Tras cinco días de multitudinarias y convulsas movilizaciones en Cataluña como respuesta a la sentencia del procés, las protestas se han trasladado también a la capital. En Madrid se convocó este sábado 19 de octubre una manifestación en la que miles de personas llegaron desde la estación de Atocha a la céntrica Puerta del Sol clamando por la amnistía de los presos.
Al igual que ocurrió en Barcelona en días anteriores, los periodistas no tuvieron fácil realizar su trabajo durante la manifestación madrileña. La reportera de laSexta Irene Rupérez ha sido la última en denunciar insultos y vejaciones mientras intentaba entablar una conexión en directo con 'laSexta noticias 20h'. "Ha sido imposible trabajar. Me han escupido a la cara, me han tirado un chicle al pelo incluso nos han arrancado la esponjilla del micrófono", explicaba Rupérez a Cristina Saavedra.
"Nos hemos tenido que apartar de la zona cuando tan solo queríamos trabajar y contar la manifestación", explicaba la reportera. Poco después del incidente, los manifestantes marcharon hacia Callao, donde intentaron cortar el tráfico de la Gran Vía. La Policía Nacional acabó cargando contra algunos de ellos. "De nuevo, problemas para informar", lamentaba Saavedra desde el plató de informativos.
Lo más leído
Más incidentes
Mientras tanto, en Barcelona el periodismo se ha convertido en una profesión de riesgo. Para muestra, las agresiones denunciadas por TVE a dos de sus equipos durante la noche del viernes 18 de octubre. Una reportera de 'Todo es mentira' fue agredida con el lanzamiento de latas y rollos de papel higiénico mientras que Verónica Sanz, compañera también de laSexta, recibió un balonazo durante una conexión en directo.