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Adiós al universo 'Merlí'. Tras tres temporadas de la serie en TV3 más otras dos en Movistar+ con el spin-off de Pol Rubio llamado 'Merlí: Sapere Aude', toca despedirnos. Esta última temporada ha estado marcada por el VIH del protagonista, por su relación con Axel y por el deseo de celebrar el banquete de Platón hablando del amor en el paraninfo de la universidad. Tras ocho capítulos, ya se ha emitido este desenlace y vamos a repasar cómo han acabado las distintas tramas que no han satisfecho demasiado a los espectadores. De hecho, ya dio ciertas pistas Carlos Cuevas en la promoción de la temporada, cuando dijo: "No miraré lo que se diga del final".
Pol y Oti, en el debate de 'Merlí: Sapere Aude'
¿En una sociedad tan narcisista e individualista como la nuestra, somos capaces de amar? Esta cuestión se plantea en el debate, y la primera que responde es María con un rotundo "no". Con su explicación, disfrutamos de la última clase de la Bolaño, con la participación de todos los alumnos. Además, nos encontramos con una declaración de amor durante este banquete: Arnau le pide otra oportunidad a Oti. Posteriormente les vemos en una escena íntima que demuestra que Oti ha aceptado, aunque dice: "Pero no volveremos a ser novios, eh". Sin embargo, parece que esta relación va para largo... Y no es la única escena de amor que viene después, pues Pol está tan agradecido que va en busca de Axel y al llegar a su casa, este se asoma al balcón, encontrándose a Pol diciéndole lo que le quiere en una preciosa escena a lo Romeo y Julieta.
La declaración de amor de Pol a su padre
La relación entre Alfonso y Pol no ha sido nada fácil durante las cinco temporadas. Al principio no se soportaban, pues el primero era un cascarrabias y el segundo un rebelde. Sin embargo, con el paso de las temporadas, se han ido dando cuenta de lo que se quieren y de lo que se necesitan. También es cierto que encontrar el amor ha ayudado a Alfonso a ser más simpático y a que la relación con su hijo sea más estrecha.
Gloria y Alfonso, en 'Merlí: Sapere Aude'
Cuando Alfonso descubre que Pol tiene VIH, se viene abajo, pero poco a poco va informándose y entendiendo lo que supone, aceptando lo que ocurre. Sin embargo, la comunicación sigue siendo escasa entre ellos. Tras la graduación, en una celebración en el Bar Satanassa a la que todos acuden, Pol hace un emotivo discurso dirigido a su padre que se convierte en una declaración de amor. "La vida no le ha tratado bien, pero él sigue contando chistes" dice antes de especificar que va para su padre: "Papá, que mi premio eres tú". Además, le hace saber que se encuentra bien, que siempre va a estar ahí para él y que quiere que sigan viviendo juntos. Por fin vemos a un Pol que se ha aceptado y está tranquilo y feliz.
Flashforward: Llega la graduación... ¿sigue con Axel?
Al igual que ocurrió con 'Merlí', esta serie también acaba con un salto temporal, pero en lugar de ser de 7 años, este es solo de tres. Si en 'Sapere Aude' estábamos viendo cómo es el primer curso de Filosofía, el nos transporta al cierre de este ciclo, con la graduación. Se trata de una escena que puede dejar frío al público, pues era la ocasión perfecta para reencuentros, regresos y sorpresas, pero por parte de Pol, en ese acto solo está su padre y Gloria. También están Oti y Biel, quienes también se han graduado, pero no hay ni rastro de Rai, que descubrió que la filosofía no era lo suyo.
Pero ni está la Bolaño (que está de viaje con Dino), ni el hermano de Pol que parece que nunca ha existido, ni hay nadie de sus antiguos compañeros del instituto Àngel Guimerà... ni Axel. ¿Dónde está? En esta escena se explica que siguen juntos, pero que la relación no pasa por un buen momento y además le ha pillado fuera. ¿Significa que el final de la relación está cerca? Puede ser. Ya no se sabrá. Pero lo que está claro es que tres o cuatro años después llegaría en la línea temporal el epílogo de 'Merlí', en el que Pol y Bruno sí que acaban juntos. Y llega la última escena de la serie, la final. Pol está pintando casas y no trabajando como profesor de Filosofía, pues está esperando a conseguir una plaza. Eso sí. Pol está tranquilo, ha aprendido a tener paciencia y, pese a no estar ejerciendo ya como profesor como lo fue Merlí, ha encontrado la felicidad.
¿Y Bruno? ¿Reaparece?
Desde que se confirmó que David Solans no estaría en la segunda temporada de 'Sapere Aude', los fans nos hemos preguntado cómo se trataría esta ausencia durante los capítulos. Tristemente para los seguidores de Brunol, este personaje no es solo que no aparezca, sino que ni se le menciona a lo largo de la temporada. Está claro que si el actor es el que decidió irse, era muy difícil conseguir que apareciera en alguna escena, pero entonces habría estado genial alguna llamada, alguna foto, alguna mención... algo. Algo que mostrara a los espectadores que ese personaje estaba ahí e incluso se le podría haber dado un cierre redondo encaminado a lo que sabemos que está por llegar.
El final de María: con Dino e hija independizada
María Bolaño, en el debate de 'Merlí: Sapere Aude'
María y Pol tienen una bonita despedida al finalizar el curso. Ambos han sido muy importantes para el otro, pero todo se acaba y ella le hace ver que los profesores no se quedan para siempre, que son etapas que se acaban y que es cuando se le deja al alumno volar. Y con esta charla se despide esta relación. Pero además de esta relación con su alumno, María ha estado involucrada en otras dos tramas: con Dino y con su hija.
Desde que Dino y María se conocieron, entre ambos surgió una química muy especial derivando a una amistad duradera. Ambos merecen juntos un spin-off que cuenten todas sus aventuras, porque serían divertidísimas. Además, son dos de los personajes más interesantes de la serie y es una pena perderlos. Por otro lado, María ha estado ayudando a su hija y a su novio en la búsqueda de piso para alquilar, y aunque parecía que a ella no le estaba gustando ninguno de los que visitaban, finalmente reconoce que tiene un gran miedo a la soledad y cierta envidia de su hija por haber encontrado el amor.
