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'Bake Off España' alcanzó su cuarta emisión el lunes 29 de enero, en la que los concursantes se despidieron de Encarna Salazar, tras dos pruebas en las que Rocío Carrasco acabó protagonizando un par de sustos considerables, los cuales no evitaron que se situara en el podio de la jornada junto a Patxi Salinas y Yolanda Ramos.
El primer reto de la noche, que consistió en elaborar pastas tradicionales, trajo consigo un pequeño hándicap para todos, excepto para Ramos, dueña del delantal azul: todos ellos debían leer la receta desvelando la tinta invisible de un folio con ayuda de una vela. Una dificultad añadida que acabó con varias hojas quemadas, además del pelo de Carrasco, cuando esta procedió a leer los ingredientes que había descubierto en su hoja a Salinas.El exfutbolista había quemado parte de su hoja y, concentrado en apuntar las palabras de Carrasco, ni ella ni el vasco se dieron cuenta de que la madrileña acercó demasiado el pelo a la vela. Fue entonces cuando la llama prendió su pelo y empezó a salir humo, haciendo saltar a la concursante al momento. "¡Se me ha quemado el pelo!", repetía Carrasco, mientras se sacudía el pelo para evitar el fuego. Un brevísimo episodio que se dio ante un más que tranquilo Salinas, que insistía en que le repitiese uno de los ingredientes: "Que no pasa nada, eso se pone postizo ahora".
En esta vida solo pedimos tener la tranquilidad que tiene @patxisalinas mientras Rocío se quema el pelo. Señores, ¡Esto es #BakeOffRTVE !
— La 1 (@La1_tve) January 29, 2024
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¿Pero que ha pasado aquí? ??????????? Tanto estar con Wilbur hoy es el día de la piruetas #BakeOffRTVE
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"Ha querido cambiar su tarta, por torta"
Para el segundo reto, los concursantes debían elaborar la tarta de cumpleaños que les hubiera gustado tener en su niñez. Este reto invitaba a dejar volar la imaginación, como también voló la pobre Carrasco por las prisas. Y es que la madrileña, al dirigirse al horno, no vio la rejilla que Julio Salinas había dejado en el suelo y, al pisarla, resbaló y cayó al suelo. "No ha pasado nada, todo bien", repitió la concursante, ante la preocupación de la mayoría de sus compañeros.
"La vi cómo asomaba cabeza y digo: 'Bueno, si asoma cabeza, medio cuerpo le queda. Del tronco para arriba está bien", bromeó Ramos, mientras que los hermanos Salinas hicieron lo mismo, aunque con metáforas de fútbol e incluso Paula Vázquez comentó de la concursante que "ha querido cambiar su tarta, por torta". "Consejo: No corráis por la cocina por mucho o poco tiempo que os quede, no merece la pena matarse", se sumó la propia Carrasco.
