'First Dates' no siempre acierta con su flecha personalizada del amor, y a veces dos personas totalmente opuestas acaban viviendo una velada de lo más incómoda. El pasado viernes 24 de agosto, el programa conducido por Carlos Sobera nos presentó a dos comensales que a priori parecían encajar a la perfección. A Azucena le gusta que le hagan reír y Alejandro es cómico. ¿Qué podría salir mal?
Azucena y Alejandro en 'First Dates'
Al principio de la velada parecieron encontrar una mínima afinidad relacionada con los videojuegos y la fantasía cinematográfica. Pero pronto se disipó cuando Azucena se percató que el nivel de entusiasmo por los videojuegos, y en general el panorama audiovisual, de su cita era mucho más extremo que el suyo, algo que ya le predispuso negativamente.
En cuanto a los fetiches sexuales tampoco terminaron de encajar, porque mientras que a ella le gustaba disfrazarse, el confesaba que no le hacía especial ilusión, sobre todo si se trataba de disfraces de muñecos. Por su lado, el cómico confesaba que había tenido sexo numerosas veces en lugares públicos, incluso en el tren. Algo que sorprendió aún más a la valenciana, aunque reconoció que le había gustado que hablara de sexo con tanta naturalidad
El punto más álgido llegó cuando Alejandro, como cómico, reconoció temer a las mujeres: "Con esto del feminismo tengo los huevos en la garganta", dijo bajo una mirada de incomprensión por parte de Azucena, después añadió: "Ya no se puede gastar el chiste de mujer en la cocina", a lo que la valencia respondió de forma tajante: "Yo no lo considero un chiste". Tras esto confesó que se le había descompuesto la cara: "¿Estamos en los años 40?". Pero la cosa no quedó ahí, Alejandro continuó con el tema y le confesó que había muchas cosas que le daban miedo hacer o decir, a lo que Azucena le dijo: "Tú las dices y luego ya corregimos las feministas".
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La decisión final
No era de extrañar, que tras el embrollo suscitado durante la velada, ambos fueran a declinar una segunda cita, aunque encuentros peores habían salido adelante. Finalmente Alejandro afirmó que no tendría una segunda cita con Azucena porque considera que no ha tenido nada en común con ella a excepción de las películas y el tetris. Ella piensa de la misma forma y lo rechaza por la misma razón.