El pasado 23 de febrero, Estrella Morente sembró la polémica en 'Operación Triunfo' al enunciar un alegato protaurino antes de interpretar "Volver", la canción que había preparado a dúo con Nia Correia, a la postre ganadora del talent. El discurso pareció ser la respuesta a unas declaraciones de Maialen dentro de la propia Academia, que calificaba de "nazis" y "psicópatas" a los toreros.
Estrella Morente, en la Gala 6 de 'OT 2020'
Tal fue el revuelvo que de las 2.000 quejas relacionadas con 'OT 2020' que recibió el Defensor de la Audiencia de RTVE, Ángel Nodal, 1.565 se refirieron a dicha actuación. Así lo atestigua el primer informe trimestral de 2020, al que ha tenido acceso la agencia Europa Press. De enero a marzo, la Oficina del Defensor recibió 3.631 quejas frente a las 1.252 del mismo plazo del año anterior, lo que supone un incremento de 2.379 protestas.
"Durante la actuación de Estrella Morente con Nia, la artista invitada ha hecho un alegato a favor de la tauromaquia contestando a las declaraciones que había hecho una concursante ajena a todo lo acontecido en el exterior, descolocando a su compañera de actuación y faltando al respeto a gran parte de la audiencia que considera que 'Operación Triunfo' no es lugar para hacer alegatos a favor de la tauromaquia", explicaba Roberto en su queja, en la que exigía explicaciones y disculpas a TVE, Gestmusic y al propio programa.
Libertad de expresión
Noemí Galera, directora de la Academia respondió que "TVE ni ha participado ni fue informada, en ningún momento, de lo que finalmente ocurrió", mientras que el Defensor de la Audiencia cree que lo ocurrido "supone una descortesía y una falta de respeto profesional a TVE". Asimismo, Nodal considera que se actuó "correctamente" al no cortar la interpretación, "como han pedido muchas de las personas" que le han trasladado su queja, "pues se habría convertido en un acto de censura injustificable".
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Cabe recordar que la cadena se disculpó en su día, antes incluso de la actuación de Morente, por el "tono de los comentarios" de Maialen, que consideraron "opiniones personales que no compartimos", dejando claro que la cadena estaba "obligada a defender la pluralidad y la libertad de expresión".