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Todos conocemos 'First Dates' por la peculiaridad que tienen todos las personas que participan en él. En esta ocasión nos encontramos con la Princesa del metro de Madrid, una persona surrealista pero reivindicativa, que ha acudido con un vestidito rosa y una corona dispuesta a encontrar a su príncipe azul en el programa de Carlos Sobera.
Pero la historia de la Princesa del metro de Madrid tiene mucho más trasfondo del que parece, ya que la pobre Sofía ha tenido algunos príncipes que salieron rana, y esa es precisamente la razón por la que ha acudido al programa vestida de princesita. Nuestra protagonista se dedica a cantar en el metro caracterizada de princesa, y esa manera de ganarse la vida ha provocado que sus anteriores parejas se avergonzaran de ella, entonces ha preferido acudir así vestida para mostrarse tal cual desde el principio.
Sofía y Fran en 'First Dates'
Para su sorpresa, ha encontrado a un hombre (Fran) que parece no importarle su forma de vestir, y con el que coincide en su manera de focalizar una relación, ya que ella busca conocer lentamente. Fran ha estado de acuerdo con ella: "Si tienes intención de iniciar una relación, de un día para otro no surgen las cosas". Ante esas palabras supuestamente llenas de sabiduría, la princesita se ha emocionado y ha empezado a llorar: "Anda que una princesa se pone a llorar", decía refiriéndose a sí misma.
"Supongo que me he visto en una cita con un hombre de verdad y que me estaba contando cosas de su vida y me he emocionado porque me he sentido mujer" confesaba a las camareras. Y aunque al principio la princesita dudaba de que ese hombre alto, frutero y tradicional pudiera ser su Príncipe azul, finalmente no ha dudado en tener claro que era el hombre de su vida.
Veredicto final
Mientras Sofía confesaba que había sido uno de los mejores días de su vida; por su lado Fran confesaba que también se lo había pasado muy bien, a excepción del comentario de la catana. Y es que la Princesa confesó durante la velada que tenía una catana en casa y que le encanta dormirse viendo películas de asesinos, una parte macabra que al pretendiente no le ha hecho mucha gracia. Sin embargo y a pesar de todo, ambos han aceptado tener una nueva cita, así que pronto sabremos si esta princesa y este príncipe azul estaban hechos para vivir felices y comer perdices.
