Programa relacionado
Después del regreso por todo lo alto de Carmen Borrego a 'Sálvame' en la tarde del lunes 6 de septiembre, el programa recibió a su segundo fichaje de la temporada, Alba Carrillo, al día siguiente. La madrileña volvía al formato después de haber formado parte del equipo entre 2017 y 2018, momento en el que recordó algunas de sus disputas con sus ahora compañeros, entre las que destacaban sus diferencias con María Patiño.
Jorge Javier Vázquez charla con Alba Carrillo en su regreso a 'Sálvame'
Carrillo pudo escuchar entonces las críticas que sus compañeros de 'Sálvame' habían lanzado contra ella, al igual que sus respuestas a cada uno de ellos, como fueron los casos de Kiko Matamoros, Rafa Mora, Belén Esteban, Miguel Frigenti y, especialmente, Patiño. "No es que me moleste y no la pueda soportar: para mí, es totalmente insignificante", afirmó la madrileña, al hablar de la presentadora de 'Socialité', de quien aseguró que "no pienso en ella en absoluto". "Antes no teníamos feeling, pero tuvimos un problema", explicó la recién llegada. Carrillo opinó entonces que "creo que, sobre las cosas de las que me acusa, debería hacer autocrítica, porque a lo mejor están más cerca de ella que de mí". "Simplemente, creo que debería pedirme perdón", manifestó la colaboradora.
"Le engrandecería pedirme perdón"
"A ella se le llena la boca diciendo que es muy feminista y a mí me dijo unas barbaridades una vez que creo que jamás se las diría a un hombre", explicó Carrillo. La madrileña quiso recalcar que "no me provoca nada, pero creo que le engrandecería pedirme perdón", insistió la colaboradora, que acabó enfrentada con Gema López cuando esta le reprochó que "le das la razón a María cuando dice que siempre quieres quedar por encima de los demás, porque con lo que has dicho, dejas claro que siempre necesitas que te pidan perdón".
"He metido muchísimo la pata, pero tengo la cualidad de poder perdón. Cuando me equivoco, pido perdón", se defendió Carrillo, antes de señalar que "jamás he visto a María Patiño pidiendo perdón, a no ser que sea hacia una persona que ella considere superior o de la que pueda sacar algún tipo de rédito". "Precisamente María se caracteriza porque puede meter la pata, pero tiene la capacidad de pedir perdón, y lo ha hecho públicamente", replicó López, en medio de la disputa.