'First Dates' ha conseguido que muchas personas encuentren a su media naranja. Sin embargo, el Cupido del programa no siempre tiene buena puntería. El pasado lunes Carlos Sobera recibió a Mari Carmen, camarera malagueña, y Rafael, vigilante gaditano. Ambos llegaron en busca del amor, pero acabaron compartiendo una velada en la que estuvieron a punto de matar al propio Cupido.
Mari Carmen y Rafael, en su cita de 'First Dates'
Rafael llegó muy confiado al programa. Se definía a sí mismo como un triunfador en el mundo laboral por el éxito de su empresa de coches de lujo. Sin embargo, en el amor no había ganado tantas batallas: "Hay mucha pendeja por ahí", afirmó con poco gusto el vigilante. Esta fachada de triunfador no convenció a Mari Carmen: "Prefiero un coche no tan de lujo y una persona más humilde por dentro".
La malagueña no dudó en expresar abiertamente su opinión: "Yo contigo estaría media hora, la de la comida. Y para de contar", le dijo ella tajante. El vigilante intentó defenderse asegurando que era una buena persona, pero esto no ayudó a reducir la tensión, que podía cortarse con un cuchillo: "Me miraba de una forma que parecía que quería levantarse y romperme una silla en la cabeza, me daba miedo", confesó Rafael.
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Entonces llegó el momento decisivo: ¿tendría esta pareja una segunda cita tras tantos roces y rascas? La respuesta es previsible: "Me has parecido siesa, esperaba que me pegases y todo", reconoció él. Mari Carmen no se quedó atrás y se sinceró con el vigilante: "Prefiero quedarme soltera a encontrar a un hombre como tú. Yo tampoco creo que encuentres a una mujer que te aguante mucho. Siendo como tú eres te vas a quedar solito", sentenció.