El 12 de enero 1998 se estrenaba en La 1 de Televisión Española 'A las once en casa', una comedia familiar que llegaba dispuesta a hacerse un hueco en la parrilla televisiva con una historia protagonizada por personajes que encarnaban muchos tópicos vistos en otras series del mismo género como 'Médico de familia' o 'Farmacia de guardia', pero con unas tramas atípicas para una ficción de la época y en las que primaba un humor que rozaba en ocasiones lo absurdo. Asimismo, el contexto social era uno de los factores más importantes, lo que permitía a los guionistas crear conflictos con los que muchos espectadores podían sentirse identificados, una fórmula que funcionó y con la que consiguieron registrar audiencias de cuatro millones de espectadores.
La serie logró mantenerse en antena durante dos temporadas, contando con un total de 65 episodios y despidiéndose de sus seguidores el 28 de junio de 1999. Entre sus protagonistas, contaba con un Antonio Resines que comenzaba a abrirse hueco en las ficciones familiares, con una Ana Obregón en pleno apogeo y con una Carmen Maura que daba sus primeros pasos como actriz de una serie de televisión. En concreto, la ficción narraba las vivencias de una familia disfuncional encabezada por Ángel (Resines), un hombre separado que trata de rehacer su vida con su segunda mujer, Paula (Obregón), y sus hijos. Tampoco faltaba la figura de la ex, Olga (Maura), que siempre hacía acto de presencia en el momento menos oportuno. Tras más de dos décadas de su estreno, desde FormulaTV queremos echar la vista atrás y recordar cómo era 'A las once en casa'.
Problemas generacionales en los años noventa
Lidia San José y Ana Obregón eran madre e hija en 'A las once en casa'
La base fundamental sobre la que se asienta 'A las once en casa' son las relaciones entre los diferentes miembros de la familia, algo que dejaba ver cómo eran los problemas generacionales de los años noventa. La propia frase que da nombre a esta comedia hace referencia a una expresión muy empleada por madres y padres para indicar a sus hijas e hijos la hora a la que debían regresar a casa, palabras que ya hacen intuir por dónde van a ir los hilos de la serie, que tiene como una de las tramas más importantes la forma de ser y de actuar de la hija adolescente, Lucía, personaje interpretado por Lidia San José.
La joven representaba todos los tópicos de las chicas de su edad preocupadas por salir de fiesta, ligar, sus ídolos musicales o sus actores preferidos, lo que muchas veces conseguía que no regresase a casa a tiempo. Además, se trataba de una familia que se alejaba del prototipo de unión ideal, centrándose en un padre divorciado y casado por segunda vez, con hijos de diferentes madres y con su exmujer rondando cada dos por tres por su vida como si todavía continuasen juntos.
Una familia extensa
La familia protagonista de 'A las once en casa'
Si por algo se caracterizaba 'A las once en casa' era por sus personajes, esos que formaban una familia que poco tiene que ver con el arquetipo de estructura habitual. En esta comedia teníamos a un matrimonio formado por Ángel y Paula, ambos con dos hijos en común, Lucía y Álex (Javier de Quintos). A ellos se le añadía Luis (Juan Díaz), el hijo que Ángel tuvo con Olga. Los cinco compartían espacio en el mismo hogar, un piso que siempre estaba repleto de gente. Cuando no era Olga la que aparecía por sorpresa, les visitaba Mariló (Mary Carmen Ramírez), madre de Paula y una señora muy aficionada al mundo espiritual. El contrapunto lo añadía Agustín (Alfonso Vallejo), el cuñado de Ángel y cuya sola presencia ya generaba conflictos con el protagonista, representando todos los tópicos de cuñado pesado, presumido, tacaño y prepotente.
Una comedia como 'A las once en casa' funciona también gracias a unos personajes secundarios que complementan a la perfección a los protagonistas. Destacaba Charito (Mariola Fuentes), la desvergonzada asistenta que siempre que podía se quejaba de todo y recibía la visita continua de José Antonio (Javier Manrique), más conocido como "Chachi" porque era una de las palabras que más repetía. Tampoco faltaba Bea (Duna Santos), la vecina y mejor amiga de Lucía. Quien más llama la atención, y no por el personaje que interpretaba entonces, es Alejo, el gerente de la discoteca a la que solía acudir la joven protagonista, un local regentado por Alejo, personaje interpretado por Pedro Alonso, mundialmente conocido por ser Berlín en 'La Casa de Papel'.
Entre la ironía y el disparate
Lidia San José, Mariola Fuentes y Javier de Quintas en 'A las once en casa'
Crear una comedia y conseguir que el espectador disfrute y se ría no es una tarea sencilla. Los guionistas de 'A las once en casa' se basaron en tópicos, comparaciones y aspectos del contexto social en el que se desarrolla la ficción para intentar generar situaciones cómicas y recurrir a chistes fáciles con los que divertir a la audiencia. Uno de los recursos más empleado era la ironía, especialmente a partir de los comentarios de los protagonistas. Tampoco nos podemos olvidar de los propios personajes, sobre todo de aquellos que representaban arquetipos de comedia como José Antonio, con el que recurrían a sencillos gags como el famoso "chachi".
Una cabecera mítica
Queramos o no, las sintonías del comienzo de nuestras series favoritas acaban quedándose en nuestra memoria y, con el tiempo, solo es necesario escuchar los primeros segundos para recordar automáticamente las imágenes que acompañaban a cada melodía. Igualmente, no es necesario que dicha sintonía tenga una letra, de hecho, en muchas de las series de los noventa lo habitual era una melodía pegadiza acompañada de imágenes de los personajes a forma de presentación, algo que también sucedía en 'A las once en casa'.
Además, esta serie contaba con la peculiaridad de que, a diferencia de la mayoría de las ficciones, su cabecera estaba creada a partir de dibujos animados con los que representaban a los propios personajes. De este modo, la cabecera partía con un reloj marchando las once y en ese momento comenzaba una mini historia en la que la joven protagonista se lanza a la carrera para llegar a casa a tiempo mientras vemos a sus padres y a Olga caracterizados con las peculiaridades, rasgos y forma de ser que les identifican.
Como muchas adolescentes de finales de los años noventa, Lucía estaba completamente enamorada de los Backstreet Boys', la banda de moda del momento encabezada por Nick Carter. Tanta era la obsesión por los cinco integrantes del grupo que muchas chicas hacían lo imposible por acercarse a ellos, tal y como quisieron reflejar en la serie a través de la joven protagonista. En una trama un tanto surrealista, Lucía tuvo la fortuna de asistir a un concierto privado en su discoteca habitual, pero lo mejor de todo fue que subió al escenario con ellos y Howie le dio un beso, provocando que ella se desmayara en sus brazos. La situación de por sí ya parecía algo forzada, pero en ese tono de humor con tintes surrealistas, el cantante la conducía en brazos hasta una zona privada donde, además, le entregaba su dirección para que ella le escribiese cuando quisiera.
La vida después de 'A las once en casa'
Lidia San José en 'Paquita Salas'
El reparto de 'A las once en casa', en mayor o menor medida, ha continuado ligado al mundo de la interpretación, manteniéndose en la industria después de casi dos décadas de su final. Entre los más jóvenes del elenco destacaba Lidia San José, que se estrenaba con un personaje principal. Tras su paso por esta serie, la joven intérprete participó en '¡Ala... Dina!', otra de las ficciones familiares más exitosas de principios del nuevo milenio, y 'Diez en Ibiza'. Sin embargo, durante muchos años pasó desapercibida, hasta que Javier Calvo y Javier Ambrossi le dieron la gran oportunidad de participar en 'Paquita Salas', dónde hace de ella misma. Asimismo, ha formado parte del elenco de 'Luis Miguel: La Serie'.
Por su parte, Juan Díaz tuvo que esperar hasta 2005, año en el que se incorporó al elenco de 'Aquí no hay quien viva', donde encarnó a Álex Guerra, un joven presumido que casi siempre estaba pensando en chicas e intentando ligar aprovechando cualquier situación. Igualmente, ha participado en 'Sin tetas no hay paraíso', 'Punta Escarlata' o 'Amar es para siempre'. No obstante, más recientemente, le hemos podido ver en 'Cuéntame cómo pasó', donde da vida a Samuel, un compañero de Toni Alcántara que hizo acto de presencia en la serie por primera vez en la decimoquinta temporada.
Lo más leído