Georgia se convirtió el 7 de mayo de 2019 en el cuarto estado de los Estados Unidos en aprobar una ley que restringe el aborto durante ese mismo año. En este caso se trata de la conocida como "ley del latido", por la cual se prohíbe el aborto por encima del momento en el que el corazón del feto comienza a latir, esto es, a las seis semanas de embarazo. La medida ha suscitado toda clase de reacciones opuestas por parte de sectores feministas y, entre ellas, la de Alyssa Milano ha sido de las más controvertidas.
Alyssa Milano
Eso sí, en un tuit posterior ha explicado que esto no significa que esté incitando a las mujeres a no tener sexo: "Nos puede encantar el sexo y luchar por la autonomía de nuestros cuerpos. Hay muchas alternativas a los hombre cis". Así, su medida de protesta se limita únicamente a las parejas heterosexuales masculinas, ya que, según la actriz "es demasiado arriesgado tener sexo con hombres hoy en día", por lo que quedarían fuera de esta abstinencia las prácticas que incluyan a personas fuera de este colectivo y la masturbación.
Polémica en todas partes
Pese a todas sus aclaraciones, la protesta ha suscitado burlas y reacciones negativas tanto de conservadores como de progresistas. Los sectores cercanos al republicanismo no entienden que se esté perdiendo ningún derecho por el que se deba luchar y han considerado la forma de hacerlo frecuentemente ridícula por afectar a las parejas de quienes protestan y no de quienes imponen la ley. Por otro lado, también ha habido críticas desde el feminismo, ya que se ha acusado a esta huelga de asumir el sexo como algo que la mujer entrega al hombre en lugar de una práctica que ambas partes escogen libremente.
Por supuesto, también ha habido quien ha apoyado a la actriz, pero la enorme cantidad de reacciones ha provocado que prometa explicar detenidamente su forma de reivindicación en un artículo. Por lo pronto, ha adelantado que opina que con la huelga sexual se consigue concienciar a los hombres precisamente sobre que las mujeres son quienes tienen el control de sus propios cuerpos.