No solo ha batido el récord absoluto de permanencia, sino que Fran Gónzález se ha llevado este martes 22 de enero el tercer bote más alto de la historia de 'Pasapalabra': nada más y nada menos que 1.542.000 eurazos. El momento sin duda fue totalmente histórico, logrando que además la entrega del concurso fuese la más vista de la historia del programa.
Fran se lleva el bote en 'Pasapalabra'
Tan solo una letra, la R de rico, separaba a Fran del bote. Así, llegaba junto a Christian Gálvez a la última letra del rosco, y este le preguntaba: "Apellido del ingeniero francés que, junto a Arthur C. Krebs, construyó el dirigible militar 'La France' en 1884". A punto estuvo de llevarse el bote en otras 15 ocasiones, pero en esta, se lo embolsó tras pronunciar la codiciada palabra: "Renard". Christian anunciaba que la palabra era correcta, Fran rompía a llorar y ambos se fundían en un sentido abrazo.
Tras conseguir el bote, Fran daba la clave para lograr tus metas en la vida: "En la vida hay que tener perseverancia y tesón, hay que creer en uno mismo.", dijo con plena confianza en sus palabras. "Siempre he dicho que hay que tener salud, que es el pilar de la vida, y a partir de ahí podemos cumplir nuestros sueños y ser felices". En ese momento, el biólogo asturiano recordaba la importancia de su familia y a su tía, fallecida recientemente, y añadía: "Se lo quiero dedicar a ella también".
Fran escancia sidra tras ganar el bote en 'Pasapalabra'
Momentos después, el presentador le daba la oportunidad de hablar por teléfono con su madre en directo para darle la noticia. Fran llamaba a Mari Luz para ponerla al corriente: "Ha pasado una cosa, mamá", a lo que su madre respondía preocupada: "¿Te has puesto malo?". El concursante exclamaba emocionado: "Malo estoy ahora..., pero porque he ganado el bote (...) que sí, 1.542.000 eurazos". Su progenitora tardó en creérselo, pero segundos más tarde confesó que "se lo merece" ya que "Es un cielo de crío, no es porque sea mi hijo".
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El destino del premio
Fran ya tenía bien atado qué va a hacer con el bote. El asturiano donará una parte a asociaciones benéficas y otra a su empresa familiar de luces LED. También ha decidido que con parte del dinero costeará los estudios de sus sobrinos y también levantará un laboratorio. Por último, todo un clásico, pretende viajar: "Y para viajar también. Tengo predilección por Japón, y aprovecharía para conocer grandes capitales europeas.", apuntaba el concursante. Para celebrar todo esto, ya que no podía raparse, Fran escanció una botella de sidra que ya le tenía reservada Christian.