Boris Izaguirre vuelve a asumir las funciones de presentador de 'Prodigios' en su tercera edición, que se estrena el 13 de marzo a las 22h en La 1. El formato producido por Shine Iberia se ha enfrentado a acusaciones de brotes de coronavirus durante sus grabaciones, las cuales han sido más complicadas que nunca debido precisamente a la pandemia. La productora negó todo, pero el conductor del formato nos responde a cómo lo vivió él, además de analizar la situación de la cultura y de las disciplinas clásicas.
Boris Izaguirre y Paula Prendes, presentadores de 'Prodigios'
Las grabaciones de 'Prodigios' han tenido que ser complicadas a causa del coronavirus. ¿Cómo lo has vivido tú?
Lo he vivido como un auténtico reto. Para mí era muy importante que yo asumiera una actitud de líder, en el sentido de que no me sintiera en ningún momento agobiado, siempre estuviera a disposición de que siguiéramos adelante y de que lleváramos adelante el programa y transmitir esa absoluta seguridad a Paula Prendes, mi copresentadora, y a los miembros del jurado y a sus asesores, que es una figura que hemos incorporado para esta tercera edición, que cada uno de los jurados tiene un asesor en su disciplina. Eso ha hecho que la familia se ampliara y no quería que sintieran en ningún momento ningún tipo de mayor tensión o inseguridad.
Para mí fue importante, fue una decisión que tuve así solo en el camerino, que dije: "Aquí yo voy a tener un poquito más de esa responsabilidad". Hacerme consciente de ella y llevarla adelante me satisfizo mucho. Todo esto es un gran reto para nosotros y es un poco como he hecho en casa, que somos solo dos personas y tenemos más espacio que otras personas, pero desde marzo del año pasado hemos ido organizando que no decayera en nosotros nunca el ánimo, que no nos impacientáramos, que no nos pusiéramos ansiosos, tensos. Me pareció que era necesario que yo repitiera esas mismas fórmulas delante del equipo del programa, durante la grabación.
Shine Iberia ha negado todas las informaciones sobre los brotes durante las grabaciones. ¿Cómo recibiste estas noticias mientras estabais haciendo el programa?
Me pareció realmente molesto que dijeran que Nacho Duato y yo nos habíamos contagiado cuando eso no es verdad. Me pareció que incluir una falsedad en una información que tiene que ser veraz, porque el momento que vivimos es asombrosamente veraz y dramático, fue desagradable y feo.
¿Cómo va a ser el trabajo de los asesores con el jurado?
Nuestro jurado es muy protagonista. Los protagonistas absolutos del programa son los aspirantes, pero el jurado, si somos cuatro patas, tiene dos de las patas de la historia. Dejar de ver lo que dice Nacho, para escuchar lo que va a decir su asesor, a mí me producía muchísima inquietud, pero fíjate: ha funcionado perfectamente. Al igual que le pasa a los prodigios, que les encanta verse en el programa, lo mismo ha pasado con estos profesionales de la música, la lírica y la danza, les ha encantado verse en el programa porque lo han descubierto.
No te olvides de que, al principio del programa, la mayor cantidad de dudas y quejas las hacían los propios profesionales de las disciplinas artísticas que nosotros promocionamos dentro del espacio, ya que consideraban que estábamos haciendo más televisión que favorecer la divulgación de estas disciplinas. Una vez visto el programa en sus dos ediciones, se han dado cuenta de que, efectivamente, el programa es un apoyo a la cultura y a estas disciplinas específicas en España. Ha sido buenísima la presencia de estos asesores, ya que ratifica el apoyo.
¿Qué nos puedes contar de los asesores?
Hemos descubierto a personas fascinantes como Lucas Vidal, que es un compositor premiadísimo que tiene un Goya por la canción que hizo junto a Pablo Alborán para "Palmeras en la nieve". También compuso muchísimas partituras y bandas sonoras y ha estado nominado al Oscar. Es asombrosamente joven, realmente es otro prodigio. Rubén Simeó es un trompetista extraordinario, celebradísimo, con una vida musical en el extranjero muy exitosa. De repente los vemos y decimos: "Claro, hay todo un universo de personas en estas profesiones que no las conocemos porque no estamos acostumbrados a su presencia". Ahí los vamos a descubrir y disfrutar. Nancy Fabiola Herrera, que es una soprano fantástica con una personalidad como la de Ainhoa Arteta y que ellas dos juntas estén trabajando mano a mano sin ningún tipo de rivalidades que uno asumiría entre divas del canto, es otra maravilla. El director del Ballet Nacional de España que también esté aquí y cómo se relaciona con Nacho. Creo que ha sido genial y le ha aportado más emoción.
Equipo de 'Prodigios'
Esta edición es la edición de la emoción. La primera edición fue de vamos a levantar el telón y a ver cómo va. La segunda temporada fue de ha sido increíble y vamos a hacerlo todavía mejor y la tercera es de vamos a emocionarnos y ser como somos, unas personas supersensibles que todo nos fascina y que queremos dar un mensaje de que sí, estamos pasando un momento terrible, pero lo vamos a pasar y vamos a ser mejores. Yo confío en esto desde el primer día de la pandemia. Es cierto que han pasado cosas que te hacen dudar de este primer criterio, pero yo lo sigo teniendo. Sí que nos va a hacer mejores.
En una promo se vio a José Manuel Zapata y Lucas Vidal sentados en los asientos de Ainhoa Arteta y Andrés Salado. ¿Los van a sustituir en alguna gala?
No. El programa ha ganado sensibilidad, era inevitable. Estos asesores son estrellas en sus propios sitios. Todo el mundo se involucra mucho con este programa porque la disciplina y la madurez de los aspirantes nos asombra, entonces vas a ver cómo ellos de repente están ahí defendiendo su argumento y tomando mucho protagonismo.
Lo prohibí. Dije: "Mira, nosotros lo que tenemos que pensar es que no necesitamos al público, nosotros somos el público". Somos el público para el espectador que está en su casa esperando que llegue 'Prodigios' a su casa para, durante unas cuantas horas, dejar de pensar en el Covid, en las vacunas, en la pandemia, en el confinamiento, en las restricciones... Los programas que existieron antes de la pandemia yo creo que tienen esa responsabilidad. Nosotros seguimos la vida como era antes y la estamos defendiendo. Me di cuenta de que algunos de mis compañeros se venían un poquito abajo e inmediatamente dije: "No, no. No pienses que tú estás solo, tú eres la compañía del espectador y eso es lo que te tiene que hacer a ti crecer ahora en esta situación". Todo el mundo se quedó sorprendido porque yo me di cuenta en el acto. Luego tuve una opinión un poco más personal porque dije: "Claro, ahora el programa va a ser más televisión que nunca porque en realidad ahora sí es cierto que estamos en un plató". He crecido profesionalmente muchísimo con 'Prodigios', pero en esta tercera edición vigilé un poco más mi dicción, que tuviera el punto nuevo más próximo, menos como alguien que lleva años en la televisión y que estás acostumbrado a ver, pero que ahora ves que te está intentando hablar lo más cerca posible porque creo que es muy importante esa proximidad en esta situación. Al terminar, todo el mundo me felicitó muchísimo y en la felicitación estaba implícito ese "nos has dado una manera de entender esta situación". Y yo dije que esa era mi responsabilidad y sentí que había crecido años al darme cuenta de eso.
El mensaje de las dos primeras ediciones era la importancia de las disciplinas clásicas en la cultura, que siempre han estado en un segundo plano. Con esta tercera, nos encontramos con un mensaje de que la cultura es segura. Parece que siempre la cultura lo tiene muy complicado para avanzar.
Andrés Salado, Ainhoa Arteta y Nacho Duato, jurado de 'Prodigios'
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Creo que el programa también deja pasar ese mensaje que funciona, pero que nosotros no pretendemos nunca que no sea un programa de televisión. Por eso yo lo presento porque yo soy muy televisión y para mucha gente en este país soy como el emblema de una manera determinada de hacer televisión, pero también soy una persona con una vida muy unida a la cultura por mis padres. Pero la mezcla de ambas cosas está regida porque es absoluto que es un programa de televisión y que la televisión es entretenimiento y el entretenimiento nunca puede ser aburrido ni creerse trascendente. Por eso en estos días fue tan importante ver esto tan claramente. Necesitamos un poquito de entretenimiento para equilibrar la enorme tensión y el desastre emocional que estamos viviendo y una vez ahí viene 'Prodigios' en nuestra ayuda porque 'Prodigios' es un programa de entretenimiento. De sano entretenimiento, sí; de cultura, también; pero yo lo dejaría en únicamente entretenimiento porque lo cumple, no estás viendo un programa que va con unos aires de que va de otra cosa.