El éxito de Claire Foy es indiscutible. Tras haber encarnado a la reina Isabel II en la exitosa 'The Crown' durante dos temporadas, el papel le deja un Globo de Oro en 2017 y un reciente Emmy ganado en la edición de 2018. Cualquiera podría pensar que a estas alturas se sentiría reconocida y feliz, pero parece ser que no está exenta de ciertos pensamientos intrusivos que le generan un problema de ansiedad.
Claire Foy como Isabel II bajo el peso de su corona en 'The Crown'
Con la presión acumulada de todos esos problemas vinieron los primeros ataques, aunque advierte de que no tiene por qué tener un desencadenante lógico. "Cuando tienes ansiedad te puede dar ansiedad, qué sé yo, cruzar la calle", explica Foy, que, no obstante, declara que su ansiedad se genera sobre todo por lo que describe como "un montón de pensamientos sobre la mierda que soy".
De la explosión a la contención
Unos pensamientos que no cesaron cuando obtuvo fama y reconocimiento en su carrera de actriz, tal y como ella misma declaraba: "Se magnificó sin duda cuando empecé a hacer esto. Explotó. Sí". Por todo ello, la actriz ha confesado que pensaba que tener ansiedad era su "destino", aunque aclara que ahora lo lleva mejor. Hasta reconoce que le fue de alguna utilidad: "Fue una herramienta para sobrevivir, definitivamente. Para parar de intentar poder con todo. Para sentirme segura".
Habiendo aprendido a convivir con su ansiedad, Foy puede disfrutar de su carrera, que le lleva recientemente en el cine con el estreno de "First Man", que coprotagoniza, o la próxima adaptación de la saga literaria "Millennium". Mientras, la tercera temporada de 'The Crown' llegará en 2019 sin ella como reina, ya que Olivia Colman interpretará a una nueva monarca para reflejar el paso del tiempo desde las anteriores.