8 grandes frases de Belén López Vázquez en 'Aquí no hay quien viva'

Nacida el 21 de enero de 1974 en Argentina, Malena Grisel Alterio Bacaicoa, más conocida como Malena Alterio, es una de las actrices nacionales más populares y que destacó en la década de los 2000 por su papel de Belén en 'Aquí no hay quien viva', una de las series más exitosas no solo de Antena 3, sino también de la historia de la televisión. Sin embargo, su profesión no se limita a su participación en la serie de los hermanos Caballero, y es que la actriz ha participado tanto de manera regular como episódica en distintas series, como 'El comisario', 'Rabia', 'Frágiles', 'Buen agente' o 'Vergüenza'.

Cuando en 2003 Antena 3 decidía estrenar 'Aquí no hay quien viva', ninguno de los actores y actrices que integraban el reparto de la ficción imaginaban el grandísimo éxito que acabaría teniendo la misma. Con más de un 30% y cerca de 6 millones de espectadores de media, a lo largo de las cinco temporadas que compusieron la serie, 'ANHQV' se convirtió en un escaparate nacional de una serie de actores que, de la noche a la mañana, se erigieron como auténticas estrellas, entre ellos, Malena Alterio. Un gran porcentaje de la audiencia se identificó con su personaje, el de Belén López, debido a su malhumorado y negativo carácter ante ciertas situaciones de la vida. Desde FormulaTV hemos querido rendir nuestro particular homenaje a este personaje que tantas risas provocó en el espectador, gracias a numerosas frases que conquistaron al público.

1 "Vete un poquito a la mierda"

Como muchos otros personajes de series de televisión, Belén López también tenía ciertos chascarrillos, en especial cuando compartía plano con otros personajes de la comunidad de vecinos en la que se ambientaba la ficción. Uno de sus mayores contrapuntos en esta comedia era el portero, Emilio Delgado, con quien además de compartir vivienda, compartía una estrecha relación sentimental. Fue precisamente este vínculo de "amodio" lo que en numerosas ocasiones generaba una gran expectación en la audiencia, y como consecuencia de sus desencuentros siempre salía a relucir la frase "Vete un poquito a la mierda".

2 "Yo de pequeña hacía gimnasia rítmica y tengo los músculos de la vagina muy desarrollados"

"El portero y la del tercero", así era cómo aludían algunos de los vecinos de Desengaño 21 a Belén y Emilio. Ya hemos comentado cómo la relación de ambos es una montaña rusa de idas y venidas, pero si había algo que (casi) siempre funcionaba entre ellos era el tema del sexo. Era en estos lares en los que tanto uno como otro salía en defensa propia, si se veían atacados en cuanto a sus habilidades sexuales. Por ello, en una de estas situaciones era cuando Belén se defendía de las acusaciones por parte de Emilio, sobre su inactividad sexual en la cama, y argumentaba lo siguiente: "Yo de pequeña hacía gimnasia rítmica y tengo los músculos de la vagina muy desarrollados".

3 "Imbécil"

El malhumorado carácter de Belén se fue ablandando a medida que pasaban las temporadas, pero hubo una palabra que reflejaba a la perfección la personalidad de esta inquilina de Desengaño 21 a lo largo de las cinco temporadas de la serie. "Imbécil" era la frase que más empleaba Belén para desahogarse frente a distintos personajes, pero indudablemente, el mayor afectado de tal insulto no era otro que Emilio. No podemos olvidar la mítica escena de la comedia en la que el portero se colaba desnudo en el inmueble de Belén, pensando que se trataba de una prostituta.

4 "El último, eh, el último"

La relación entre Emilio y Belén dio de sí, como decimos, durante 5 temporadas y 90 episodios. Una vez más tenemos que hablar de su complicidad en el ámbito sexual, la cual era tan intensa y estrecha a la par que adictiva, lo que provocaba que los dos protagonistas tuviesen el empeño por repetir el acto sexual, en algunas ocasiones, de manera repetitiva, a lo que Belén siempre respondía lo siguiente: "El último, eh, el último". Sin duda, estas escenas fueran algunas de las más divertidas que pudimos ver a lo largo de las distintas temporadas, gracias a los contrastes entre ambos personajes.

5 "Mire Doña Concha, le voy a decir algo que llevo mucho tiempo queriéndole decir: váyase usted a la mierda"

Aunque hay que reconocer que el carácter de Belén siempre se antojaba un tanto complicado, lo cierto es que el mismo era resultado de una serie de ataques vecinales, entre los cuales, el mayor verdugo de los mismos era su casera, Doña Concha. La anciana se caracterizaba por entrar a la vivienda sin avisar previamente, incumpliendo una serie de elementos contractuales, así como amenazar constantemente a Belén y Alicia con incrementar el alquiler del piso. Por todo ello, en uno de los capítulos, Belén explotaba ante la insistente molestia de su casera y vecina, y le espetaba lo siguiente: "Mire Doña Concha, le voy a decir algo que llevo mucho tiempo queriéndole decir: váyase usted a la mierda".

6 "Voy a acabar sola y amargada"

La negatividad y pesimismo de la vecina de Desengaño 21 se hacía notar en cada una de sus frases y, sin duda, la que más llamaba la atención no solo del espectador, sino también del resto del vecindario, especialmente de su grupo de amigos, Lucía, Alicia, Bea o Mauri, era aquella que decía "Voy a acabar sola y amargada". Hay que recordar que, a pesar de que la joven reiteraba en numerosas ocasiones su mala fortuna en el amor, lo cierto es que Belén contó con varios novios e incluso maridos, como Pedro Peñafiel o el propio Emilio, además de noviazgos pasajeros con Carlos, Roberto, el terapeuta argentino, o Paco, entre otros.

7 "Concha, tus golfas no te olvidan"

Una de las tramas que siempre quedarán en el recuerdo del espectador es aquella en la que tanto Alicia como Belén piensan que Concha ha fallecido y, por ello, acuden al hospital con una corona de flores en la que se podía leer un mensaje que decía lo siguiente: "Concha, tus golfas no te olvidan". Se trataba de un capítulo en el que se mostraba la parte más sentimental de las dos inquilinas, pues, a pesar del continuo rifirrafe que había entre casera e inquilinas, la supuesta muerte de la primera servía para demostrar el verdadero cariño de las chicas hacia la anciana.

8 "En el campo y con tacones, parezco un travesti"

A pesar de que la relación entre Emilio y Belén acababa la mayor parte de las veces en polémica y conflicto, la verdad es que no podemos obviar la gran cantidad de momentos cariñosos, aun envueltos de discusiones, que ambos personajes tuvieron entre ellos. Por ejemplo, queremos recordar el capítulo en el que Emilio quiere sorprender a Belén llevándole a un sitio diferente, lo que ilusiona a la misma ante la posible idea de ser un sitio elegante, pero nada más lejos de la realidad. La pareja termina la cita en un paraje natural protegido en donde hacen fuego, sin saber que esto estaba prohibido. La indignación de Belén, ante la situación, era tal que la propia gritaba lo siguiente: "En el campo y con tacones, parezco un travesti".