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La noche en 'Bailando con las estrellas' comenzaba con un recuerdo a la primera expulsada de la edición, Topacio Fresh, que se despedía de la competición en el segundo programa del concurso de baile. Los concursantes volvían a poner toda la carne en el asador para convencer a público y jurado de permanecer una semana más. Sin embargo, después de una jornada de bailes de lo más variados, Merche decía adiós a sus compañeros y se convertía en la segunda expulsada de la edición.
Merche durante su actuación en la Gala 1 de 'Bailando con las estrellas'
La decisión final estaba entre Gemma Mengual y Abel y Merche y Roger, pero finalmente eran estos últimos los que abandonaban 'Bailando con las estrellas'. La cantante dejaba a un lado la tristeza y se mostraba agradecida con todos aquellos que habían votado por su permanencia en el concurso, pero sobre todo con sus compañeros de edición: "Ha sido un verdadero placer compartir estas semanas con estos profesionales".
Una Gala llena de emociones y bailes nuevos
David Bustamante y Yana se llevaban la mayor puntuación del jurado, acumulando 11 puntos con su vals vienés a ritmo de "Nothing Else Matters". El resto de concursantes también lo daban todo sobre la pista de baile y ofrecían su mejor versión después de una semana de duro trabajo. Los estilos se mezclaban en la tercera entrega del programa de baile y veíamos desde bailes latinos hasta piezas más clásicas. El quickstep y la salsa aparecían por primera vez en el programa de la mano de Fernando Guillén Cuervo, Merche y sus respectivas parejas.
Rossy de Palma también se atrevía con un nuevo estilo, el Urban, y lo hacía con la canción "Vogue" de Madonna. Pelayo Díaz, por su parte, protagonizaba uno de los momentos más emotivos de la noche al recordar el por qué de sus característicos calcetines blancos. "Que crean en ellos y algún día serán lo que siempre han soñado", aseguraba Pelayo, dirigiéndose a los espectadores del espacio, tras explicar que los calcetines se convertían en su seña de identidad cuando era pequeño y unos vecinos se reían de él por vestirlos.