Crítica de 'El Marqués': Una atractiva historia que hace partícipe al público empañada por un filtro anticuado

Después de encargarse de la segunda y tercera temporadas de 'Desaparecidos', Unicorn Content continúa su camino en la ficción televisiva con 'El Marqués', una serie en la que ficcionan el crimen de Los Galindos que impactó a la sociedad española y que acabó cerrándose sin encontrar culpables. Después de una larga campaña de promoción en Mediaset, Telecinco estrena este proyecto compuesto por seis episodios el miércoles 22 de mayo.

De entrada el tema es llamativo y puede conseguir atraer la atención de un amplio segmento del público. Por un lado, aquellas personas que siguieron el caso en su momento y que teorizaron sobre quién o quiénes fueron los asesinos. Por otro, los que desconocen qué pasó en ese pueblo de Sevilla y que podrán seguir este relato, aunque ficcionado. La etiqueta de inspirado en hechos reales siempre es una buena baza para, en un primer momento, abrir la puerta a más espectadores.

Una de las características principales de 'El Marqués' es su relato en dos líneas temporales. Por un lado, los hechos ocurridos en 1975, cinco meses antes del asesinato de cinco personas donde se van mostrando cómo eran las relaciones de ese pueblo, tanto de la clase obrera como de los terratenientes. Por otro, dos años más tarde, en 1977, cuando Onofre (José Pastor), un joven periodista, regresa a su pueblo para descubrir quién se esconde detrás de esos crímenes que dejaron profundamente tocados a todos los habitantes. Todo esto sirviendo de radiografía a una España andaluza donde el Franquismo agonizaba y se gestaba el cambio social a la Transición y la democracia.

Saltos temporales empañados con los filtros

Los saltos temporales son un recurso que le sienta muy bien a 'El Marqués', ya que permite que el espectador, quien se identificará con Onofre, vaya descubriendo elementos del pasado para conformarse sus propias teorías. El espectador pasa a formar parte de la investigación, y ese es uno de los juegos a favor con los que cuenta el proyecto. Si ya de por sí atrae teorías conspiranoicas un caso que nunca se ha resuelto, a lo largo del relato ficcionado de 'El Marqués', se va buceando en las razones que pudo tener según qué personaje para cometer los crímenes.

No obstante, la serie no ha inventado nada nuevo, y es que saltos temporales se llevan viendo desde hace décadas. Es por ello que rezuma a antiguo cuando nos encontramos con recursos visuales como el empleo del filtro amarillo para marcar el pasado y el filtro azul para subrayar el presente. El espectador tiene ya la inteligencia suficiente como para saber en qué momento se está contando según qué, y esto, o el uso de cortinillas, acaba generando rechazo en un espectador más habituado a ver series.

Y esto es una pena, pues estos añadidos de posproducción le quitan la magia a unos escenarios brillantes. El equipo de 'El Marqués' se ha ido a Sevilla para grabar en localizaciones naturales la ficción, lo que enriquece la imagen. Además, en este sentido, cabe señalar que da gusto ver una serie que habla sobre Andalucía y donde no solo se ha rodado en Andalucía, sino que la inmensa mayoría de sus intérpretes son andaluces. Habrá muchos de ellos cuyo acento andaluz era desconocido por el público, como es el caso de Juan Fernández, quien llevaba décadas sin poder sacar su origen. Por ello, en esta parte, se ha cuidado al detalle el casting para darle verdad al producto.

Andaluces hablando en andaluz

Ya que mencionamos al casting, es el turno de hablar del trabajo del equipo artístico. En líneas generales, las interpretaciones de todo el reparto son notables y forman un conjunto armonioso en donde todos los personajes están perfectamente equilibrados. La primera fila la defienden con mucha solvencia José Pastor y Víctor Clavijo, quienes han integrado a la perfección a estos personajes de la Andalucía de la Transición, tan dispares, pero a la vez tan atrayentes. Ellos son los encargados de dar vida a Onofre y al marqués, respectivamente, y por lo que se atisba en el primer episodio, mantendrán un tenso enfrentamiento por las indagaciones del joven periodista.

En este primer episodio que hemos podido visionar, se establecen puntos muy interesantes por los que circularán las tramas, como el tratamiento de según qué terrateniente hacia sus trabajadores, los abusos que se producen, las propias guerras internas en las familias e incluso cómo el crimen provocó la desunión del pueblo. Como bien dicen en la serie, si el pueblo no está unido, los poderosos salen ganando, por lo que resulta una radiografía interesante de investigar cómo un hecho tan traumático como este puede afectar de diferente forma a la población.

Sin embargo, sí que hay una trama relacionada con Chelo, el personaje al que da vida Cinta Ramírez, que se va apreciando a los pocos minutos de la serie y que vuelve a poner sobre la mesa el debate de la entidad que se les da a las mujeres en muchas ficciones. Lo que le ocurre es lo que la marca en la ficción y parece que, más allá de eso, el personaje no tiene otra razón de ser. Habrá que ver cómo evoluciona para descubrir si han caído en un manido error o si han conseguido revertir la situación a partir del desenlace de ese primer capítulo.

En definitiva, 'El Marqués' es una serie que sorprende y que consigue romper los prejuicios y las expectativas que tenías con ella. Puede que esto sea un problema de la recurrente promo que se ha visto en Telecinco, pero lo cierto es que un acercamiento al primer episodio resulta bastante satisfactorio, más allá que el borrón de la posproducción. Su trama es muy interesante y consigue captar la atención y hacer partícipe al espectador a través de un cautivador José Pastor que borda a ese joven periodista.

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