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El mundo de la actuación sigue preparando nuevos proyectos y Alexandra Jiménez es una de las actrices que ha reservado un hueco para concedernos una entrevista en FormulaTV. En uno de sus descansos durante el rodaje de 'Escándalo', nos cuenta cómo ha sido preparar uno de los personajes más complejos de su trayectoria profesional, tanto por sus tramas como por su personalidad arrolladora.
'Escándalo'
Es una mujer que ha tenido una vida muy difícil, tiene una personalidad muy frágil y que está rota completamente. Decide quitarse de en medio, quiere quitarse la vida y alguien la salva de esta situación. Este alguien es un niño de 15 años. Esa vuelta a la vida que ella tiene a través de él desencadena una historia de amor que se va distorsionando hasta que se transforma en una historia obsesiva y enfermiza.
Esta es la historia de alguien que no deja de suicidarse. Va dinamitando todo lo que le rodea sin ser consciente de eso
Comentaba Aurora Guerra, la creadora, que después de no quitarse la vida gracias a ese salvavidas, al final lo único que está consiguiendo es prolongarlo, hacer más lento el suicidio.
Sí. De hecho, es la historia de alguien que no deja de suicidarse. Va dinamitando todo lo que le rodea sin ser consciente de eso, a causa de un comportamiento que ella no sabe controlar. No sabe vivir de otra manera, no sabe amar de otra forma, ya que es lo que le han enseñado. Todos los miedos, todos los traumas y todo lo que ha configurado su personalidad no le permite saber hacer cosas de una manera sana.
¿Cómo ha sido meterte en la piel de una mujer así?
Es muy complicado. Creo que lo difícil y lo bonito del personaje es que es muy difícil defenderla, pero una vez consigues encontrar las razones que ella tiene, y entenderlas, de repente se te olvida el juicio. Como actriz, adentrarte en esa personalidad y defenderla a muerte es muy interesante porque son comportamientos muy fáciles de juzgar y muy difíciles de defender, aunque siempre puedes encontrar razones para hacerlo. Lo que confronta esta mujer al espectador es que todos tenemos razones para ser el resultado de lo que somos y para comportamos como nos comportamos. Ella es el resultado de cosas muy tremendas y cuando vas descubriendo qué es lo que ha configurado esa personalidad, la entiendes.
¿Es una víctima?
Es víctima y es verdugo. Más allá de la historia de amor con un menor de edad, es víctima y es verdugo por muchas más razones que vas viendo a base de ir descubriendo la historia.
Es verdad que tienes que defender un conflicto tremendo, una personalidad muy complicada, situaciones poco agradables
Nos han presentado la serie y al preguntar por los actores, nos han contado que tenían claro que para Inés querían a una mujer que fuese muy valiente. ¿Cómo te ves tú en este papel?
Es verdad que tienes que defender un conflicto tremendo, una personalidad muy complicada, situaciones poco agradables... Es meterte en un jardín importante, pero eso es mi trabajo. Como actriz, cuanto más compleja sea la personalidad que tienes que llegar a entender, más apasionante se vuelve tu trabajo, más difícil y más aprendes. Va todo a favor.
Alexandra Jiménez, en 'Escándalo'
Este personaje no te da ningún respiro en esos ocho capítulos.
Sí. Tienes que dar el do de pecho todos los días en este rodaje, no hay un respiro. Es verdad que a nivel actoral no hay un día que puedas bajar la guardia.
Cuanto mayor es la tragedia que estás contando, más necesitas reírte
Cuando dicen "corten", ¿te llevas el personaje a casa? ¿Le das muchas vueltas?
Le doy vueltas como actriz, técnicamente, de si esta toma no me ha gustado y a lo mejor es la que montan porque era la que estaba en foco. Eso sí me lo llevo, pero emocionalmente no. Además, hay un mecanismo de defensa que creo que es algo instintivo. Cuanto mayor es la tragedia que estás contando, más necesitas reírte. Incluso en el set, tienes que aflojar y recordarte que es un juego muy extremo, pero un juego. Uno tiene una casa, una vida y tienes que cuidarte y cuidar a los que le rodean. No puedes estar como una loca neurótica, ya que no sería sostenible en el tiempo.
¿Qué tal está siendo el trabajo con Fernando Líndez?
Estupendo, estamos disfrutando mucho y nos estamos apoyando mucho. Es un disfrute, yo lo digo siempre, como compañero es de los mejores que he tenido.
¿Te ves reflejada en algo de él de cuando empezaste?
Le veo que está abierto a escuchar siempre y aprende muy rápido, es muy inteligente, muy sensible y respetuoso con el trabajo de los demás. Recuerdo que cuando yo empezaba y teníamos una edad parecida, todo viene bien en el set de rodaje. Incluso los pequeños accidentes, todo te viene bien. Yo procuro no olvidarme de eso, pero es verdad que cuando estás empezando tu actitud es esa. Luego te vas estropeando, pero es bonito verlo porque recuerdas que es la mejor energía para ir a trabajar, estar a favor de cualquier cosa que suceda cualquier día. Por eso es tan buen compañero.
¿Cómo ha sido para ti grabar esas escenas íntimas con él?
Muy cómodo, mucho más cómodo de lo que yo pensaba. Tuvimos la oportunidad de estar tres semanas antes con ensayos, con una coach que nos ayudó muchísimo. Conseguimos generar un nivel de confianza y tranquilidad que nos ha venido de maravilla para llegar a rodar y estar confiados y seguros.
¿Es la coordinada de intimidad que ahora suele haber en las series?
Es una coach, que es una actriz y coach maravillosa, se llama Laura Toledo.
'Escándalo'
Que os establece como coreografías, ¿no?
Más que desde la coreografía, hemos encontrado desde improvisaciones, desde ejercicios de verdad, de dónde vienen los personajes y qué necesitan. Como son situaciones tan extremas, más que una coreografía mecánica, lo que hemos encontrado ha sido un trabajo que tiene que ver con las emociones y el conflicto de los dos personajes. Han salido cosas muy bonitas.
¿La coach continúa o ha sido solamente para los ensayos?
Fue durante los ensayos, pero aquí tenemos una directora que es una maravilla, Ana Vázquez. También da unas directrices que te ayudan muchísimo, entonces nos sentimos muy arropados y protegidos.
Si no estáis grabando por orden, debe ser complicado para vosotros...
Claro, ese es el trabajo previo que te toca hacer de esquemas. Yo trato de tener en mente toda la serie, tengo esquemas y todos mis apuntes para siempre saber de dónde vengo, a dónde voy, si lo he rodado, si no... Es un puzzle muy complicado, un poco agotador, pero es entretenido y es lo que tienes que hacer. Vas poniendo ficha a ficha, pero en tu cabeza tiene que estar el cuadro total.
No es un juicio a lo largo de ocho capítulos de la mirada externa hacia ella
A nivel social, se juzga más a una mujer con un jovencito que a un hombre con una jovencita. ¿Eso se refleja en la serie?
No, porque no estamos contando exactamente eso. No es un juicio a lo largo de ocho capítulos de la mirada externa hacia ella porque la historia no se hace pública durante mucho rato. El conflicto va por otro lugar diferente. En cualquier caso, socialmente se juzga más el hecho de que sea una mujer. Esto sucede en un conflicto como este y en otros tantos que son de otro calibre. Es verdad que siempre salimos perdiendo.
Eres una actriz joven, pero estás en plena transición con papeles como este. ¿Cómo lo vives? ¿Crees que empieza a haber más papeles para las actrices que no tienen 20 años?
Yo creo que cada vez hay más y cuando los ves descubres que son los más interesantes. Al final con forme vamos haciéndonos mayores hemos vivido más cosas, tienes más material para contar, tanto el que escribe, como el que interpreta, el que dirige... Eso te hace más interesante. Creo que nos estamos dando cuenta de que las historias de mujeres funcionan como un tiro y creo que va a ir a más.
¿Por qué se está viviendo esa especie de cambio de tendencia? Ha tardado en llegar pero por fin ha llegado...
Porque lo necesitamos, se echa en falta. De pronto hay un reflejo que faltaba, historias de mujeres que cuentan mucho más allá que el mero hecho de ser acompañantes de historias de otros. De repente el foco está en otro lugar y es un foco que te devuelve un reflejo de lo que todas vivimos. Reconocerte en eso apetece.