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El pasado domingo 22 de abril comenzó la tercera temporada de 'Comedy Central News (CCN)'. El espacio de humor de Comedy Central vuelve con nuevos programas cargados de humor donde se tratarán temas como las bodas, las influencers o los ultras del deporte, entre otros. Como cada año, el presentador Antonio Castelo cuenta con una lista de colaboradores de confianza para exprimir cada guion al máximo.
Manuel Burque, Miguel Iríbar y Edu Galán continúan una temporada más, pero el espacio recibe a un flamante fichaje: Marta Flich. La actriz y economista se une a 'CCN' para hablar de asuntos económicos junto a Castelo y darle un toque aún más sarcástico a los temas semanales. FormulaTV entrevista a Marta Flich para saber cómo ha sido su incorporación a un equipo ya formado, cómo ve la situación de las mujeres en el humor y proyectos en los que le gustaría participar, entre otros temas.Marta Flich, fichaje de la tercera temporada de 'CCN'
¿Cómo surgió tu unión para la tercera temporada de 'Comedy Central News'?
Surgió porque me llamó directamente el director, Alex, y me dijo que les interesaba mi perfil por la forma tan irónica de ver la economía. Porque en esta tercera temporada se va a combinar el humor con un componente de rigor muy importante. Entonces pensaban que yo podía sumar a ese nuevo concepto, ese valor añadido para los nuevos programas.
Es decir, vamos a verte sacar tus técnicas de economista, ¿pero vas a sacar también tu lado de actriz?
Sí, todo lo que hago siempre tiene algo de personaje que es lo que me permite ser bastante sarcástica muchas veces. Mi sección se llama "El tema de la pasta lo lleva Marta Flich" y voy a analizar la cara B de los negocios que no se ve. El negocio detrás de las bodas, del miedo, de la seguridad privada... Voy un poco a retorcer el colmillo para explicarlo, pero siempre con mucho humor y muy respetuoso.
¿Los que te conozcan de tus videos de YouTube o de la radio van a disfrutar a una Marta Flich diferente?
Bueno, van a disfrutar un poco más de mí porque voy a estar un pelín más de tiempo. Y la relación que tengo con Castelo es estupenda, van a ver más vertientes pero sí me van a reconocer.
¿Cómo ha sido la relación con tus compañeros? Porque Castelo, Manuel Burque, Edu Galán y Miguel Iríbar ya llevan tiempo en el espacio y conocen la forma de trabajar entre ellos.
Les conocía personalmente, pero nunca había currado con ellos, no sabía su forma de trabajar. El aterrizar fue sencillísimo porque somos personas muy diferentes y le aportamos cosas variadas al programa, pero tenemos un denominador común y es que somos creativos, tenemos un proceso intelectual y un humor bastante parecido y hemos encajado muy bien. Como compañeros son excelentes y la relación que tengo con todos es maravillosa y, concretamente con Castelo que es el presentador, hemos encajado y empastado estupendamente.
¿El nuevo horario del programa permite dar libertad al guion o trabajáis sin tener en cuenta cuando se vaya a emitir?
No tenemos en cuenta cuando se coloque. En términos de guion, no hemos vivido censura ninguna en cuanto al horario. Sí es verdad que es un programa gamberro en ese sentido y hemos ampliado a 20 minutos. A priori no hay ninguna restricción de guion y nos hemos podido permitir las licencias que hemos considerado. Estamos haciendo humor y el que venga ofendido, es porque viene ofendido de casa.
El que venga ofendido, viene ofendido de casa
El pasado verano la audiencia pudo verte en 'Mad in Spain', el espacio de debate de Telecinco, que es muy diferente al formato de 'CNN'. ¿Por qué este cambio tan radical de programa?
A mí me interesa la versatilidad, es un valor en alza. Y soy actriz y economista, básicamente me siendo comunicadora. Todos los espacios en los que pueda manifestar mi opinión o dar rienda suelta a mi creatividad, respetando siempre mi personalidad artística, mi criterio y mi coherencia, por supuesto que voy a aceptarlos. Y 'Mad in Spain' era un formato de debate pero también relajado que invitaba mucho a poder introducir el humor y a mi me encanta. Me considero una persona versátil y creo que en la heterogeneidad está el gusto.
Marta Flich junto a Antonio Castelo y Edu Galán
¿Crees que los españoles están cansados de este tipo de debates? Porque hace años funcionaban, pero este espacio no contó con suficiente audiencia.
Los programas de debate no creo que estén devaluados, porque depende de cómo se hagan sí que funcionan. Creo que de lo que la gente se está empezando a cansar es del diálogo destructivo, si es que no es un oxímoron lo que acabo de decir, y no quiere desinformarse, quiere informarse. El verano en el que estuvimos en 'Mad in Spain' había un reality antes y después de las semanas determinadas que firmamos del contrato y surgió el tema del independentismo catalán. Empezó a tomar muchísima fuerza este conflicto y ganaron los espacios monográficos del tema y es posible que se desvirtuara por eso. Pero era muy divertido, acuérdate que estaba Terelu Campos, Francisco González o un día venía Eduardo Garzón... Era muy ecléctico y un formato para verano, que las audiencias siempre se resienten, pero creo que positivo en cualquier caso.
¿La presión es completamente diferente? Al no darle tanta importancia a la audiencia por estar en un canal de pago y no en abierto.
Yo, por ejemplo, no lo sufro tanto porque en Comedy Central tenemos un número de episodios cerrados, aunque sea solo por eso no la sentimos al respecto. Quien no diga que está atado a la audiencia en la nacionales, miente. Pero sí es verdad que en los programas de prime time en las nacionales sí que se está bastante expuesto a una mala audiencia porque te cuesta un programa. Y toda la gente que trabaja detrás, los equipos, el esfuerzo, la energía previa y durante... se resiente. Que guste al público o acertar con el formato, sí que hay ese miedo de que no funcione. Cuando empiezas un proyecto, si se puede prorrogar, estás pendiente de la audiencia, pero cuando firmas una serie de participaciones cerrada, estás más tranquilo. Pero, lógicamente, siempre queremos que funcionen las cosas y gusten muchísimo para que puedan durar un montón o poder firmar más programas y hacer disfrutar a la gente y nosotros, que al final es en lo que se basa el entretenimiento.
¿Las redes sociales ayudan a los programas de pago?
Claro que sí, las redes sociales tienen una vertiente positiva y una negativa. La mala es la exposición involuntaria que des, sin quererla, pero hay una parte muy buena que siempre las he utilizado de esta forma, que es altavoz para promocionar un determinado trabajo y en mi caso tienen esa transversalidad. Una persona no vería Comedy Central o cualquier otro formato, pero en redes sociales consigo una audiencia que no tendría en televisión porque no es mi público. En ese sentido sí es una ayuda y complementa la difusión de los contenidos.
En el humor tiene que existir igualdad de oportunidades
¿Crees que es necesario que las mujeres cojan más importancia en el humor? Estamos acostumbrados a ver a hombres al frente de late nights o en monólogos pero tenemos, por ejemplo, a Valeria Ros en la radio y la tele o a Isa Calderón y Lucía Litmajer con "Deforme Semanal".
Creo que lo que tiene que existir es la igualdad de oportunidades y, a partir de ahí, que cada uno elija lo que quiere ser y dónde quiere estar. Pero sobre todo que no exista un techo o un tapón que impida que las mujeres podamos acceder a hacer lo que hagamos bien o queramos hacer. Después, para gustos los colores. Yo soy una mujer que hago humor y a lo mejor no le gusta a un montón de gente, pero eso es indiferente o independiente de ser mujer u hombre, es mi forma de funcionar. Castígame por un mal chiste pero no por ser una tía. También es verdad que esto es un tema importante, porque cuando hago un chiste o un comentario, muchas veces la contrargumentación es la descalificación física que suele asociarse a ser mujer, por estar más gorda o más vieja, y es una cosa curiosa. Eso también me sirve para hacer humor, pero sentimos que por lo menos al principio se nos trataba diferente, pero ahora no tanto. No había tanta mujer en stand up comedy y las que aparecían haciendo monólogos no los escribían ellas y no les pegaban, no eran cosas transversales que interesaran a todo el mundo. Es una opinión personal.
¿Hay algún programa que te gustaría presentar o colaborar de manera fija? Te hemos visto en 'Ilustres ignorantes' y 'Late Motiv' de invitada, pero algo más a largo plazo.
A mí me encantaría presentar un late night, me encantaría. Ser conductora de un late night que sea irreverente, gamberro, con mucho sentido del humor, con rigor, combinar un montón de cosas. Me encanta la política, está en el día a día, me gusta la economía como ya sabéis. Entonces me gustaría fusionar todo este tipo de cosas, estar al frente de un late night que sea irreverente, transgresor y divertidísimo. Siempre respetuoso que es mi marca, nunca descalifico. Siempre lo hago desde la reflexión y el respeto, pero no está reñido con la crítica.
Marta Flich en una imagen promocional de 'CCN'
Mientras tanto, estás en la radio con "Por fin no es lunes", en Onda Cero, con Jaime Cantizano. ¿Es diferente unirte a un espacio rodado como 'CNN' a uno recién estrenado como "Por fin no es lunes"?
Es diferente porque cuando se empieza un proyecto estamos todos en las mismas, intentado ver qué tono va a tener, nos vamos adaptando, vamos teniendo feedback... Ha salido el EGM, que no son las audiencias inmediatas como la televisión, entonces es esta cosa de ir construyendo un proyecto desde el principio, que dices "madre mía, qué nervios. ¿Cómo irá yendo? ¿Estará gustando?". Tenemos muy buen feedback gracias a las redes sociales. Empezar un proyecto es irnos ensamblando poquito a poco y es una forma de construir diferente. En los formatos que están funcionando ya está todo más que ensamblado y tienes que adaptarte, en el mejor de los sentidos, a esa fórmula. Las dos cosas tienen sus particularidades y cosas bonitas.
A la hora de hacer tus vídeos, muchas veces la actualidad trae el chiste implícito. ¿Tú te impones límites en el humor?
No, no me autoimpongo límites del humor. La única restricción que me pongo es no decirle a la gente lo que tiene que pensar, es mi línea roja. Puedo abrir un melón, iniciar una reflexión, dar unos datos objetivos pero siempre intento jugar a la contra de lo que digo, intento hacer de abogado del diablo siempre, pero que sea evidente con el sarcasmo. Y nunca me he autocensurado, jamás. Creo que sería un error y hasta ahora no he tenido censura por mi parte ni por el medio. Mi línea roja es presuponer lo que tiene que pensar el otro o imponer mi pensamiento
Mi línea roja es decir a la gente lo que tiene que pensar
¿Te gustaría participar en algún programa del estilo 'Tu cara me suena', que reúne el humor con la actuación, o en alguna serie de comedia?
Sí, por supuesto. Soy actriz y todo lo que sea divertirme, dar rienda suelta a mi creatividad, entretener... me parece divertidísimo. Yo trabajaba en un banco y si no me divirtiera, esto no tendría ningún sentido. Todo el mundo debería tener profesiones en las que se sienta a gusto y disfrutara porque es cuando más puedes dar de ti y sumar tu personalidad. Así que sí, sin ninguna duda. Estuve grabando no hace mucho 'La que se avecina' para la nueva temporada y fue una experiencia estupenda, así que el humor siempre por encima de todo.
¿Algún otro proyecto que se pueda adelantar?
Que se pueda adelantar, no. De momento estoy en el Huffington Post que voy a empezar a desarrollar un formato, un proyecto para un teatro que tampoco os puedo avanzar. Pero sigo en Onda Cero, en Comedy Central y alguna cosilla que ya os enteraréis.
Para acabar, ¿podemos esperar una cuarta temporada de 'Comedy Central News'?
Yo la espero porque no te haces una idea de lo divertido que es el programa. Estoy muy orgullosa de estar en Comedy Central porque realmente creo en el producto, que es un programón y que tiene mucha vida. Honestamente te lo digo, creo que va a divertir muchísimo. Viendo todo lo que hay creo que se diferencia, que suma, y que va a gustar, aparte que son 20 minutos que no cansan, se consumen rapidísimo y la gente va a tener ganas de más, estoy convencida.