La extronista de 'Mujeres y hombres y viceversa' Nicol Hartman ha decidido recientemente compartir una desgarradora experiencia. Tiempo después de conocerse su ruptura con su expareja, Nicol se dirigió a sus seguidores de Instagram para hablar no solo de la reciente separación, sino también que se había visto obligada a abortar al hijo de ambos por complicaciones médicas, lo hizo mediante varios Instagram Stories.
Nicol Hartman, extronista de 'Mujeres y hombres y viceversa', en una imagen de su cuenta de Instagram
"Cuando una está embarazada, cuerpo y mente cambian. Entiendo como nadie que quisieras escapar y que te haya venido grande la situación, pero tú merecías estar a mi lado, tú merecías cuidarme y tú merecías respetarme y no humillarme como lo estabas haciendo", reprochó Nicol, cada vez más emocionada. "Confíe en ti como en nadie y mi madre, más. Y nos has fallado. Y encima eres capaz de llamarme loca, con todo lo que me has hecho", continuó la extronista en su cuenta oficial de Instagram.
"Peso cuarenta y tres kilos"
"He aguantado tanto, sola, en casa, con vómitos, sin poder comer, adelgazando. Que peso cuarenta y tres kilos, me ha costado la salud todo lo que me ha pasado", confesó Nicol, al borde de las lágrimas. La extronista contó cómo le habían hecho análisis sin que lo supiera su expareja, dado que él se había despreocupado de todo. "Me contaron que el embrión era demasiado pequeño para el tiempo que tenía y que no se apreciaba ritmo cardíaco", reveló Nicol, que admitió que no quiso contar nada con la esperanza de cambiaran las cosas.
Una ruptura sin explicaciones
"Tuve que abortar, pero no porque quisiera", reconoció Hartman, entre lágrimas. "Cuando pasó eso estaba de diez semanas y cuatro días", contó la extronista, que reveló que su expareja sabía que estaba en el hospital gracias a un mensaje de su madre y, aun así, nunca preguntó por ella. "Me había bloqueado en Instagram, empezó a seguir a otras niñas, a salir de fiesta, a estar en la playa", resumió Hartman, que finalizó el vídeo admitiendo que se sentía "imbécil" por haber confiado en él.