Esther se convirtió en una de las grandes protagonistas de 'First Dates' emitido en la noche del viernes 30 de marzo. La mujer, que parecía tener muy claro lo que estaba buscando, lanzó una serie de críticas contra quien era su cita, Tito, un barrendero padre de dos hijos, que no pasaron desapercibidas. Ya al poco de iniciar la cita, criticó con dureza los tatuajes de sus manos: "Me parecen un poco chabacanos y horteras".
Tito y Esther rechazan tener una segunda cita en su decisión final en 'First Dates'
Curiosa, Esther comenzó un pequeño interrogatorio preguntando a su cita si tenía animales. Así fue como, tirando del hilo, descubrió que Tito tiene dos hijos. "Yo no tengo hijos ni los voy a tener", anunció Esther, tajante, aunque admitió que le encantaban los niños. "A estas alturas de la vida, que ya no tengo niños, lo que no voy a hacer es cargar con los hijos de los demás", comentó, sin perder la determinación.
"Me ha parecido que está equivocada", señaló Tito, fuera de la cita. "Que yo o cualquier persona tenga hijos, no implica que esté buscando una persona para que cargue con ellos", concluyó el comensal. "No estoy dispuesta a ser un segundo papel", replicó Esther cuando su cita indicó que lo primero, para él, son sus hijos. La perplejidad de Esther fue en aumento al enterarse de que los dos hijos de Tito eran de mujeres diferentes. "Me hace pensar que no es una persona que quiera cierta estabilidad en su vida y que va teniendo hijos a diestro y siniestro", admitió Esther, fuera de su cita con Tito.
"Poco hombre"
"No lo entiendo. Eres feo, trabajas de barrendero, y encima tienes dos hijos de dos personas distintas y pretendes que yo me adapte a tus horarios. Perdona, para eso acude a otra persona que, por horas, te puede ayudar, no yo", comentó Esther, ante las cámaras de 'First Dates'. Ya hacia el final de la cita, Tito preguntó si pagaban a medias. "Como quieras. Normalmente, los hombres suelen invitar, pero si no ha habido buen rollo y lo consideras oportuno, de acuerdo", soltó la comensal, que no dudó en criticar a Tito por "ser tan poco hombre".
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"Por eso no quiero un hombre que tenga hijos, porque el poco dinero que tiene se lo tiene que gastar en ellos, no en la otra persona", comentó la comensal, fuera de la cita. Esther, quien se definía como "enfriada", pareció extender ese frío y contagiárselo a Tito, quien rechazó una posible segunda cita, al igual que ella, en un último encuentro ante las cámaras que destacó por ser frío, breve y muy escueto.