SIN PELOS EN LA LENGUA

Lidón, el soltero más radical de 'First dates': "Que coño le importa si no la voy a ver más en mi puta vida"

Él y su cita Esther protagonizaron uno de los momentos más tensos e incómodos de la historia del programa de Cuatro.

Por Elena Ruiz El 3 de Marzo 2018 | 11:37

La química y el feeling no siempre son los ingredientes que predominan en las citas que pasan por el restaurante de 'First Dates'. Precisamente eso fue lo que pasó en la noche del 2 de marzo, cuando Esther y Lidón dejaron claro desde el primer momento que no iban a salir juntos del dating. Fue el soltero el que más tensión creó entre ambos, algo que justificó con lo hambriento que se sentía.

Esther y Lidón durante su cita en 'First Dates'

La joven soltera decidió iniciar su cita demostrando sus dotes musicales con el tambor, pero ante este recibimiento, quiso "llorar e irse de allí". Conforme iba avanzando la cita, la tensión entre la valenciana y el sevillano iba en aumento. Esther era la que tiraba del carro haciéndole preguntas a Lidón, pero él se limitaba a contestar de manera escueta. "Creo que las cosas no hay que forzarlas, hay que ser un poquito más natural y ver si la otra persona se abre", confesó él.

El chico reconocía que le gustaba leer, y ella bromeó con que las "únicas cosas que leía eran noticias de Bisbal". Sin embargo, el soltero calificó de "absurda" esa anécdota. "Al no sentirme cómodo no le quería contar mucho más porque era perder tiempo. ¡Qué coño le importa mi vida si no la voy a ver más en mi puta vida!", confesó el sevillano ante las cámaras del dating de Cuatro.

Lidón: "Soy un poco capullo"

Una vez la comida llegó a la mesa y Lidón comenzó a comer, la expresión de su cara cambió de manera radical. Esther reconocía que a su cita le había cambiado el humor al tener el estómago lleno, algo que él secundó. Al finalizar la cita, tanto el sevillano como la valenciana decidían irse a casa solos. "Lo malo que tengo es que entre que se me ha juntado el hambre y que a mí se me nota todo, he estado un poco frío y un poco distante", afirmó Lidón, reconociendo que era "un poco capullo".