece su abuela, por lo tanto es un chico falto de cariño.
Cuando recibimos el guion por primera vez supimos que teníamos entre manos una materia prima muy buena
Me parece que Pol, cara al espectador, ha roto barreras mostrando un personaje que muy pocas veces se ha visto. Por ejemplo, se ha mostrado de una forma muy natural la bisexualidad, también que el malote de la clase sea un experto en filosofía... ¿Crees que realmente es un personaje novedoso?
Absolutamente. Lo mejor de esta serie son los guiones. Eduard Cortés la ha dirigido mejor imposible pero nosotros cuando recibimos el guion por primera vez supimos que teníamos entre manos una materia prima muy buena precisamente porque los personajes no estaban estereotipados. Tenían varias capas, muchas facetas, eran poliédricos en muchas de las circunstancias y esto siempre es rico tanto para el actor que lo interpreta como para el espectador que lo recibe porque es capaz de empatizar con muchas de esas facetas.
Pol, si lo ves a vista de pájaro, puede parecer el típico malo del instituto pero, como sabemos, a lo largo de las temporadas es un chico que sorprende por sus contradicciones, sus actos. Se ha visto a lo largo de la serie pasar por un conflicto de su identidad sexual que, pese a llevarlo a cabo, para él es un conflicto. El Pol que dice "no me pongas etiquetas" es un Pol que todavía no ha decidido qué quiere en la vida, el no saber es una posición maravillosa en la vida, puedes quedarte en el no saber, es en la duda y en el no decidir de donde también más riqueza puedes sacar a nivel emocional. Yo creo que ha roto muchísimos clichés, que precisamente sea Pol el que se haya atrevido a dar el paso con un hombre, que luego haya planteado una bisexualidad y que no tenga ningún tipo de tabú con él mismo. El tabú lo tiene con el personaje que se ha creado de cara a la galería pero es un chico muy rico de emociones y muy valiente, que aparte de luchar con él mismo y la educación que ha recibido en casa, puede abrirse de esta manera al mundo.
Es importantísimo saber que sin la figura de 'Merlí' esto no habría llegado a pasar nunca. Yo creo, no porque sea el personaje que me ha tocado interpretar a mí, pero Pol es uno de los personajes que más marca a Merlí, precisamente por dónde habría podido acabar Pol sin Merlí y dónde acaba Pol: se se ha reconducido en los estudios, se le ve motivado, iba a dejar el colegio en la primera temporada y en la segunda se habría puesto a trabajar en un bar para ayudar a su familia económicamente.
Carlos Cuevas, como Pol, en 'Merlí'
Que lo ha hecho.
Lo ha hecho, pero pese a hacerlo para salvar la papeleta económica, Pol encuentra una motivación en la filosofía que si no llega a ser por Merlí no hubiera existido. Entonces, para esa capacidad reflexiva de Merlí el mejor heredero es Pol porque, probablemente sin Pol, Merlí hubiera cometido errores y hubiera podido ser diferente pero yo estoy seguro que hubiera estado estudiando una carrera porque era lo que sus padres le llamaban a hacer. Con Pol hay un cambio muy drástico, puesto que, con y sin Merlí, es un antes y un después.
Me ha llegado algún rumor sobre un spin off con el personaje de Pol
¿Se ha planteado, o tú en tu cabeza, un spin off de Pol?
A mí en algún momento me ha llegado algún rumor pero solo son rumores y lo que sí que está claro es que tendría que ser de una manera muy diferente porque la serie se llama 'Merlí' por la identidad que tiene este personaje. Se tendría que dar muchísimo la vuelta y no creo que sea algo que se vaya a hacer nunca pero sí que he oído en algún momento cómo se batían las aguas. No creo que sea algo que esté sobre la mesa, al menos de manera inmediata.
Imagínate que ahora, gracias a las plataformas digitales, dicen de continuar. ¿Tú seguirías?
Claro, pero es un escenario que no se ha dado y no creo que se vaya a dar. Es un personaje que me ha dado mucho, con el que me lo paso muy bien, que me hace salir muchísimo de mí, que eso es algo que me estimula, y nunca lo vería con malos ojos pero no está sobre la mesa en ningún caso.
He rechazado muchos proyectos por incompatibilidad de rodaje con 'Merlí'
¿En algún momento, fichando por otra serie, te planteaste dejar 'Merlí' como hizo David Solans?
Nunca, al contrario. He rechazado muchos proyectos por incompatibilidad de rodaje con 'Merlí'. He tenido que decir no a teatro, a alguna propuesta interesante de tele, a una película... pero porque me compensaba tremendamente 'Merlí'. Por los motivos que te he dicho, creemos en la serie, creo en el personaje en particular. Yo trabajé en TV3 muchos años cuando era pequeño en una serie, unos 6 años, por lo tanto yo había trabajado mucho en la cadena y se me conocía en Cataluña. Con 'Merlí' se me daba la oportunidad de volver como adulto, como un actor con las ideas claras y no como un niño que se lo pasaba genial haciendo lo que hacía pero que era un niño actor, en ningún caso un adulto. A mí me apetecía mucho volver a TV3 ya habiendo crecido y siendo ya un actor muy lejos del niño que vio la gente cinco o 6 años por la tele.
¿Crees que la marcha del personaje de Bruno hizo que tú ganaras protagonismo en la serie?
Sí, absolutamente, Bruno tenía mucho peso en la balanza de los adolescentes y se tuvo que compensar. El peso que tenía David Solans en la trama se ha tenido que repartir y yo creo que se ha repartido bastante bien entre Tania, Pol y Marc.
Pol y Bruno en 'Merlí'
La llegada de Bruno lo desestabiliza todo porque lo de Bruno nunca ha estado cerrado
El personaje de Bruno ha vuelto, justo cuando parecía que Pol había encontrado el amor verdadero. Cuéntame cuáles son tus sentimientos ahora, ya que Pol siente algo por ambos y encima por las dos de las personas que más le han ayudado a quitarse las corazas.
Sí, yo creo que Pol está en una gran encruzijada. Para él, confesar su amor hacia Tania y dejarse de los clichés y de los tabúes y de la idea que él tenía que proyectar hacia el conjunto de la clase. Ahí creo que rompe muchas cosas, pero la llegada de Bruno lo desestabiliza todo porque lo de Bruno nunca ha estado cerrado. Bruno se va a Roma, pero antes de despedirse se dan un beso en la boca y esto no se cuenta, pero probablemente los dos personajes han hablado por Whatsapp durante todo este tiempo. No han cortado el contacto, entonces cuando se ven por primera vez después de un tiempo, a Pol se le remueven cosas.
Pero no nos podemos olvidar de que él ahora está con Tania.
Su cabeza tiene claro que quiere seguir con Tania y que está enamorado de él, pero su cuerpo le dice un discurso distinto. Se ve en la cena de tres, que hay un juego extraño debajo de la mesa, y se ve también en la última secuencia cuando Pol se despide de su compañero en el supermercado que le dice: "¿Es posible que te gusten dos personas a la vez?". Yo creo que eso es lo que le pasa a Pol, que tiene un problema de que le gustan dos personas, además de diferente género, que lo complica todavía más. Pol en esta temporada ha ganado en madurez y es consciente de lo que es hacer daño a un tercero. Eso no habría pasado en la primera temporada, que le habría dado igual, pero en esta tercera temporada con todo lo que Merlí le ha traspasado, con todo lo que ha vivido, con el cariño que tiene por ambos, porque son los dos personajes que más le han ayudado durante las tres temporadas, que coincide con la etapa adolescente, la etapa formativa por excelencia. Por lo tanto Pol tiene clarísimo que no quiere herir a nadie, entonces veremos en el último capítulo por dónde van los tiros. Él tiene sentimientos encontrados en relación con lo que le dice el cuerpo y lo que le dice la cabeza.
A pesar de que tiene este problema ¿es la etapa más feliz de Pol?
Sí, porque está liberado. Yo creo que el esconder, el tapar los sentimientos, frustra de alguna manera y hace que estemos irritables, hace que no disfrutemos tanto de lo que nos rodea como cuando estamos libres y nos sentimos en paz con todo a nuestro alrededor. Yo creo que Pol cambia al haberse liberado de los tabúes que tenía en su cabeza y al haber aceptado su condición de persona que ama libremente al ser que se encuentre. Esto sumado a los personajes que se ha ido encontrando a lo largo de la serie. Efre en el súper o Miriam en la segunda temporada son personajes que le dan herramientas para poder descifrarse a él mismo. Pol también recupera la relación con su padre, con su hermano por todo el tema de la droga que les ha unido mucho y ahora pueden afrontar los problemas juntos. Yo creo que esto hace que Pol sea un personaje más rico y más maduro, sobretodo a nivel emocional y le supone una ventaja al estar viviendo lo que vive. También juegan con una cosa bonita que es el contrarreloj de que se acaba el bachillerato, y nos ha pasado a muchos que con la gente a la que quieres siguen en contacto pero hay gente con la que te ves cada mucho tiempo o haces una cena al año para mantener el contacto. También hay esta cosa del "carpe diem", de aprovechar al máximo esta etapa que nos une, que probablemente no la volvamos a vivir.
Lo bueno es que a vosotros, como actores, no os pasa eso, porque sois una pandilla.
Sí, nos hemos juntado un grupo de más o menos la misma edad, la misma ciudad, con las mismas inquietudes... Está claro que tenemos carácteres diferentes y entre algunos somos más compañeros que amigos, pero yo me llevo personalmente grandes amigos. Yo ahora tengo gente en mi vida que no tenía antes, que me ayudan, que forman parte de mi día a día y son de los pilares más importantes de mi vida. También me llevo grandísimos compañeros con los que nos une muchísimo la relación laboral y fuera de ello no hay contacto pero hay un cariño maravilloso.
Lo mejor que le puede pasar a 'Merlí' es que al final los alumnos recojan la antorcha que Merlí les cede para que sigan adelante en sus vidas
Tú como espectador, ¿cómo te gustaría que acabase tanto el triángulo como Pol en la serie?
Esta serie va de lo que un profesor intenta transmitir a sus alumnos y de cómo el amor por la docencia, el amor por unas ideas y por una manera de pensar, el inconformismo o la capacidad crítica se trasladan a unos alumnos. Lo mejor que le puede pasar a 'Merlí' es que el final de la serie tenga que ver con que los alumnos recojan la antorcha que Merlí les cede para que sigan adelante en sus vidas. Yo creo que el mejor final posible que tenga 'Merlí' es que Merlí haya forjado personas libres, personas adultas, personas con capacidad crítica y que este profesor les acompañe toda la vida gracias a los años maravillosos que ha pasado en el instituto. Todos hemos tenido profesores que nos han marcado, pero no sé si tanto como Merlí. Yo creo que es una serie hecha para que estos personajes crecieran con Merlí, aprendieran lo que tenían que aprender de él y aprendieran a ser ellos mismos. John Lennon dijo una vez: "El mensaje que dieron Los Beatles en los 70 era nadar y una vez que apredieron a nadar, a nadar solos". Lo que vengo a decir es que yo creo que con 'Merlí' pasa lo mismo. Merlí pone unas bases y a partir de ahí escoge tú libremente y sé tú mismo. Tampoco es un adoctrinamiento, que está tan de moda la palabra, ideológico sino que es algo tremendamente libre y tremendamente más democrático.
Pol y Tania en 'Merlí'
¿Cómo crees que sería la docencia si todos los profesores fueran como Merlí?
Yo creo que tiene que haber un poquito de todo. Se tiene que compensar la balanza entre Apolo y Dionisio, los dos espíritus del hombre. Lo que sí que tendría que ser y que no sería incompatible, sería un profesor que estuviera a favor de la libertad crítica, de la libertad de pensamiento y que enseñara a los alumnos a ser entes individuales, reflexivos y que no tengan miedo de dudar de lo que han aprendido, de cómo los han educado ni de sus propias ideas. Forjar personas libres y valientes es el camino a seguir. Luego podríamos discutir sobre el carácter de Merlí, de sus métodos poco ortodoxos, sobre cómo se salta las leyes muchas veces o de cómo traspasa límites muchas veces que no debería traspasar, pero porque uno de los éxitos de Merlí es que no es un héroe, es un antihéroe. Es un personaje que desde el minuto cero se presenta con defectos, con sus miedos y sus inseguridades. En esta temporada hemos visto la etapa más oscura de Merlí, con su soledad, con su madre trabajando fuera, con su hijo fuera en Roma. Hemos visto un Merlí frágil, a un Merlí enfrentándose a la ruptura con su pareja. Nunca se ha presentado a Merlí como un héroe.
La ficción no tiene que ser nunca sinónimo de moralidad. No tenemos que esperar que una serie sea una catequesis
Lo que se tiene que esperar de Merlí es que sea un buen profesor, no que sea un ejemplo en su vida cotidiana. Yo siempre pongo el mismo ejemplo cuando nos preguntan por la repercusión en las calles o en las redes. Yo considero que soy una persona educada con la gente que se interesa por mí y con la gente que me para y me pide una foto. Pero al final, lo que tienes que querer de alguien es que haga bien su profesión. Yo si quiero un médico quiero que sea un buen médico, me da igual si es un borde. Prefiero que sea un borde y buen médico a que sea un buen tío y un mal médico. De Merlí a mí me da igual que sea un tío que va de putas. Los alumnos lo que les tiene que importar es que les traslade bien sus conocimientos. Es interesante porque a veces he leído que cómo puede ser que se retrate así a un docente. Primero, que la ficción no tiene que ser nunca sinónimo de moralidad, no tiene que llevar la bandera de los buenos hábitos, si no no existirían películas como "El padrino". Entonces yo creo que que Merlí sea un tío con defectos y que en determinados momentos obre mal y objetivamente se equivoque, lo enriquece como personaje y hace que el público empatice con él. No tenemos que esperar que una serie sea una catequesis. Yo hago un llamamiento de la libertad en la ficción y de que el autor pueda escribir el tipo de personaje que le venga en gana, más allá de lo que traslade a la sociedad. Si no no habría cine sobre drogadicción o sobre asesinatos, sería todo muy aburrido.
El referente de 'Merlí', claramente, ha sido siempre "El club de los poetas muertos"
Yo creo que esa naturalidad de los personajes y ese humanismo que se muestra tan real, es lo que la diferencia de series como 'Física o química' que es un poco con lo que al principio se tendía a comparar 'Merlí'.
Sí. Bueno, no sé si en España ha llegado esta comparativa, pero aquí nunca se ha establecido. Yo creo que desde muy al principio se dio cuenta de que partían de puntos muy diferentes. Son dos series que no son incompatibles la una con la otra. Cada una poca el foco donde le interesa de las relaciones adolescentes y de un instituto. El referente de 'Merlí', claramente, ha sido siempre "El club de los poetas muertos" y creo que dista mucho de 'Física o química'. Son dos series muy diferentes que pese a tener personajes de la misma edad y del mismo contexto, pretenden contar cosas diferentes al público, o al menos de una manera diferente. Yo nunca he visto un capítulo de 'Física o química' como un referente para 'Merlí'. No porque lo considere un antirrefrente, sino porque sé que son cosas que van en paralelo y que no tienen nada que ver. Yo me sé de memoria y me he visto doscientas mil veces "El indomable Will Hunting", que yo creo que es la peli que más se acerca al personaje de Pol y a su relación con Merlí. El primer día que llegamos, Eduard Cortés nos dijo que uno de sus referentes era la vida de él. Sobre cómo tratar las relaciones adolescentes, sobre cómo él quería rodar la serie por lo tanto teníamos muy claro en qué línea íbamos a trabajar, no porque la otra no nos gustara, sino porque era otra. No hacía falta repetir algo que ya estaba hecho.
Con todos los valores que ha ido enseñando Merlí, ¿con cuál te quedas tú?
Lo tengo muy claro. Creo que para mí, y para el conjunto de la serie también, me quedo con dos capítulos. El primero es el 9 de la segunda temporada, que es un homenaje al "Breakfast Club", que es cuando nos quedamos 5 castigados en clase debatiendo alrededor de una idea que ha lanzado Merlí en la pizarra. Luego, el capítulo 11 de la tercera temporada, que es el capítulo en el que Pol y Merlí hacen un trabajo de investigación. Yo creo que ambos capítulos tienen que ver con la libertad de pensamiento, es un grito a la reflexión individual y al creer en uno mismo. Merlí traslada muy bien el hecho de que tú eres capaz de transmitir por ti mismo, y que tú eres un ente crítico y libre de pensamiento. Serían un gran resumen y si presentara la serie en un festival y solo pudiera presentar un capítulo, sería uno de estos dos.
Pol recoge el testimonio de Merlí, le coge el relevo
En lo referido al libre pensamiento, ¿es a Pol al que más le ha calado el concepto?
Objetivamente cala a todos los alumnos, y sus ideas afectan a muchos de los personajes, pero de los que afecta de manera más directa es a Pol y a Bruno también sin lugar a dudas porque es su hijo. Pol recoge el testimonio de Merlí, le coge el relevo. Pol es un personaje que integra sus ideas, que las procesa, que las interioriza, cree en ellas y a partir de aquí puede ser un gran precursor de sus ideas. Sin lugar a dudas, le ha ayudado mucho a forjar su personalidad por lo tanto es uno de los personajes que tiene Merlí más dentro.
Pol con un libro de filosofía en 'Merlí'
¿Cómo habéis vivido el boom durante estos tres años? ¿Os lo esperabais?
No, para nada. Nosotros sabíamos que teníamos muy buena materia prima entre manos porque es brillante que cada capítulo tenga que ver con un filósofo y con una idea. Es acercar la filosofía y la libertad de pensamiento a los chavales y al conjunto de la audiencia. Creo que esto es positivo y que es una idea maravillosa, pero nunca sabes cómo va a ir. Teníamos la intuición de que era muy buen material, pero hasta que no se levanta, se ejecuta, se monta y se emite, el cómo lo acoge el público es toda una incógnita. Cuando alguien escribe algo, siempre piensa que va a ser un éxito, si no no iría hacia adelante. Todo el mundo, cuando está a punto de parir un proyecto, tiene que ser consciente de que tiene algo muy bueno entre manos, si no cambias la idea o escribes otra cosa. Por lo tanto nos sorprendió muchísimo y nos hace muy feliz que se vea tanto. La repercusión en las calles o en las redes sociales es apabullante, es de otro nivel. Yo llevo desde pequeño currando en la tele y siempre me han reconocido por la calle pero nunca a este nivel. Al nivel de que no puedes comer tranquilo en un restaurante, ir de fiesta para mí es imposible, a mí me paran con el casco de la moto puesto. Es algo a lo que te acostumbras y con lo que tienes que lidiar. Yo siempre digo que la tele te da esto cuando estás en pantalla, pero cuando no estás en pantalla esto baja como un suflé. De aquí a tres meses va a pasar a un 20% de lo que es ahora.
Quizá uno de los éxitos es que la serie, con tantos personajes como tiene, es capaz de hacer empalizar a cualquiera
Pero nos hace muy feliz por lo que cuenta la serie, no tiene nada que ver con nuestros egos personales si es que alguno todavía lo tiene. Creo que si creemos en lo que la serie cuenta, que llegue tanto al público y que haya calado tan hondo es tremendamente positivo porque esos mensajes que se lanzan han llegado de alguna manera. A mí lo que más feliz me hace, con todo el cariño a la gente de mi generación, me hace muy feliz cuando me viene un adulto y me dice: "Hostia, lo que hablasteis en el capítulo del otro día ha servido en casa para hablar de tal, era un tema tabú y de golpe gracias a 'Merlí' lo hemos sacado encima de la mesa y hemos podido hablar cosas". Un adolescente es altamente manipulable y altamente fácil de convencer, pero que un señor de 50 años con su vida establecida, con sus ideas claras, te diga que gracias a un capítulo que hablaba de Nietzsche se ha replanteado cosas que tienen que ver con la educación de sus hijos o con la relación con su pareja, a mí me hace tremendamente feliz. Quizá uno de los éxitos es que la serie, con tantos personajes como tiene, es capaz de hacer empalizar a cualquiera.
A cualquiera y en cualquier lugar del mundo...
Estamos muy felices con las ventas internacionales y con las ventas más allá de TV3. Ahora mismo está en Filmin, está en Movistar+, Canal+ Francia la está pasando, en Alemania han comprado los derechos para hacer su propia versión, con otros países se está negociando también la venta y lo más ha sido la venta a Netflix, que se ha instalado una locura en Latinoamérica. Estuve de vacaciones este verano en Costa Rica y Panamá y me paraban más allí que aquí. Estuve haciendo escala en Nueva York y en Houston, y me reconocieron en dos horas que estuve allí. Es la confirmación de que no hay fronteras ya en el mundo audiovisual. Una serie que grabamos en un barrio de Barcelona en el mes de julio, se puede estar viendo en Venezuela. Nos hace feliz por la serie y por Héctor Lozano, es lo que él ha parido. La serie es tal y como él la ha querido hacer y creo que se lo merece porque es un tío con muchísimo talento, que escribe de maravilla, simpático con los actores, generoso con el director. Con él se puede hablar, se pueden debatir cosas, ayuda, suma, es una esponja y el tío es muy listo, ha aprovechado muy bien qué personajes se llevan bien o no. Ha sido muy generoso con él mismo también a la hora de reubicar sus tramas. Para él que se fuera Bruno fue un golpe, no es una idea de guion. Él en lugar de hundirse o de concebirlo como algo catastrófico lo jugó a su favor. Potenció el sentimiento de soledad de Merlí o la relación de Pol y Tania, o sea que es un tío maleable. Estamos encantado con él y nos alegramos mucho por Héctor, de que esta serie se vea lejos, que guste y que haya tenido buena crítica. Él es el gran merecedor de todo esto.
Con tanta venta de 'Merlí', pero habiéndose emitido inicialmente en TV3, ¿dónde crees que está el límite de los spoilers? ¿Cuánto tiene que pasar para poder hablar de algo?
El problema es que se ha vendido en sitios muy diferentes, cadenas muy diferentes. Creo que no ha habido ninguna campaña conjunta para promocionar 'Merlí' pero porque también por otro lado no se preveía toda esta venta. Nos encontramos en un momento en el que nosotros promocionamos los capítulos de aquí y hay gente en Argentina que se traga unos spoilers que no se los cree nadie. Pero sí que intentamos ir con cuidado, pero no sé hasta qué punto es nuestra responsabilidad. Sabemos que hay que ir con cuidado porque sabemos que en muchos países todavía la están esperando, pero es muy difícil con las redes sociales. De cualquier momento se hacen cincuenta mil memes y pantallazos. Es fácil que de alguna manera estas fotos lleguen a un sitio donde no quieran llegar.
Pese a los grandes competidores hemos seguido siendo líderes siempre o casi siempre
A nivel España también ha sido un éxito y durante esta temporada ha tenido que competir contra pesos pesados como 'OT 2017' o 'La que se avecina'.
No nos podemos quejar. La audiencia es buenísima, pese a los grandes competidores hemos seguido siendo líderes siempre o casi siempre. Yo en el resto de España no tenía la sensación de que se veía tanto, pero sí que es una serie que está en buena consideración. Cuando alguien habla de 'Merlí' u oye hablar de 'Merlí', aunque no la haya visto tiene la sensación de que esa serie mola un poco. La hayan visto o no, la sensación de que es una serie bien hecha y con gusto.
Marcos (Cuevas), Oriol e Inés en 'Cuéntame'
Estás también en 'Cuéntame', ¿qué nos puedes contar de Marcos en esta temporada?
Durante la temporada anterior fue como una etapa de presentación y en esta segunda vamos a profundizar en quién es este chaval, de qué manera se comporta y vamos a ver cómo afianza su relación con Inés y cómo se desenvuelve en esta nueva vida que le ha tocado vivir. Es un personaje que viene de otra movida, que vivía en otro país y llega a España y la vida le cambia de un día para otro. Entonces creo que es una temporada muy intensa, muy muy interesante. Hablando de mi trama con Inés se van a vivir muchas cosas. Van a surgir conflictos que no habían sufrido en la anterior y veremos a ver a dónde llegan, porque yo no tengo los guiones todavía.
Ahora que la relación con Inés está más asentada, ¿cómo va a afectarte la familia Alcántara?
Yo creo que la familia siempre ha acogido bien a este personaje. Sí que al principio había la duda de que era un chico muy joven y que era una relación con diferencia de edad, pero Marcos siempre ha demostrado que es un tío en el que se puede confiar y que está realmente enamorado de ella y que tiene muchas ganas de cuidarla a ella y a su hijo. Por lo tanto creo que con la familia bien. Ya veremos cómo se desarrolla la temporada y cómo ellos dos viven esto porque la temporada anterior terminó con mi personaje diciendo que acepta un trabajo en Interviú en el que tiene que viajar por cinco o seis países tratando sobre droga. Este es el punto de partida de la temporada y veremos dónde nos lleva.
Eres el novio de Inés pero al primero que conocimos lo interpretaba Pere Ponce, Eugeni en 'Merlí'. ¿Te dio consejos para trabajar en la serie?
Sí, lo hablamos a menudo. Cuando empecé en 'Merlí' todavía no estaba en 'Cuéntame', y cuando entré y supe qué personaje iba a hacer, lo hablé con Pere Ponce y él se moría de risa. Me decía: "No me lo creo, pero ¿qué haces? Que es mucho mayor que tú, tío". Pero es maravilloso y ojalá un día llegue yo a ser como Pere.
Ricardo Gómez y yo somos la misma persona, pero uno en Madrid y el otro en Barcelona
Siendo tan amigo de Ricardo Gómez, ¿no te gustaría tener más tramas con el personaje de Carlos?
Nos encantaría, siempre lo decimos, nos hemos hecho muy muy amigos. Cuando nos conocimos los dos dijimos algo similar, como que somos la misma persona, uno en Madrid y el otro en Barcelona pero con vidas muy parecidas, con contextos personales también muy parecidos y de carácter también muy parecidos. Nos hemos entendido muy bien, somos muy amigos y claro, nos encantaría currar más juntos. Yo siempre que voy a Madrid, voy a dormir a su casa y lo veo continuamente por lo tanto estaría bien vernos currando. Currar con Irene Visedo (Inés) también es fantástico, pero sí que es verdad que trabajar más con Ricardo me gustaría.