Las estrategias de 'Aquí no hay quien viva' para aprovechar a Paloma tras la marcha de Loles León

Con el paso del tiempo, 'Aquí no hay quien viva', comedia creada por los hermanos Caballero, se ha convertido en una de las series más recordadas de nuestro país. Una de las principales características por las que siempre ha tenido tanto éxito es su elenco plural, un reparto en el que podemos encontrar todo tipo de personajes. Sin embargo, no todos los actores originales permanecieron en la ficción durante todos los episodios. La marcha de Loles León fue una de las salidas que mayor repercusión tuvo. La actriz era la encargada de dar vida a Paloma, pero el suyo es uno de esos casos en el que los guionistas supieron aprovechar un personaje que daba mucho juego y que gozaba del cariño y respaldo del público a pesar de no contar ya con la presencia de la intérprete que la encarnaba.

Por tanto, aunque suplir la ausencia de un personaje principal con tanto peso en las tramas más importantes de la serie puede parecer imposible, sobre todo cuando también se trata de un personaje querido por los espectadores, en 'Aquí no hay quien viva' supieron salir del bache y se valieron de diferentes estrategias para conseguir que Paloma continuase presente en la serie. Para ello utilizaron continuas referencias a su persona, chistes a su costa o la resurrección del personaje sin que se le viera la cara. Desde FormulaTV queremos recordar y analizar aquellas veces en las que los guionistas de 'Aquí no hay quien viva' supieron aprovechar a Paloma tras la marcha de Loles León, con estrategias más o menos surrealistas y acertadas.

1 Numerosos chistes y referencias a Paloma

Al poco tiempo de que Paloma cayese por la ventana y entrara en coma, Juan (José Luis Gil) tenía que soportar muy a menudo comentarios de sus vecinos hablando de su mujer como si esta estuviese muerta. Este tipo de palabras generaban en el presidente de la comunidad una reacción casi violenta, defendiendo a Paloma y su posible recuperación. Sin embargo, por mucho que Juan explicara el estado en el que se encontraba su esposa, eso no evitaba los continuos chascarrillos, chistes y bromas a costa del coma de Paloma. La posibilidad de que Paloma despertara y regresara con todos ellos era algo que asustaba a Juan pero sobre todo a Isabel (Isabel Ordaz), que temía la posible reacción enfurecida de Paloma cuando esta descubriera que eran pareja.

Así pues, que el personaje interpretado por Paloma estuviese en estado de coma, en lugar de morir o desaparecer para siempre de la serie tras la marcha de Loles León, dejaba la posibilidad de seguir contando con su persona en la trama de la serie. Los guionistas supieron mantener al personaje con vida, realizando esas continuas referencias, en forma de comentarios jocosos la mayoría de las ocasiones, que permitían mantener viva la presencia de Paloma, aunque no apareciera físicamente en escena. Además, esta salida permitió la llegada de Nieves (Carmen Balagué) con la que Paloma mantenía una enemistad histórica y con la que era inevitable realizar comparaciones.

2 El regreso a Desengaño 21

Precisamente, la presencia de Nieves en casa de su hermano permitió tener a Paloma más presente que nunca, sobre todo cuando esta decidió sacar a Paloma del hospital sin el consentimiento de Juan y sin avisarle previamente. Nieves actuó de semejante forma con la intención de estropear la recién comenzada convivencia entre su hermano e Isabel, que empezaban una nueva vida juntos compartiendo el mismo hogar. La idea de Nieves no era otra que jugar con el temor de Isabel ante la presencia en casa de Paloma, pero la idea no resultó tan bien como esperaba e incluso casi pierden a Paloma.

Para llevar a cabo esta trama, con la que pudieron realizar todo un capítulo, optaron por utilizar a una actriz que permaneciera sentada de espaldas en una silla de ruedas en aquellas escenas en las que tuviera que aparecer Paloma, consiguiendo que no fuera necesario que se le viera el rostro en ningún momento, puesto que el espectador podía intuir fácilmente que se trataba de Paloma. De esta forma, jugaron con el regreso de tan mítico personaje, una vuelta que muchos solicitaban, aunque esta historia capitular no fuera realmente el regreso como tal de Paloma, ya que sin Loles León poco más podían hacer.

3 Paloma despierta del coma

Tras muchas bromas y chistes a su costa, finalmente el día más temido por muchos se hizo realidad y Paloma despertó del coma. Tratar la vuelta de un personaje cuando la actriz ya no forma parte del elenco y no tiene previsto reincorporarse no es una tarea sencilla, pero los guionistas y directores de 'Aquí no hay quien viva' supieron jugar muy bien sus cartas para que no fuera necesaria la presencia de Loles León y Paloma volviese a entrar en acción. Dicho y hecho, Paloma regresó a Desengaño 21, paseándose por el edificio e incluso entrando en su casa. Sin embargo, nunca se le vio la cara.

Evitar que el rostro de Paloma saliese en pantalla fue la técnica utilizada para esconder que la actriz que estaba haciendo de Paloma no era la intérprete original, sino otra actriz con una fisionomía semejante a la de Loles León, lo que les permitió lleva a cabo la estratagema. Gracias a esta forma de enfocar la historia pudimos disfrutar de una Paloma desquiciada corriendo por todas partes en busca de la mujer que provocó su caída por el patio y que le había robado a su marido, aunque la forma de moverse y las pocas palabras que dijo Paloma no resultaron del todo creíbles para muchos espectadores.

4 El segundo coma de Paloma

La persecución entre Isabel y Paloma acabó de la peor forma posible, con el atropello de Paloma, un accidente que devolvía a la mujer de Juan al hospital en estado de coma. Aunque la presencia física de Paloma no duró mucho tiempo, probablemente por lo complicado que resulta que un personaje aparezca pero sin que se le vea el rostro en ningún momento, fue divertido tener de vuelta a Paloma y ver esa interacción entre la Hierbas y ella, un encuentro muy esperado por parte de los seguidores de la serie y con el que se había jugado durante mucho tiempo, creando cierta expectación.

Esta situación, en la que Paloma fue la protagonista, permitió crear una subtrama interesante en la que Isabel y Juan tenían que esconder todas las pruebas del delito, incluido el coche con el que se produjo el atropello. Además, también tuvieron que aguantar los chantajes de Marisa (Mariví Bilbao), a la que se vieron en la obligación de sobornar para que mantuviese la boca cerrada y no delatara a Isabel. Durante este período en coma también pudimos conocer a los padres de Paloma, Toñi y Arsenio, que se presentaron en Desengaño 21 cuando Juan solicitó el divorcio.

5 Un funeral convertido en evento del año

Finalmente, después de varias idas y vueltas, los guionistas decidieron que el mejor final que le podían ofrecer a Paloma era su muerte. Así pues, tras caerse por la ventana del patio, permanecer en coma durante una larga temporada, despertar del coma, ser atropellada y volver a entrar en estado de coma, la madre de Josemi (Eduardo García) y Natalia (Sofía Nieto) falleció. La muerte del personaje permitió realizar todo un episodio centrado casi exclusivamente en Paloma. Igualmente, su muerte no pudo ser más significativa, puesto que se produjo justo el mismo día en el que nacía su nieta, una coincidencia que permitió jugar todavía más con las referencias hacia Paloma.

Como solía ocurrir en las ocasiones especiales que tenían lugar en Desengaño 21, el funeral de Paloma se convirtió en todo un evento. El acontecimiento estuvo cubierto por Radiopatio, que por aquel entonces ya tenía su propio programa en la emisora clandestina dirigida por Rafael. Radiopatio ofreció toda una programación dedicada al completo a Paloma, desde la incineración en el tanatorio, al que acudieron Marisa y Vicenta (Gemma Cuervo) dispuestas a narrar todo lo que allí sucediera e incluso a entrevistar a familiares y amigos, hasta especiales recordando algunos de los mejores momentos de Paloma en memoria de la fallecida.

6 Un amante sorpresa

Si la muerte de Paloma y el cierre definitivo del personaje no era suficiente, la figura y la memoria de Paloma continuaron presentes una vez hubo pasado a mejor vida. Una de las tramas más disparatadas y sorprendentes que aprovecharon con el fallecimiento de Paloma fue la protagonizada por Ramón, un vendedor de aspiradoras con el que Paloma mantuvo una relación bastante discreta durante nada más ni nada menos que catorce años. Ramón se presentó en el propio funeral de la que fuese su amante, desvelando este gran secreto. Ambos se conocieron cuando Ramón se presentó en casa haciéndole una demostración del funcionamiento de una de sus aspiradoras.

Su presencia puso en duda la paternidad de José Miguel, sobre todo por el parecido razonable entre Ramón y el hijo menor de Paloma. Pero lo que parecía que iba a romper una familia definitivamente terminó por ser una trama de lo más emotiva que permitió unirles más todavía. Asimismo, la existencia de este inesperado amante nos permitió conocer algunos aspectos de Paloma bastante sorprendentes. Por ejemplo, se dedicaba a realizar viajes con Ramón aprovechando las ausencias de su Juan cuando este se encontraba de viaje con el colegio, llegando a compartir una mágica aventura en el mismísimo EuroDisney.

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