ENTREVISTA

Emmanuel Esparza ('Secretos de Estado'): "Me he fijado en Kennedy y en Suárez para interpretar a mi personaje"

El actor valenciano nos cuenta las claves de la nueva serie política de Telecinco, 'Secretos de Estado'.

Por Elena Ruiz El 6 de Mayo 2018 | 11:06

Telecinco y Melodía Producciones, la productora que creó Mediaset hace unos meses junto a Frank Ariza, ya culminan el rodaje de su nuevo thriller político, 'Secretos de Estado'. Esta nueva ficción arranca con una tentativa de magnicidio hacia el Presidente del Gobierno que pondrá al descubierto los juegos de poder que amenazan con desestabilizar el poder político. Emmanuel Esparza vuelve a España con 'Secretos de Estado', donde interpreta a Alberto Guzmán, el Presidente del Gobierno.

Emmanuel Esparza es Alberto Guzmán en 'Secretos de Estado'

Tras haberse labrado una carrera en Latinoamérica, encadenando hasta seis papeles protagónicos entre México y Colombia, Emmanuel Esparza vuelve a estar en la primera plana de la televisión española con su papel protagonista en 'Secretos de Estado'. El actor valenciano nos cuenta los entresijos de la ficción de Telecinco, además de hablarnos de sus planes de futuro o de cómo administra sus redes sociales.

¿Qué tal la experiencia de ser Presidente del Gobierno?

Es complicado porque es un personaje que, aparte de tener el peso que tiene en la serie, está en la casa de los televidentes todos los días. Cuando uno va a construir este personaje va a haber un montón de gente que, de manera gratuita, se va a imaginar cómo tiene que ser el presidente. Tú ya estás rompiendo una barrera nada más empezar, sobre todo porque estamos haciendo una serie de ficción, pero el perfil que tiene el Presidente no es el habitual que suele salir en las series españolas. Es curioso ver cómo en la BBC inglesa o en las series americanas aparecen presidentes con este perfil y para nosotros funciona como telespectadores, pero cuando vemos una serie española tiene que ser otro perfil de presidente y es lo que estamos acostumbrados a ver.

Para mí era complicado el hacer creer a la gente que yo soy el Presidente, cuando yo mismo no me lo creía. Este personaje necesita un proceso, un tiempo de investigación y de corporalidad cuando te pones este tipo de trajes que yo no llevo nunca. Poco a poco uno se va sintiendo más cómodo. Sabes que la televisión no es como una película de cine, los tiempos no son tan extensos como para que un actor se prepare de esa manera. Tiene que ser algo propio, algo personal. En este caso para mí es una oportunidad muy grande porque llevo mucho tiempo trabajando fuera de España y siempre me dije que si volvía era para hacer una cosa como esta. Cuando te dan la oportunidad tienes que cogerla con la responsabilidad que conlleva hacer este personaje. Para mí ha sido una pasada.

¿Para hacer este personaje te has fijado en políticos españoles o extranjeros?

En los dos, lo que no quería era basarme en políticos que estuvieran de actualidad. Los dos políticos en los que me he fijado son en Kennedy y en Suárez. Para mí tenían una cosa que tiene Alberto Guzmán, un carisma muy abrumador. En la forma de hablar, en la forma de sentarse, en la forma de llevar el traje, en sus discursos, en la confianza que transmitían. Esto es muy complicado de ver en políticos de hoy en día.

Llevabas mucho tiempo trabajando en Colombia. ¿Qué tiene esta serie para que hayas vuelto a España?

Yo venía de hacer una serie en Fox en Colombia, que están emitiendo ahora en la plataforma de Fox internacional que se llama 'Sitiados', y de ahí me fui a México a hacer otra serie. Cuando me llamaron para hacer esta lo primero que pregunté fue quién estaba en el proyecto. Cuando me enteré de que estaba Miryam Gallego y José Luis García Pérez fue una de las razones principales. Esa es la realidad. Luego me mandaron el primer guion de la serie, con los dos primeros capítulos y me quedé alucinado. Es una apuesta muy arriesgada y me di cuenta de que estaba muy bien escrita. A partir de ahí empezó una negociación y me vine a hacer un piloto. Esos eran motivos suficientes para tener la decisión clara de que si tenía que volver a España debía ser con un proyecto como este.

Miryam Gallego, Emmanuel Esparza y Michelle Calvó viven un triángulo amoroso en 'Secretos de Estado'

Cualquier Presidente el Gobierno tiene que ser una persona con un perfil muy claro, son personas muy ambiciosas que seguramente se han preparado toda la vida para llegar a ese puesto. En el caso de Alberto lo que pasa es que vais a ver aspectos de su vida que no tienen que ver solo con su trabajo, sino también con su vida privada. La característica principal de Alberto es que lo quiere tener todo controlado. Hay un momento en ese camino hacia la Moncloa que él empieza a darse cuenta de que todo lo que tiene no es suficiente, empieza a querer estar por encima del bien y del mal. Hay un momento en el que se pasa de la raya. Entonces ver a ese presidente pasarse de la raya es muy interesante. Vais a ver a un tipo que intenta transmitir confianza, que toda su vida es perfecta. De repente ver cómo se va desmontando todo ese castillo de naipes perfecto va a ser una cosa muy bonita.

En España no tenemos muchos thrillers políticos hasta la fecha. ¿Por qué crees que llega en este momento? ¿Es la 'House of Cards' española?

¿Qué relación tienes con la política?

Siempre he pensado que es importante estar informado de lo que pasa en tu país, pero, si te soy sincero, en los últimos años yo he tenido un distanciamiento sobre todos estos temas porque a veces aburren. Es una sensación de que solamente nos informan de cosas que son convenientes para ellos, una sensación de que todos los días y todas las semanas están tapando las cosas anteriores. Esa es la realidad.

Me fui a hacer un proyecto hace siete años y de repente a ese proyecto se le sumó un segundo, de un segundo a un tercero y de un tercero a un cuarto. Cuando me di cuenta había protagonizado seis o siete series en seis años. Yo me di cuenta de que había algo en el universo que me estaba diciendo que mi camino iba por ahí. Porque no olvidemos que en España en los últimos años han sido muy complicados para los actores. Para mí ha sido una sorpresa el hecho de que me llamaran para 'Secretos de Estado' porque a mí me ha ido muy bien estos últimos años en Colombia. Yo asumía que había una serie de actores que estaban más de actualidad que yo a nivel nacional que podían interpretar este personaje. No creo que haya sido tampoco suerte, aunque siempre la hay, sino más bien una recompensa a alguien que se ha ido a un país extranjero por el sueño de seguir trabajando de esto.

¿Te gustaría volver a trabajar en España?

¿Qué recuerdos tienes de 'Yo soy Bea' ahora que Divinity está reponiendo la serie?

Cuando pasan tantos años solamente te quedas con lo bueno. Yo tengo algunos recuerdos complicados en la primera temporada, que tampoco es cuestión de hablar de ellas, pero a partir de la segunda temporada recuerdo perfectamente la relación que tenía con Mónica Estarreado y con Miguel Hermoso. Aprendí tanto, tanto, tanto, que las otras cosas que estaban por ahí se olvidaron. Ahora con el tiempo solamente recuerdo las cosas buenas. 'Yo soy Bea' fue un antes y un después en mi carrera. Tuve la oportunidad de aprender muchísimo y a partir de ahí empezó todo lo demás.

Antes lo llevaba un poco peor, pero tristemente uno se va endureciendo en esta profesión. Estás pendiente de ellas, pero no hasta el punto de que te afecte que alguien diga algo bueno o algo malo. La verdad es que lo importante es que uno se quede satisfecho con el trabajo que ha hecho y que te reconozcas a ti mismo que has dado lo mejor que tenías. A partir de ahí, si la gente en las redes sociales la comenta y la ensalza, perfecto, y si no le gusta será una pena. Pero no es algo que no me deje dormir. Y con las audiencias lo mismo. Llega un momento en el que son tantos los factores que influyen a la hora de ese número de audiencia que uno no puede controlarlos todos. Es mejor quedarse tranquilo con el trabajo y luego el universo dirá.