©Mediaset EspañaPrograma relacionado
Lydia Lozano, en imágenes 49 fotos
Carmen Alcayde ha mantenido durante años una amistad con Lydia Lozano y Charly, su marido. La buena relación quedó atrás cuando la que fuera presentadora de 'Aquí hay tomate' decidió destapar una información sobre la colaboradora y su pareja, en la que afirmaba que ambos acudían a locales de intercambio de parejas. Así lo relató en 'Sálvame' respaldada por el testimonio de un testigo anónimo que acudió al programa dar el nombre de Lydia Lozano. Desde entonces, las tertulianas han sufrido una auténtica crisis en su relación, y es que las dos han salido llorando del plató y han pensado en no volver a su puesto de trabajo.
Lejos de calmarse las aguas, el pasado viernes 3 de marzo, el programa de corazón arrancaba con imágenes de Carmen Alcayde fuera de la instalaciones de Mediaset, hablando con una persona de La Fábrica de la Tele a la que le pedía no coincidir con Lydia Lozano en el plató. Les exigía una nueva cláusula en su contrato con la que se cumpliera su voluntad de no verse. Finalmente, la dirección del programa ha optado por aceptarlo: "La solución es salomónica, la vamos a respetar y cuando entre una saldrá la otra". Con esta decisión, cada quince minutos tendrían de cambiar de puesto para no encontrarse.
Carmen Alcayde, Lydia Lozano y María Patiño en 'Sálvame'
"La que monta el pollo es la que pide no estar conmigo, yo no me subí al pulpillo a hablar de su vida y de su marido. ¡Y me tengo que comer esto!", replicaba Lydia Lozano. Conforme avanzó el programa, probaron otra solución para que ambas estuvieran en la tertulia, que fue separarlas por un biombo. "Esto es ridículo [...], si Carmen no quiere trabajar conmigo quedan otros cuatro días de la semana, que elija uno y yo no vengo", sentenciaba la colaboradora entre gritos.
Carmen Alcayde se queda sin apoyos
Carmen Alcayde sostenía que su intención no era vetar a Lydia Lozano, sino a ella misma. Explicaba que no podía llevarse mal con su compañera y que era una situación difícil, por lo que no quería que coincidieran. Aún así, la presentadora ha lanzado una pulla al resto de sus compañeros: "Nadie ha dicho nada a mi favor de todo lo que me dijo y me gritó". Finalmente, han podido retirar el biombo que las separaba.
