Crítica de 'Family Duo 2': Cuando entretenimiento y servicio público autonómico van de la mano

Tras el abrupto y polémico cierre de Radiotelevisión Valenciana, la nueva cadena autonómica ha iniciado su andadura con buenos propósitos e intentando aprender de los errores del pasado. À Punt apuesta por una programación variada que mezcla información, divulgación y entretenimiento, sin perder de vista su servicio público ni su carácter local. Una de sus grandes apuestas de la temporada es 'Family duo', un talent show musical ideado por Fremantle que estrena su segunda edición este viernes 12 de abril a las 21:45 horas.

Desde el estudio 1 del Centro de Producción de Programas del ente público valenciano, se graba este formato que cuenta con un potente plató, más propio de un canal generalista que local. Este mismo espacio acogió a programas de la desaparecida Canal 9 como 'El Picú', 'Debat Obert' o 'Efecte Palomar', entre otros. Aunque, sin duda, el más icónico fue 'Tómbola', un programa de prensa rosa que se convirtió en un auténtico fenómeno en las autonómicas. Este fue uno de los grandes problemas de la anterior etapa, la cadena replicaba formatos más propios de una televisión privada nacional que de una autonómica pública. Así nacieron programas que nunca debieron tener espacio en Canal 9: presentados en castellano por rostros de dudosa trayectoria, sin ningún arraigo con la cultura valenciana y sin valor diferencial respecto a la oferta nacional. Este no es el caso de 'Family Duo'.

Aunque pueda parecer una versión más de otros talent shows de audiciones como 'Got Talent España', 'La Voz' o 'Factor X', tiene los requisitos necesarios para ser un buen formato autonómico. 'Family Duo' promueve la lengua valenciana, no solo con sus presentadores y varios miembros del jurado, también los concursantes cantan en este idioma. Incluso se atreven con canciones como "El rap de la paella". Además, es un formato musical que promueve la música, valores de superación y visibiliza la diversidad.

Más espectacularidad

Tras la buena acogida de la primera edición, cuya final fue seguida por 75.000 espectadores y obtuvo un 4,4% de share, 'Family Duo' regresa a À Punt en el prime time del viernes. Presentado por Joan Espinosa, el concurso cuenta con Carlos Marco (Auryn), Sandra Cervera ('El secreto de Puente Viejo'), Mari Giner (Carraixet) y Sergio Alcover ('Fama a bailar') como miembros del jurado. Mientras que Sonia Fernández ('Viva la vida') conduce 'Family Duo Extra', un espacio que muestra el backstage del programa.

La segunda edición arranca con una mayor espectacularidad y dinamismo. Su primera gala comienza con fuerza y un notable salto de calidad que se percibe desde el vídeo de presentación de los miembros del jurado. Los exteriores y la utilización de planos aéreos, realizados con dron, ofrecen un resultado realmente atractivo para el espectador. A pesar de contar con un presupuesto recudido, muy inferior al de otro formatos nacionales de la productora Fremantle, se solventa con dignidad y logra un resultado por encima de gran parte de los programas habituales de las autonómicas.

La palanca del jurado

En esta segunda edición, el talent show ha recorrido la Comunidad Valenciana para encontrar al dúo familiar con más talento de entre los más de 1.000 valencianos. El único requisito para enfrentarse al jurado es que estos dúos cuenten con alguna vinculación familiar, que puedan tocar un instrumento o bailar y, sobre todo, cantar. Ese matiz es precisamente su diferencia respecto a otros formatos similares. Evidentemente, en un contexto donde abundan los formatos de talentos, no innova con sorprendentes giros en su mecánica, pero es una apuesta segura, correcta y digna de una televisión autonómica de calidad.

Esta temporada cuenta con una pequeña novedad: la palanca. Como si del Pase de Oro de 'Got Talent' se tratase, el jurado será capaz de indultar durante las audiciones a aquellos dúos que no hayan sido elegidos por el público para avanzar hasta la siguiente fase del concurso. Un jurado cada vez más suelto y natural que intenta ser algo más estricto después de su edulcorada primera temporada. Sí, 'Family Duo' es un programa blanco, muy blanco. De hecho, puede que demasiado. Pero, sin duda, una apuesta familiar perfecta para la noche de los viernes de À Punt.