TVG estrena 'A Estiba', un thriller policial "oscuro y arriesgado" con tres mujeres protagonistas

Un barco con bandera nigeriana atraca en el bullicioso puerto de Ardora, localidad ficticia de la costa de Galicia. Nada inusual si no fuese porque toda su tripulación aparece asesinada a balazos y la carga ha desaparecido por completo. El crimen coincide con el regreso de Manuela Fortes (Melania Cruz) a la ciudad para sustituir a su padre al frente de la comisaría, por lo que la matanza del mercante se convierte en su primer caso. Ese es el punto de partida de 'A estiba', un thriller policial trepidante, oscuro y arriesgado que llega a Televisión de Galicia este domingo 22 de septiembre a las 22:15 horas.

A lo largo de 15 episodios y con tres mujeres en los papeles protagonistas, 'A estiba' narra el trajín inherente a un puerto de mercancías desde dos perspectivas muy diferentes. Por un lado trabaja la familia Fortes, cuya vocación policial nace del patriarca, Emilio (Luis Iglesia), rudo y carismático comisario de la Policía Nacional que está a punto de jubilarse, por lo que elige a su propia hija como sucesora. Melania también se reencuentra con sus dos hermanas. Cruz Fortes (Antea Rodríguez) es una policía de calle, admirada por sus compañeros pero no tanto por sus jefes. Rosalía (Desiré Pillado), mujer del alcalde, es, aparentemente, sobria e imperturbable, pero empieza estar harta de cargar con esa imagen.

En el otro bando se encuentra la familia Longueira, que solo se rige por la ley del puerto, o lo que es lo mismo, la ley del silencio. César (Adrián Castiñeiras) es el jefe del clan y, desde que el Delta atraca en Ardora, el principal sospechoso de la matanza. Acostumbrado a gestionar la entrada de cargas clandestinas, tendrá que soportar la presión de la policía mientras prosigue con sus actividades delictivas. Ana Santos, Fernando Dacosta, Fran Lareu, Paula Cereixo, Alberto Rolán, Machi Salgado, David Novas Nacho Nugo y Héctor Carballo completan el reparto.

Su director, Miguel Conde, que ya trabajó con la productora Voz Audiovisual en éxitos autonómicos como 'Serramoura' y 'Padre Casares', define la serie como un "gran paso" en el audiovisual gallego. Grabada en las localidades de Sada, Culleredo, Bergondo, A Coruña y Ferrol, Conde ha estado al frente de un rodaje "adaptado a las tendencias en las series más modernas: que haya poco plató, que se ruede más en exteriores y en interiores naturales, lo que para una serie de bajo presupuesto es un esfuerzo bastante grande", reconoce el cineasta, que comparte esa función con Juan Galiñanes e Giselle Llanio.

Conde estaba seguro de que "haciendo una serie convencional" se quedarían atrás: "La gente cuando ve las series en casa compara, pero no sabe cuánto cuesta una y cuánto cuesta otra". Por eso, "'A estiba' se caracteriza por intentar hacerse un hueco en este mundillo; nos buscamos la vida para estar a la altura y poder competir desde la humildad". Lo hace desde una estética oscura y una narrativa mucho más agresiva de lo habitual: "Hay mucha cámara en mano, perseguimos a los personajes para lograr una puesta escena muy 'sucia'", detalla consciente de que eso "también lo hace más difícil a la hora de rodar", pero lo verídico del resultado vale la pena. A ese realismo también contribuye la naturalidad con que se trata cada secuencia, algo que Conde considera una apuesta "arriesgada" a nivel autonómico. "Los temas que se tratan, se tratan sin cortarse", anticipa sobre varias escenas de violencia y sexo que rozan lo explícito y que "darán que hablar".

La estela de 'Fariña'

Tan humilde como ambiciosa, 'A estiba' aspira a poner de nuevo el foco en la ficción gallega. Un camino que llevan años marcando productoras como Bambú ('Velvet'), Portocabo ('Hierro') y Vaca Films ('La unidad' llegará pronto a Movistar+) a nivel estatal, pero también el hecho de que, cada vez más, las producciones elijan Galicia como lugar idóneo para sus rodajes. El ejemplo más reciente es 'Néboa', recién finiquitado su rodaje para Televisión Española y que también lleva el sello de Voz Audiovisual. Aunque si una serie ha abierto las puertas del noroeste peninsular al resto del planeta, esa es 'Fariña'. Más allá de los increíbles parajes naturales que evidentemente sirven de atractivo, Miguel Conde coincide en que ahora mismo venden la historias con esencia. "Se demuestra que se pueden contar historias que, aunque sean universales, están centradas en lo nuestro", resume. "Para los que nos ven desde fuera es muy interesante, como para mí ver 'Malaka', por ejemplo, y descubrir su intracultura, su jerga... me parece apasionante".

En cuanto a un posible viaje a nivel global a través de alguna plataforma de streaming (camino que abrió este año 'O sabor das margaridas' para las series en gallego, renovada en Netflix por una segunda entrega), Conde asegura que no hay nada firmado, pero "a todos nos gustaría que tuviese una proyección más allá de aquí". Para empezar, los espectadores tienen una cita con la acción y el misterio cada domingo en Televisión de Galicia. A partir de entonces, como dice el refrán, "pasiño a pasiño faise o camiño".