La semana pasada en 'Anatomía de Grey' una ventisca complicaba la situación en el Grey-Sloan Memorial Hospital. Los pacientes colapsaban urgencias, pero el mayor problema estaba en conseguir realizar un trasplante a una joven paciente a tiempo. DeLuca decidía arriesgar su vida para ir andando a recoger el órgano, consiguiendo su objetivo, pero regresando con las manos congeladas. Mientras tanto, Bailey optaba por ayudar a Joey ofreciéndole formar parte de su hogar, una propuesta que el chico aceptaba ilusionado. Por su parte, Richard recuperaba la motivación al toparse con una nueva residente con un gran potencial, hasta que descubría que había sido engañado y que en realidad era una paciente. Sin embargo, la gran bomba estallaba justo al final, cuando Teddy ataba cabos de forma errónea y besaba a Koracick creyendo que Owen y Amelia volvían a las andadas.
En el episodio dieciséis de la decimosexta temporada de 'Anatomía de Grey', titulado "Leave a Light On", y que en España podemos ver gracias a Fox Life, la ficción despide para siempre a Alex Karev, personaje encarnado desde los inicios de la serie por el actor Justin Chambers. A través de cartas enviadas a Meredith, Jo, Miranda y Richard, por fin conocemos los motivos que le han llevado a tomar la decisión de marcharse sin decir nada antes. Los recuerdos protagonizan un episodio construido a través de imágenes del pasado y reflexiones acerca de cuánto han evolucionado durante todo este tiempo.
La carta de Meredith
Meredith leyendo la carta de Alex en 'Anatomía de Grey'
Como ya nos temíamos, Alex se despide a distancia, es decir, por medio de varias cartas enviadas a Meredith, Jo, Miranda y Richard. Para que no nos hagamos ilusiones de que Karev pueda aparecer de un momento a otro, comienzan con la lectura de la primera carta, misiva abierta por Grey. De esta forma, desde el principio nos avisan de que esas letras van a ser la única presencia que tengamos de Alex. Las imágenes de Meredith leyendo la carta se mezclan con escenas del pasado en las que nos recuerdan cómo fueron esos primeros días de residentes, cuando Alex era apodado "engendro del demonio" por su carácter egocéntrico y engreído. Si has seguido la serie desde un principio ya sabes de sobra todo lo que han evolucionado y la amistad tan bonita que se ha forjado entre ambos, aunque resulta imposible no emocionarse al ver todo lo que han crecido y se han apoyado durante este tiempo.
Dejando de lado esas escenas con las que pretenden apelar a los sentimentalismos, lo más impactante de esta situación es la información que aporta Karev. Por fin nos han desvelado el motivo de su repentina ausencia, una justificación que no ha dejado indiferente a nadie. Así pues, Karev confiesa que está con Izzie, que contactó con ella como excusa para pedirle que le ayudara en el juicio de Meredith, pero en realidad solo quería volver a hablar con ella porque siempre ha estado enamorado y nunca se la ha podido quitar de la cabeza. Pero aquí no queda todo, para que mantengamos la boca abierta más todavía, nos desvelan que Izzie tiene gemelos y son hijos de Alex.
Lo cierto es que no nos hemos visto venir este giro en ningún momento. Izzie había quedado en el olvido y que aparezca de repente y que Alex se vaya con ella sin pensarlo resulta un tanto incomprensible e ilógico. No obstante, quizá lo que más nos molesta es que no le hayan dado la oportunidad de explicar todo esto a la cara y que le dejen como un cobarde que solo es capaz de relatarlo a través de varias cartas. Además, no nos queda otra que conformarnos viendo cómo son esos dos niños, pues los planos en los que aparecen Alex y Izzie están perfectamente pensados y planeados para que en ningún momento se les vea el rostro porque, obviamente, no son los actores reales.
La carta de Jo
Jo tras leer la carta de Karev en 'Anatomía de Grey'
Después de la carta de Meredith, en la que nos han soltado todas las bombas de golpe, la siguiente carta que teníamos ganas de descubrir es la de Jo. Ella es la que más explicaciones merece, pues después de superar tantos obstáculos y de declararse amor mutuo, no entendemos por qué la ha dejado abandonada de la noche a la mañana y sin ningún motivo. El propio Alex reconoce que está enamorado de Jo, pero también de Izzie. Por lo menos acepta que quiere a ambas, pues habría sido una decepción si hubiese afirmado que todo era una farsa. De hecho, Jo fue la mujer que le hizo creer de nuevo en el amor y que le ayudó a convertirse en mejor persona, así que nos negamos a pensar que hemos vivido en una mentira cuando han sido ejemplo de amor puro e incondicional que ha superado obstáculos muy complicados.
La clave del asunto y lo que aporta un poco de lucidez y sentido son los niños. Sus hijos son la única razón de peso por la que entendemos la decisión de Karev. Tanto él como Jo saben de sobra lo que es crecer sin una familia, por lo que Alex no quiere que sus hijos pasen por esa misma situación. Ese es el motivo que ha hecho que Karev abandone a su esposa y su vida en Seattle para marcharse a Kansas a vivir en una granja y a trabajar en cualquier hospital sin importar su rango y prestigio. Por mucho que le duela, Jo sabe que no puede hacerle cambiar de opinión porque Alex ya se ha perdido cinco años de las vidas de esos pequeños. Además, por fin ha encontrado el sitio en el que quiere y debe estar, así lo confirma y así muestran esas imágenes bucólicas en las que apreciamos a los pequeños correr, saltar y reír en un hogar perfecto.
La carta de Bailey
Miranda y Ben en 'Anatomía de Grey'
La relación entre Alex y Miranda no empezó con buen pie. Ambos se tenían odio mutuo, choque propiciado por el fuerte carácter de los dos. Sin embargo, poco a poco fueron resolviendo sus diferencias y Karev comprendió que Bailey solo quería sacar lo mejor de él para convertirlo en un gran cirujano. La presión que ejerció sobre él surtió efecto, aunque Alex ha tardado tiempo en aceptarlo y reconocerlo. Precisamente su carta consiste en eso, en darle las gracias por todo lo que ha hecho por él durante este tiempo. También fue pieza clave en la recuperación de Jo, pues Bailey colaboró para que la doctora hiciese frente a sus problemas y pudiese regresar después a su puesto en el hospital. No obstante, Karev ha sido alguien importante para ella, especialmente en los últimos tiempos, donde se ha ganado ser su confidente y amigo.
Todos esos recuerdos también nos muestran la evolución de Bailey, que ha pasado de ser una mujer muy estricta a la que apodaban "la nazi" a convertirse en su amiga. El tiempo ha permitido que formen una familia, una de las características que tanto nos gustan de la serie. Esa misiva de Karev le recuerda la suerte que ha tenido de poder dedicarse a lo que ha querido tras superar una infancia complicada y no quiere que Joey pase por lo mismo. Ella y Ben tienen que aprender a comunicarse antes de dejarse llevar por los impulsos, pero afortunadamente saben perdonarse y ahora tendrán un miembro más en su familia, un final feliz para el chico pues se ha asegurado un futuro mucho más fácil y lleno de amor.
Las despedidas no terminan aquí. Todavía nos quedaba una cuarta carta, la que ha recibido Richard Webber. Si nos paramos a pensar, él es el otro personaje que queda desde que dio comienzo la serie, por lo que esa misiva también tiene un significado especial. Asimismo, Richard ha sido el otro mentor de Karev, la otra persona que ha estado apoyándole profesionalmente para que consiguiera ser el mejor cirujano. No hemos podido leer las palabras que le ha escrito porque Webber ha arrojado la carta después de romperla. El enfado es evidente, una rabia que se entiende cuando confiesa que quería despedirse de él para asegurarse que no estaba cometiendo un grave error. Sin embargo, nadie mejor que Richard sabe lo que es perderse ver crecer a un hijo, por lo que en el fondo comprende a Alex por mucho que le duela.
Lo más leído