En los últimos años, nuestra televisión pública ha vivido una etapa en la que la manipulación, la lucha por usarla como instrumento político y una más que cuestionable gestión han sido protagonistas. Mientras que tiempo atrás disfrutábamos de una televisión plural, moderna, que apostaba por el talento, en la que se innovaba y en la que nacieron grandes profesionales de la pequeña pantalla; a día de hoy, todo eso se ha perdido, TVE no es ya así. Esa televisión con la que todos crecimos, que nos regaló grandes momentos, que nos informó sin tapujos, que no tenía complejo alguno ha dejado de existir y sí, necesitamos volver a ella.
Las azafatas del 'Un, dos, tres'
Pocos políticos han entendido este tiempo lo que sí debe ser RTVE. Muchos son los que creen que es simplemente una plataforma de propaganda política, pero no, no debe ser así. Debe ser un lugar de encuentro de la industria audiovisual española, una plataforma de talento, de riesgo, debe volver a ser un medio de comunicación que sea la referencia informativa de nuestro país, que no dude en apostar por un entretenimiento distinto e innovador y sin duda, debe cumplir un servicio público necesario hoy en día.
Precisamente, ahora existe una gran oportunidad para conseguirlo, para volver a recuperar esa RTVE que a todos nos ilusionó en su día. Con la llegada de Rosa María Mateo a la Corporación como administradora única provisional y el aterrizaje en otoño de un nuevo presidente junto a un nuevo Consejo de Administración elegido por consenso, se abre una nueva etapa. Por ello, hoy en FormulaTV hemos querido imaginar cómo debería ser esa RTVE de la que todos nos sentiríamos orgullosos. ¿Qué debería cambiar? ¿Qué se debería mantener? Así es la TVE que queremos.
'La bola de cristal'
Debe volver a ofrecer servicio público de verdad
Parece de sentido común que RTVE debe ofrecer un servicio público a los ciudadanos. A muchos les parecerá un banalidad pero no, no lo es. Teniendo en cuenta que esa es su razón de ser y que se encuentra financiada por todos los ciudadanos, no tiene sentido que en los últimos años esta haya sido usada como instrumento político del Gobierno de turno. Se acabó, eso debe dejar de ser así, RTVE debe volver a tener el sentido que merece, debe volver a ser ese medio necesario que apueste por el riesgo, por el entretenimiento y por la información.
Para ello es necesaria una reestructuración de sus canales, una transformación de sus contenidos, debe dar cabida a todos; debe apostar por formatos que sí aporten realmente, que más allá de entretener también tengan un sentido social porque sí señores, es posible apostar por unas parrillas plagadas de contenido de calidad, que además funcionen y que marquen la tendencia en el panorama audiovisual español. TVE debe crear escuela, debe volver a marcar el ritmo del resto de televisiones, y para ello es necesario darle una vuelta a todo, es necesario volver a fijarnos en los inicios y a partir de ahí, empezar la verdadera revelación.
Cortinillas de La 1 a lo largo de su historia
TVE debe ser un sello propio: Crear imagen de marca
Es fundamental que TVE vuelva a tener esa imagen de marca con la que antaño despuntó. En un panorama tan sumamente fragmento como el actual es necesario posicionarse en el amplio espectro televisivo. Hay que conseguir una imagen potente y reconocible. Hay que intentar crear una serie de contenidos que el público rápidamente identifique con TVE, diseñar una forma de informar y de narrar la actualidad con la que se logre dar imagen distintiva; en definitiva, hay que conseguir que la audiencia reconozca los contenidos TVE y relacione su marca como sinónimo de calidad y objetividad.
Apostar por unos informativos con rigor y credibilidad
Es sin duda uno de los aspectos más necesarios en esta etapa: volver a ser referencia informativa. Para ello hay que lograr adaptar los 'Telediarios' a nuestros tiempos. Renovar su imagen, apostar por piezas objetivas y veraces (algo lógico pero que no se ha hecho en los últimos años) y contar con rostros que sí transmitan credibilidad y profesionalidad. Sí, hay que volver a demostrar a la audiencia que pueden volver a elegir la cadena para informarse, hay que dejar claro que la nueva etapa ha empezado y que cuando suceda algo, ahí estará TVE para contarlo.
Plató del 'Telediario'
Una mayor capacidad de reacción: Debe ser la referencia
Y ese es precisamente uno de los puntos más destacados, volver a ser la referencia informativa, un puesto que hasta ahora ocupa laSexta. La cadena de Atresmedia ha aprovechado el vacío informativo en TVE para lograrse colocarse por delante; y es que cuando algo pasa ahí está laSexta para contarlo; haciéndolo de una forma rápida y eficaz. Y sí, es lo que debe volver a conseguir La 1, estar ahí siempre contándolo de primera mano. Medios técnicos y humanos hay de sobra, ahora es cuestión de intención. Ganas a la hora de informar en directo y también de apostar por el terreno informativo en su parrilla porque sí, hacen falta nuevos proyectos relacionados con este género en la parrilla, hay que dejar claro que en TVE la información es clave.
Entretenimiento arriesgado y de calidad
Pero no solo de de información vive la pequeña pantalla. El entretenimiento tiene que ser algo clave en a nueva TVE. Pero hay que dar un paso más allá y arriesgar, apostar por formatos innovadores, que sorprendan, que marquen sin duda el ritmo televisivo de nuestro país. Sí, aprovechemos que estamos en una televisión pública que puede permitirse jugar mucho más, que debe estar a la vanguardia del panorama televisivo. Recuperemos el espíritu de antaño, donde, sorprendentemente, se realizaban contenidos mucho más avanzados que hoy en día. Ha llegado el momento de hacerlo, pero hagámoslo premiando el verdadero talento, dejando de lado "amiguismos", apostemos por profesionales que sí tienen mucho que aportar a la industria.
'OT 2017'
Conciliar trabajo y entretenimiento: Adelantemos el prime time
Apostemos por contenidos de calidad pero hagámoslo en horas decentes. La mayoría de nosotros madrugamos y por ello debería ser la televisión pública la primera en permitirnos conciliar nuestra vida social con la laboral porque ni es normal que una serie empiece a emitirse a las 23h00 ni que haya formatos como 'MasterChef' que terminen pasada la 1 de la madrugada. Por eso es necesario que por un lado todo empiece mucho antes, creando así un cambio de tendencia general, y por otro, reducir la duración de todos los programas para evitar que se prolonguen tanto.
¡Que vuelva 'La República'!
Como principal símbolo de esta nueva etapa, ¿por qué no recuperar '14 abril. La República'? La última vez que se emitió la serie que protagonizaron Félix Gómez, Verónica Sánchez y Mariona Ribas fue en el año 2011; hace exactamente ocho años. La censura política provocó que su segunda temporada quedase guardada en el cajón durante mucho tiempo... ¿hasta ahora? Sería perfecto volver a contar con ella y dejar claro que esta vez, todo es diferente. Además, este sea posiblemente el momento perfecto para aclarar el futuro real de otras producciones como 'El Ministerio del Tiempo', cuya continuidad quedó completamente en el aire.
Verónica Sánchez en '14 de abril: La República'
Las mañanas deben transformarse: La información, protagonista
También es necesaria una transformación de la franja tan importante como son las mañanas. Arriesguemos de una vez, hay que ser competitivos y adelantarse al resto, es necesario hacer el "gran morning" de la televisión en la pública. Es necesario apostar por un gran formato con rostros profesionales y reconocibles que sí generen confianza entre los espectadores, creando así una marca potente, generando un programa al que acudan todos, que sea el lugar de referencia de la franja. Hay que luchar por reconquistar esa franja y hay que hacerlo con algo potente y de calidad.
La vuelta a los late nights innovadores y transgresores
Hay que innovar en las mañanas... pero también al final del día. ¿Puede haber llegado el momento de cerrar la jornada con un formato diferente en el que cultura, actualidad, música y espectáculo se unan? Puede que haya llegado. Sería muy importante para RTVE volver a introducir este género que en su día era habitual en todas las cadenas y que ahora, tras la maldita crisis, se ha perdido por completo. Reducir la duración de los espacios en prime time podría dar paso sin duda a esta incorporación en la parrilla que sin duda seria necesaria para volver a lo que llevamos varios puntos recalcando: crear imagen de marca.
Mara Torres y Joaquín Reyes en La 2
La imagen corporativa debe dar el gran salto
Si se quiere crear imagen de marca a partir de la nueva parrilla, es también vital evidenciarlo con una imagen corporativa potente, algo que no existe a día de hoy en RTVE. Aunque años atrás se cambió por completo todo el diseño gráfico gracias a un trabajo realizado por la empresa Summa, esta imagen rápidamente se quemó. No ha sido desarrollada de un forma correcta y por ello, a día de hoy, hay un caos muy importante en todos los canales de la cadena, no se sigue una línea concreta clara.
De esta forma, encontramos tipografías que no coinciden, se han modificado logos sin sentido alguno y se ha desarrollado una imagen que ha acabado siendo antigua y desfasada. Por ello, es necesario darle un giro, modernizarla y lograr así transmitir la sensación de renovación absoluta en la Corporación, acercándose mucho más a los tiempos que corren a día de hoy.
Plató de Eurovisión 2018
Eurovisión sí es importante: Una apuesta mucho mayor
Es una petición histórica y muy necesaria. ¿Por qué no apostar mucho más por el Festival de Eurovisión? Aporta buena imagen, tiene un amplio seguimiento en el target juvenil y además supone un contenido de calidad blanco, muy necesario en una televisión pública como tiene que ser RTVE. Parece obvio que Eurovisión debe tener un hueco importante en las parrillas de los canales la Corporación pero no sucede. Más allá de reportajes en 'Corazón' y 'La mañana', la emisión de la final en La 1 y las semifinales en La 2 y la gala eurovisiva de 'OT 2017', poco más se hace.
¿Por qué no producir un magacín eurovisivo y de música europea en La 2? Es obvio que los "eurocontenidos" no están destinados a grandes masas, pero darle un espacio en La 2 podría ser perfecto, convirtiendo esta cadena en el paraíso de los eurofans. Hablar de preselecciones, de música del continente europeo y llevar a estrellas eurovisivas de la historia televisiva podrían ser los ingredientes perfectos para este gran formato. Además, sería interesante dar ese hueco a euroestrellas en otros formatos de la cadena y de la web.
Los toros ya no deben tener espacio en la parrilla
Es inadmisible que en una televisión pública como RTVE haya espacio para emitir festejos taurinos. Sí, nos encontramos ante un acto legal, que tiene miles de seguidores en todo el país, y que forma parte de la tradición española, pero ha llegado el momento de parar, de dejarlo de lado. No tiene ningún sentido que se puedan emitir este tipo de contenidos en horario protegido, no puede ser que cualquier niño en su casa pueda ver como matan a un animal ante centenares de personas aplaudiendo y gritando. Aunque son festejos respetables y aceptados en nuestra sociedad, no es normal que se emitan en una televisión pública. Hay que evitarle darle espacio a este tipo de contenidos, hay que respetar el servicio público que una cadena como RTVE debe ofrecer.
Promoción de La 2
La 2, el canal que debe estar de moda entre las minorías
Es el momento de darle un completo vuelco a La 2. Parece incompatible hacer un canal moderno, cultural, repleto de música, teatro y cine y que funcione... o eso creen algunos. Hay que realizar un trabajo en impulsar La 2 como marca propia, lograr acercar el canal a una generación joven, "millennial", que es activa en redes sociales, que consume habitualmente cultura; sí, hay que lograr que sea un canal de moda entre el público minoritario o "de nicho". Solo así se puede conseguir que 'La 2' guste, que no transmita imagen de canal aburrido en el que "solo se emiten documentales".
Por ello, es necesario organizar primero la parrilla y evitar que sea el caos absoluto que es ahora. Hay que crear franjas diferenciadas, y apostar por formatos que vertebren la programación. Ya que es un canal al que el público no suele acudir masivamente, es importante ayudar al espectador a saber qué se va a encontrar en cada momento del día. Por otro lado, hay que contar con rostros potentes, que transmitan verdad y que estén cerca de la calle. También hay que equilibrar contenidos, dar un hueco a todo en su justa medida, lograr una programación variada y atractiva, donde además, la información tiene que tener también un peso importante, 'La 2 noticias' no puede emitirse a la 1 de la madrugada, es inadmisible. Por último, hay que arriesgar. Esa es la clave: el riesgo. Hay que aprovechar que nos encontramos ante un canal más minoritario en el que se puede arriesgar de una forma clara, juguemos con La 2.
La religión puede tener su hueco... con matices
¿Hay que eliminar la emisión de la tradicional misa de La 2? No es necesario y es que aunque estemos en un Estado aconfesional, no es incompatible con que contenidos de este tipo puedan formar parte de la televisión pública. Es un tipo de emisión que sí interesa a parte de los espectadores y que no pone en riesgo el servicio público de la Corporación, pero hay que saber elegir que misas emitir y a quien darle hueco en la televisión pública. Es inadmisible que discursos homófobos o racistas como el que dio en su día Juan Antonio Reig, arzobispo de Alcalá de Henares, tengan cabida en RTVE. Hay que elegir misas y representantes de la Iglesia que sí respeten a todo y a todos.
El Canal 24 horas
Canal 24 horas necesita transformarse
Y por último, si he pedido cambios en La 1 y La 2, ¿por qué no transformar también el Canal 24 horas? Ha llegado el momento de avanzar y dejar de apostar por un canal informativo en el que constantemente se repiten piezas y que no tiene una clara estructura definida. Hay que dejar de lado ese modelo noventero para arriesgar con un canal en el que se cuente información pero que también arriesgue.
Se pueden crear un canal informativo que tenga producción propia de calidad, que sorprenda y que atraiga la atención de los espectadores. Apostar por profesionales con credibilidad que innoven en los contenidos que dirigen y contar con una parrilla estable y estructurada, pero en la que no hay problema alguno en modificar si la actualidad así lo demanda. Debe ser una cadena viva, pegada a la actualidad, al directo.
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La TVE que queremos... y necesitamos
En definitiva, hay mucho que hacer, mucho que trabajar y mucho por lo que luchar. Ha llegado el momento de revolucionar nuestra televisión pública, de dejar claro lo que necesitamos y queremos. Credibilidad, riesgo, innovación y valentía, todo tiene que estar en la nueva TVE que nos merecemos, porque sí, España necesita una televisión pública de verdad. ¿Lo intentamos?