"Esperamos empezar despacito y que la gente vaya conociendo a los concursantes. Yo veo a los profesores tranquilos y seguros porque han estado todo este tiempo formándose. Vienen con muchas ganas y con las pilas bien cargadas", nos cuenta Paula.
Atras queda 'Pekín express', una trepidante aventura "para toda la familia", en la que ha destacado el afán de superación de todas las parejas. "Mi admiración por ellos y por todos los que sin saber a lo que venían el primer dia aceptaron las condiciones del programa. El simple hecho de aceptar el reto es admirable", remarca Paula.FórmulaTV.com ha entrevistado a Paula Vázquez para conocer cuales son sus sensaciones ante el final de 'Pekín express' y el inicio de la segunda edición de 'Fama'.
Este domingo ha finalizado 'Pekín express'. ¿Cómo se queda una después de recorrer los más de 10.000 kilometros que separan Madrid de Pekin?
Como si hubiera estado un año fuera de casa, en lugar de 45 días. Ha sido una aventura muy intensa: todo lo vivido queda muy comprimido en un corto periodo de tiempo. Cada día, según la etapa, recorríamos entre 300 y 1200 kilometros en furgoneta. Es alucinante, pasas de atravesar Mongolia a encontrarte frente a frente con la Muralla China. Los cambios horarios, por ejemplo, han sido brutales. A la vuelta necesitas 3 o 4 días para resetear el disco duro de la cabeza y volver al mundo real que es otro.
¿Qué destacarías de los finalistas?
Mi admiración por ellos y por todos los que sin saber a lo que venían el primer día aceptaron las condiciones del programa en la Plaza de Oriente de Madrid. El simple hecho de aceptar el reto es admirable. Los amuletos llegaron a tener un valor inmenso para ellos. Con cada etapa veíamos como se crecían.
¿Qué te parece la trayectoria que han tenido durante todo el programa los ganadores, Fernando y María?
Yo creo que hasta que no se marcharon las gemelas no se plantearon de verdad luchar por estar en la final. Para ellos era una aventura, un reto. Me fascina que el dinero también para ellos haya sido algo secundario. El valor del amuleto ha sido más físico que económico. Ellos preferían tener los amuletos hasta el final del programa en vez del propio dinero. Creo que han hecho un tándem muy bueno, a pesar de que ellos dicen ser una pareja en crisis. Forman una pareja que se complementa muy bien y es lo que les ha llevado hasta el final.
Javier y Martha tampoco se han quedado atrás...
Martha y Javier han tenido que superar más retos que los demás, el primero de ellos ha sido su relación. Llegaron al programa con los roles muy asumidos, pero esa situación fue cambiando a medida que avanzó el programa y tuvieron que asumirla. Para Javier ha supuesto un antes y un después, creo que ha madurado mucho en el programa. A Martha la hemos podido conocer un poco más. Han formado una pareja que, sobre todo, al final no ha contado con la complicidad del resto de concursantes. Tiene un gran mérito ver hasta donde han sido capaces de llegar, con la motivación de un solo amuleto. Eso es muy admirable, francamente. Javier tiene una vida muy acomodada y perfectamente podría haberse vuelto a España en cualquier capítulo anterior.
¿Hubieras apostado por alguna de estas parejas desde un inicio?
No me hubiera atrevido. En este juego la astucia, las estrategias, el físico... todo cuenta, pero la suerte también. Mira el camello que les tocó a José y Oier. Les perjudicó muchísimo pero era lo que había. La suerte tiene un papel muy importante en 'Pekín express'. Yo he procurado no obsesionarme con quien ganaba o quien no. Un presentador no se tiene que involucrar en ese tipo de preferencias, sobre todo, porque tenemos más información que los propios concursantes.
Rara vez hemos visto a Oier y José de acuerdo con los retos del programa. ¿Es cierto que no estaban conformes con los juegos que planteaba la organización?
No estaban de acuerdo nunca, era genial (risas). Yo me reía mucho con Oier, él consideraba que podían ser mejores. Tras la explicación de cada juego, Oier venía y nos decía que no le gustaba el juego. Pero siempre con buen talante, nada de mal rollo. A mi me molaba como lo vivía Oier. Yo siempre les decía que me interrumpieran si lo veían oportuno. Me gustaba que se hicieran con el programa. Que conste que yo a veces estaba de acuerdo con ellos.
En la etapa doce te pareció poco que José y Oier se mantuvieran en equilibrio durante 47 minutos. ¿Te escuchamos bien?
Parecido a este juego en "La isla", los concursantes aguantaron hasta 7 horas sobre unos palos. Yo pensé que la prueba sería para largo porque estaba en juego el pase a la final. Pensé que mínimo estarían 2 horas. De cualquier modo, no quiero menospreciar el esfuerzo de las parejas. Si te soy sincera cuando lo escuché por televisión a mí también me sonó fatal (risas). En ese momento parecía que el resto de compañeros iba a durar mucho más, pero aguntaron cosa de una hora más.
Se dice que ya no hay relación alguna entre Martha y Javier tras el final de 'Pekín express'. ¿Tienes tu noticias al respecto?
La verdad es que no lo sé. Con las que más he hablado ha sido con Idoia y con Ainhoa. En este tipo de programas se crea una hermandad entre el equipo y los concursantes porque acabas conviviendo con ellos. Las vicisitudes por las que pasan los concursantes no son las mismas que las nuestras pero nosotros también las sufrimos. Yo a la vuelta he necesitado hablar con Idoia para saber como llevaba el tratamiento. Habitualmente no suelo mantener el contacto con los concursantes de mis programas, pero sí es cierto que 'Pekín express' ha sido especial.
En primer lugar resaltaría que 'Pekín express' es un reality para la familia; segundo, el esfuerzo y la manera en la que se ha involucrado el equipo técnico; y, por último, la mezcla entre telerrealidad y documental. Los escenarios son inmejorables... y gratis (risas). No hay ningún programa de televisión que en decorados pueda igualar a este formato.
Uno siempre dice que le gustaría vivir una aventura de este tipo. ¿Te ves tú de mochilera?
Viajes de mochila no me he hecho, pero la vida que se hace en este tipo de programas se parece mucho. Nos hemos pasado todo el día metidos en coches, de un sitio para otro, sin sitio para dejar nuestras cosas... algo de "mochileo" sí que hay. Hemos dormido en tiendas de campaña con unas ratas como camiones (risas). La verdad es que sola me daría miedo viajar, según el país.
Siempre suele decirse que cada programa te aporta ciertas cosas. ¿Qué ha significado 'Pekín express' en tu carrera?
Al principio fue todo un reto. Cuando me dijeron que había un formato, sin saber cual o como era, me puse a rezar para que me tocara a mí. No me habían contado nada, pero no me costó nada aceptarlo. De hecho, viajar me empieza a gustar más que estar en un plató (risas). Cuando trabajas en exteriores lo haces con equipos que son de otra raza. En el terreno personal me quedo con la convivencia. Tener que vivir con mi equipo ha sido muy enriquecedor. Viajar abre muchísimo la mente. Hay una frase que dice "Viaja y lo entenderás", y es verdad.
Me han dicho que en la próxima edición vas a exigir una autocaravana?
(risas) Eso no es cierto, lo han exagerado muchísimo. Nuestra furgoneta era mi camerino, mi habitación, a veces mi cuarto de baño, mi lugar de comida... y la verdad es que es muy incómodo. Vamos hasta arriba de cosas y no queda espacio ni para moverte. A veces he echado en falta un poquito de privacidad. Sería un sueño si pudiera tener una autocaravana para poder dormir y darme un baño.
¿Cuántas personas formábais parte del equipo?
En todo el equipo éramos 120. Había españoles, belgas, alemanes y algún puertorriqueño, además de la gente local. La productora belga lleva muchos años haciendo este programa para toda Europa, por lo tanto ya se han recorrido esta ruta y otras, asi que cuando llegabamos a un país nuevo teníamos un traductor local. El equipo belga siempre iba un día por delante. 'Pekín express' es un programa muy complejo de hacer.
Para una presentadora de TV, las audiencias son el pan de cada día. Gracias a la audiencia tenéis pan para dar y repartir.
Ahora mismo sí (risas). Estamos viviendo un momento muy bonito en Cuatro, tanto con 'Fama' como con 'Pekín express'. Yo lo estoy saboreando y disfrutando muchísimo. Las audiencias además del pan es nuestra crisis de cada día. Nosotros no notamos la crisis, nosotros vivimos la crisis. Ha habido veces que he firmado por 13 programas y al segundo nos hemos ido a la calle porque no hay audiencia. Encima si es el comienzo de temporada, te vas a tu casa y te quedas sin trabajo. Estamos acostumbrados a que sea la gente la que decida nuestra futuro. Creo que el público ha cambiado mucho, ha madurado y selecciona los programas de una manera diferente. Hay más entretenimiento, frente a crónica social amarilla y sangrienta de hace poco. Gracias al apoyo de la gente podremos estar hablando en un futuro de una nueva edición.
'Pekín express' se grabó en verano, ¿resulta imposible hacerlo en otra época?
Habría que adaptarse a tantas cosas. Todo dependerá de la ruta que se elija. Yo estaré encantada de poder participar en el siguiente si Cuatro quiere, pero todavía no se ha tomado ninguna decisión.
Cuatro va a producir un nuevo formato de aventuras con familias...
Yo también he visto las promos, pero la verdad no tengo ninguna información. Sé que no lo va a hacer BoomerangTV que es la responsable de 'Pekín express'. No sé de que va ese programa.
Los concursantes eran observados como bichos raros en China. ¿Tú como lo viviste?
Parecían famosos (risas). Hubo un momento en el que los vi muy agobiados. Me acordé entonces de la presión que en España se sufre por ser un personaje conocido o popular. Te observan descaradamente en cualquier situación y en cualquier lugar. Yo me sentía normal. En algunos lugares estaba prohibido el paso de turistas, así que para aquellas personas vernos allí fue todo un espectáculo.
¿Cómo has vivido el programa in situ y cómo desde casa?
Absolutamente diferente. No me lo he perdido porque significa ver el trabajo que has hecho. Es saber lo que hemos hecho y cómo se está contando. Ten en cuenta que hay 9.000 minutos de grabación por cada programa emitido. Al final solo hemos podido mostrar 90 minutos. Es una gran sensación ver montado cada domingo el programa. Recuerdo cada plano, cada secuencia, cada imagen... son muchos recuerdos.
Y desde hoy dejas las carreras por los pasos de baile de 'Fama'. ¿Dispuesta a comerte el mundo?
Estoy muy ilusionada. En 'Fama' se creó un ambiente muy chulo, de gente joven, de gente que empezaba, de gente con muchas ideas.... Contábamos con la libertad de hacer lo que quisiéramos. 'Fama' fue un trabajo muy adictivo y tenía ganas de que regresase. Este pasado viernes fue un día muy especial porque me reencontré con todo el equipo.
¿Cómo ha sido la entrada de los chicos en la Escuela?
No sabes que energía han desprendido todos. Han bajado del autobús bailando, gritando, dando saltos de alegría... La casa es completamente nueva, se ha redecorado enterita, es espectacular. Tenemos más profesores que iréis conociendo.
Este año tendremos dos Paula Vázquez, qué casualidad...
Pues sí, la nueva profesora de Jazz-fusión se llama como yo y va a ser un problema. Yo creo que en plató se van a dar casos de confusión. A ella la conoceremos como Pau, es argentina. La verdad es que tiene mucho mérito. Pau ha pasado una selección muy grande, había muchos profesores -incluso internacionales- que querían venir a 'Fama'. Lo que es realmente curioso es que estaba protagonizando el musical de 'Fama'. Nos contaba la anécdota que cuando la gente veía en el libreto su nombre esperaba que yo saliera a bailar (risas).
El primer casting de la edición pasada anotó un 5,5% en el access prime time.
Yo recuerdo que en aquella época todavía no me había sumado al proyecto. Cuatro tampoco era lo que es ahora. Un 5% en aquel entonces era un éxito. Hay que valorarlo todo.
¿Siente una más miedo de la respuesta de la audiencia ante un primer estreno o ante un regreso?
Supongo que los directivos estarán esperando sólo los resultados, los números. Hay que recordar que 'Fama' no empezó con la audiencia que terminó. Esperamos empezar despacito y que la gente vaya conociendo a los concursantes. Yo veo a los profesores tranquilos y seguros porque han estado todo este tiempo formándose. Vienen con muchas ganas y con las pilas bien cargadas. No tenemos una presión por la audiencia, al menos Cuatro no nos lo ha hecho llegar así.
¿Has empezado ya a ensayar con Rafa tu super gran coreografía?
Nooooo (risas). ¡¿Qué pasa, hay un complot contra mí?! Yo no bailo. Yo le agradezco a Rafa la confianza que deposita en mí, pero la respuesta es no. No quiero hacer el ridículo. Sólo con ver el nivel que hay... me echa para atrás. No lo haré, aunque me sigan insistiendo (risas).
Supongo que las relaciones con Cuatro serán magníficas.
Sí, la verdad es que son muy buenas, pero desde un primer momento. Creo que fue un flechazo. A mí siempre me ha gustado la manera de trabajar de Cuatro, antes de que contactaran conmigo yo ya me había interesado en ellos. Me siento muy relajada y tranquila en esta casa.
¿Tuviste ocasión de descansar tras el final de 'Pekín express'?
La verdad es que no. En agosto pude escaparme algunos días nada más venir de 'Pekín express'. Cogí un avión y me fui a sacarme la licencia de buceo (risas). Sólo eso pude hacer, pero no me importa, ya me organizaré y sacaré tiempo de donde sea.