Albert Baró está experimentando el éxito de 'Merlí' en su propia trayectoria y es que tienen bastantes paralelismos. De la noche a la mañana se convirtieron en un fenómeno en Cataluña. Luego la serie pasó a emitirse a nivel nacional, sumando miles y miles de seguidores, igual que hizo el joven actor, que saltó a Madrid para trabajar en 'Servir y proteger'. Mientras tanto, 'Merlí' se incorporó al catálogo de Netflix, logrando que se convirtiese en un fenómeno mundial, sobre todo en Latinoamérica. Y ahora, este catalán ha conquistado Argentina, donde se ha convertido en todo un galán protagonizando 'ATAV', 'Argentina, tierra de amor y venganza'.
El joven actor nos atiende desde su casa en Buenos Aires, manteniendo una extensa e interesante conversación con nosotros sobre el éxito de esta telenovela, cómo es la serie y qué vínculo comparte su personaje con su abuelo en la vida real, cómo se siente al haberse convertido en un personaje la prensa del corazón, cómo es vivir fuera de casa y cuáles son sus intenciones de volver a España. Y todo esto nos lo cuenta con un mate en la mano, algo a lo que se ha vuelto adicto en Buenos Aires y empezó a tomar para adaptarse a la cultura argentina.
Albert Baró, como Bruno en 'Argentina, tierra de amor y venganza'
Para los que nos acabamos de enterar de este éxito tuyo en Argentina, cuéntanos en qué estás trabajando.
Pues estoy haciendo una serie diaria, una telenovela que se llama 'Argentina, tierra de amor y venganza', un título bastante largo que lo han reducido con 'ATAV', sus siglas. La propuesta salió el año pasado sobre el mes de noviembre. Mi representante, Ruth Franco, me dijo que algo se estaba moviendo, que había un proyecto donde necesitarían a un actor español para contar una historia inspirada en los años 30, ya que empieza en el año 36, en la guerra civil española.
Y no te lo piensas en ningún momento y te lanzas a la piscina...
Se estuvo hablando, se valoró todo a través de mi representante de Argentina, y yo en ese momento no tenía nada de trabajo ni nada que me atara y dije: "Voy a aprovechar esta oportunidad, esta experiencia". Siempre el hecho de ponerte a trabajar fuera de tu país, de tu zona de confort te coloca como una experiencia única en todos los sentidos, personal y profesional. Quería probar esto, sabiendo que va ser una etapa diferente, distinta y voy a ver qué es lo que me pasa con todo esto. Entonces viajé y ya llevó aquí seis meses. Es un trabajo muy intenso, son muchos días de trabajo y mi personaje es protagónico en esta historia por lo que me toca trabajar todos los días jornadas enteras entre semana.
Cuando alguien pisa un terreno desconocido con gente nueva, sin la familia, un trabajo nuevo, supone un proceso de adaptación pero me siento muy contento de mí mismo porque me he sabido adaptar muy fácilmente. He tenido el apoyo de todos mis compañeros que me han ayudado un montón con todo esto, me han ayudado muchísimo en lo que es el trabajo y también fuera del trabajo. Me decían: "Oye, Albert si necesitas quedar para repasar un poco, para hablar del proyecto, de cómo te sientes... Estoy aquí". Me he encontrado con un grupo humano muy bueno; una suerte, porque siempre cuando estás en el trabajo está bien encontrarte y cruzarte con gente que te ayuda y gente con la que conectas, y en este proyecto ha sido así.
Ahora estamos cruzando el charco pero imagino que te serviría la experiencia de trasladarte de Barcelona a Madrid cuando fichaste por 'Servir y proteger'.
Sí, al 100%. De hecho, yo creo que el paso por 'Servir y proteger' me ayudó un montón y me hizo ser mucho más fuerte para, ahora, poder tener esta experiencia y afrontarla desde un punto más maduro, sabiendo lo que es estar lejos de tu familia, de tus amigos, de esa zona de confort. Al final Madrid, la gente, sus costumbres... todo es muy parecido a como es en Barcelona, además que estaba a dos horas y media de mi familia en AVE. Aquí es distinto. Estuvo muy bien haber pasado por 'Servir y proteger', como una preparación antes de vivir esto de aquí, me enseñó un montón de cosas como el ritmo de una serie diaria, un ritmo muy intenso.
¿Se nota esa diferencia de un país a otro a la hora de trabajar?
Hay algo de diferencia, sobretodo en el ritmo de la tira diaria. Si una serie diaria ya es muy intensa a la hora de trabajar, aquí en Argentina lo es todavía más porque los argentinos son una gente con mucha sangre, muy intensos, son gente muy viva. A la hora de trabajar intentan resolver cualquier problema que pueda haber, se organizan de una manera más... van más al día a día. Por ejemplo, a nosotros nos pasan el plan de rodaje el día anterior y esto en España, en 'Servir y proteger', no pasaba. Allí nos mandaban el plan de rodaje el jueves para la semana siguiente. Aquí a la hora de organizarse son un poco distintos pero ellos se encuentran bien con todo esto, se sienten cómodos porque ya es su forma de vivir y de trabajar, ya están acostumbrados.
Albert Baró junto a compañeros de 'Argentina, tierra de amor y venganza'
Es interesante que en Bruno, el personaje que interpretas, hayas encontrado relación con tu abuelo, ¿no es así?
Sí, porque parte del primer capítulo empieza en la guerra civil y mi personaje es Bruno, un chaval de 22 años, mi edad, que está en la guerra en el bando de los republicanos y allí se cuenta cómo eran los bandos: los franquistas y los republicanos. Un amigo suyo lo traicionó y a partir de aquí comienza el conflicto y la historia con mi personaje, con esa herida de la traición de su amigo. Realmente no tiene nada que ver con mi abuelo pero en esa época sufrió todo lo que era la guerra civil, y él la vivió con mi edad. Hablando con mis abuelos me contaron cómo lo vivieron, qué pasaba en ese momento y por eso siento que mi personaje podría haber sido perfectamente como mi abuelo, aunque en este caso mi abuelo no tuvo que viajar fuera del país porque encontró la tranquilidad y el refugio cerca de su casa, que ahí es donde conoció a mi abuela, su mujer. Él encontró el refugio y esa paz cerca de su casa, en el caso de Bruno tuvo que viajar como muchos españoles que tuvo que emigrar a Argentina, a Francia, a muchos lados. Siento que al final mi abuelo tuvo que hacerlo porque la guerra lo dejó todo anulado, todo mal, entonces él tuvo que empezar de cero también con toda su vida, su día a día y es un poco lo que le está pasando a mi personaje.
Sí, porque el personaje es catalán y a veces los guionistas ponen palabras en catalán, ya que eso enriquece mucho porque le da una identidad a el personaje. Así que nada, visca Catalunya!
Te has convertido en un galán en Argentina.
Aquí en España también...
Albert Baró con su compañera de reparto en 'Argentina, tierra de amor y venganza'
Claro, es que es eso, a mí me sorprende mucho que todo esto esté conmigo aquí en Argentina si allí estoy cero acostumbrado. En España nunca me había pasado y nunca me lo hubiera imaginado, sin embargo, aquí si vas al teatro te esperan los periodistas, los fotógrafos para al día siguiente salir en portada en una revista. A nivel de privacidad aquí tienes que cuidarte mucho y a nivel de exposición tienes que vigilar; más que vigilar, cuidarte, porque puede pasar cualquier cosa al día siguiente.
Bueno, antes de venir ya me dijeron que aquí en Argentina era todo así y que funcionaban las cosas así, entonces ya venía un poco preparado. Un poco me incomoda pero tampoco me molesta, porque tampoco siento que tenga que esconderme de nada, mi vida es un 90% el trabajo y un 10% vida personal. Me paso todas las horas en los estudios trabajando y cuando no trabajo estoy en casa estudiando, así que, ¿de qué me tengo que esconder? Sí que me preguntan si tengo novia, si no tengo, qué pasa con la compañera de trabajo con la que hago pareja en ficción... Se meten mucho con todo esto.
Yo he contestado cuando me preguntan que está todo bien. Creo que es un morbo que se crea, las ganas de escuchar la respuesta del actor a ver qué es lo que responde. Es el morbo de querer ver a la pareja de la ficción pasar a la realidad, es un morbo y ya está pero eso no significa que tenga que existir.
Todo esto imagino que también vale como promoción de la serie.
Sí, aquí trabajan así. La publicidad la hacen con ese tipo de prensa. Porque luego también te invitan a programas donde te entrevistan para conocer tu trayectoria y tu carrera pero también en momentos te hacen preguntas personales, más íntimas, o sea, que al final terminan yendo por ese camino. Hay prensa rosa como en todos lados pero aquí hay mucha fuerza en todo esto.
No sé qué intención tienes, si quedarte en Argentina o cuando acabes la serie volverte a España, pero puede que aquí no exista ese boom. Además, no te veo sentado en el 'Deluxe'.
Sí, sí claro, yo tengo muy claro todo esto. No sé cuanto tiempo voy a estar aquí, sé que la serie se ha renovado hasta finales de año, yo tenía un contrato hasta finales de agosto pero la serie está funcionando muy bien. Era una gran apuesta esta serie para el país, hacía mucho tiempo que no se presentaba una propuesta tan arriesgada, tan distinta y con tanta producción detrás. Está funcionando muy bien, estábamos todos expectantes para ver cómo iría todo, pero el público lo ha recibido con mucho cariño y hay mucha gente siguiendo esta serie. Se comenta que es algo muy distinto que hacía mucho que no pasaba en la televisión de Argentina y con la competencia, que cada vez existe más con todas las plataformas digitales, pues la gente deja de ver cada vez más televisión.
Mi personaje, si va todo bien, estará hasta noviembre también y luego ya se verá. Tengo muchas ganas de visitar a la familia, a los amigos, así que casi seguro que lo que haré es volver. Pero con las puertas abiertas por si tengo que volver a Argentina, porque también mi intención en este proyecto era que me conozcan aquí y trabajar lo mejor posible para futuros proyectos.
Respecto al éxito aquí y si voy a volver a España yo lo tengo muy claro, el éxito al final para mí no es nada en concreto. El éxito es estar bien uno mismo. El éxito en el trabajo, en redes sociales, lo que pueda decir la gente... esto es algo pasajero, es humo. Ahora puedo estar muy presente en Argentina, puede estar todo muy caliente en este sentido porque estoy en emisión, estoy en el aire, saliendo todos los días, estoy en casa de la gente de aquí de Argentina pero cuando se termine este proyecto ya está. Cuando el proyecto termina, cuando ya no estás en emisión desapareces de la gente, esto es algo pasajero, yo voy a llegar a España y todo seguirá como seguía antes de irme a Argentina y empezar este proyecto.
Albert Baró
¿Te han ofrecido nuevos proyectos?
No, no, la verdad que como la gente sabe que estoy con esta telenovela hasta finales de año, saben que con este ritmo es imposible compaginarlo con otra cosa. Así que estoy con esto y cuando termine a ver si sale otra cosa aquí, en España o donde sea. Yo encantado de volver a España y trabajar ahí, evidentemente.
Estaría bien que la serie se viera en España. Por cierto, aquí ahora hay un boom de las telenovelas turcas, ¿también ocurre allí?
Sí, las series turcas están funcionando también aquí en Argentina, de hecho hace unos años se emitió en el canal de la competencia. Telefe puso esa serie turca que funcionó muy bien y también era de una pareja que funcionaron muy bien y fue todo un fenómeno. Este año se emitió la segunda temporada u otra serie con la misma pareja y, mientras, nosotros estábamos emitiendo la nuestra en el otro canal, entonces hubo la duda de ver si se nos va a bajar la audiencia y el rating porque sabían que esa pareja había pegado mucho aquí en Argentina. Pero no, la gente siguió con lo nuestro e incluso tuvieron que cambiar el horario de la novela turca porque no había mucha audiencia. La gente fue muy fiel y nosotros estamos muy contentos.
Tras 'Merlí', el éxito no te viene de nuevas, ¿no?
Sí, en Argentina funcionó muy bien esto y en España también, pero me sorprendió que en Argentina llegó muchísimo, mucha gente vio la serie. Han pasado unos cuantos años de 'Merlí' y en su momento cuando estábamos en emisión fue un éxito, pero luego cuando las tres temporadas salieron en Netflix también fue un boom, una cosa de no poder creer lo que estaba pasando. Pero ya han pasado dos años, hay otras series, hay otros éxitos que dentro de unos años ya no estarán, todo es pasajero, todo pasa. Es algo puntual y todo bien. El productor vio 'Merlí' y pensó directamente en mí a la hora de poder interpretar este personaje de Bruno, entonces el proyecto ayudó mucho a que ahora esté en Buenos Aires trabajando en esta producción. Esto surgió a través de la acogida que tuvo en Argentina.
¿Qué recuerdos tienes y qué supuso para ti tanto profesionalmente como personalmente esta serie?
Mucho. Han pasado bastantes cosas desde que nos empezaron a hablar del proyecto, desde los castings hasta el final de la tercera temporada. Fueron algo más de tres años muy intensos con el grupo maravilloso que creamos de compañeros en la serie, que siguen siendo amigos, familia... Entonces 'Merlí' nos dio mucho a todos. Es algo que siempre voy a llevar en mí porque fue un proyecto que creo que nos marcó a todos y en mi caso aprendí muchísimo de la gente que me crucé. Fue un proyecto muy especial partiendo de los guiones que estaban muy bien escritos, con unas historias muy interesantes y tramas muy potentes y necesarias para contar. También por el grupo humano de dirección, producción, los compañeros... Y luego la acogida que tuvo en los espectadores que fue muy buena y cuando entró en las plataformas se sumó aún más público.
La verdad es que ha viajado mucho, yo no me lo podía creer, pues era un proyecto catalán para la televisión pública de Cataluña y ha acabado cruzando el charco hasta Argentina, por ejemplo. Cuando me reconocen y me dedican unas palabras lo viven mucho, empalizan con el personaje y lo notas en su mirada. Les empiezan a brillar los ojos. Como que están muy dentro de la historia. Dices "hostias, qué fuerte". Incluso la gran mayoría de la gente ha visto la serie en versión original, que creo que es un puntazo porque las cosas en versión original siempre suman mucho más, y una parte ha empezado a tener mucho interés por el catalán y a estudiarlo. Es increíble. Ahora, el equipo somos amigos, somos familia y mucha gente sigue compartiendo piso. Al final esto es lo que nos une porque todo surgió de este proyecto. Evidentemente, luego hemos vivido muchísimas más experiencias pero 'Merlí' ha sido nuestra base. Todos recordamos este momento como una etapa de nuestras vidas muy buena, muy especial y esto será así siempre.
Albert Baró como Joan en 'Merlí'
¿Te gustó el final de tu personaje? ¿Has fantaseado con un spin-off?
El personaje de Joan terminaba con la muerte del padre y luego de Merlí. Acababa fatal, ya que se le iban dos personas muy importantes para él. Sí que se pudo ver el futuro del Joan, con el paso de tiempo de 7 años, que al final se hizo abogado como su padre. Muchas cosas por mucho que las luches e intentes cambiarlas no se pueden cambiar y se vuelve a lo que te han enseñado. No he pensado en un spin-off del personaje de Joan, el de Pol ya lo están grabando pero su personaje terminaba queriendo estudiar filosofía como Merlí y se entiende que haya un spin-off con una continuidad. Desconozco totalmente de qué va este spin-off porque no nos han hablado de qué es lo que se va a contar.
¿No te han propuesto participar?
No, no, nada. Ellos mismos dicen que no es una temporada más de 'Merlí', es otra serie incluso con algunos personajes de la serie como Pol Rubio y no sé si habrá algún otro que saldrá pero nada más. Es otra serie, otras tramas, otras localizaciones y otro tiempo seguramente porque ya es la universidad no el bachillerato.
¿Quieres comentarnos alguna cosa más?
Te cuento que he hecho la entrevista con un mate en la mano. ¿Lo has probado? Me dicen que me he "argentinizado" bastante desde que llegué y puede ser porque al final cuando uno está fuera de su país y su gente, es difícil encontrarse y empezar de nuevo. Yo llegué el 26 de diciembre y el 2 de enero ya empezaba a trabajar, no tuve ni una semana para adaptarme, fue llegar y empezar sin ningún día libre. Es difícil adaptarse lo más rápido posible a este ritmo, a esta ciudad, a la gente, y por eso mi subconsciente hizo que yo, como Albert, empezara a hacer cosas que hace la gente de aquí. Observar y empezar a vivir con esa forma de vida y una de esas cosas es el mate, que es sagrado y se lo llevan a todos lados.
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Si hay algo que no falta en un rodaje en España es el café, pues aquí de café no hay nada, aquí todo el mundo va con el mate en la mano, la hierba, y el agua caliente para hacer el mate. En 'Servir y proteger' había muchas botellas de agua por si tenias sed, pues aquí hay una sola maquina de agua y lo que hay mucho, que es lo que pone la producción, es paquetes y paquetes de hierba para hacer el mate. Voy a llegar a España y te juro que me voy a llevar mi mate y mi hierba y lo primero que voy a hacer es buscar un sitio donde me vendan la hierba.