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'Machos alfa', en imágenes 8 fotos
Después de tocar Antena 3, Telecinco y Amazon Prime Video, los hermanos Laura y Alberto Caballero han dado el salto a Netflix con una serie que escapa del universo liderado por 'La que se avecina'. La llegada al gigante de streaming con 'Machos Alfa' supone una renovación para su forma de escribir, y es que hemos pasado de capítulos de 80 minutos a otros de 30. El acortamiento de su duración es solo uno de los puntos por los que este proyecto no tiene nada que ver con 'La que se avecina'.
Empecemos por la temática, que es lo más interesante de 'Machos Alfa' y, a su vez, lo que puede ocasionar más repulsión a parte de los suscriptores de Netflix. Los Caballero se han atrevido a convertir la masculinidad tóxica en el eje de sus tramas, uno de los temas más peliagudos del momento, pues la lucha contra el machismo y las vías de la igualdad cada vez se expanden con mayor fuerza en busca de crear una sociedad más justa, igualitaria y diversa.Gorka Otxoa y Paula Gallego en 'Machos Alfa'
Habrá mucha gente que piense que la habrán liado al meterse en semejante jardín, mientras que otros tratarán de panfleto sus 10 episodios. Esta polarización era de esperar y así lo contemplaban sus creadores, quienes no están asustados por el "hate" que pueda provocar, es más, lo ven algo beneficioso para generar conversación y hacer reflexionar. Lo cierto es que una vez que te sumerges en la ficción (en este punto es necesario señalar que hemos visto 3 episodios) todos los prejuicios saltan por los aires. 'Machos Alfa' es mucho mejor de lo que esperábamos.
Sin intención de ser moralista
Lo tenían todo para hacer una comedia donde el tema se tratara de soslayo y no llegara a representarse correctamente. Sin embargo, esto no pasa y, al menos en esos tres episodios iniciales, se deja bien claro que la actitud de "machito alfa" de los cuatro protagonistas es la que todos debemos cambiar. A raíz de esto se produce uno de los puntos fuertes: el contrapunto entre hombres y mujeres en el discurso por la igualdad. Todos los protagonistas tienen a una mujer a su lado que potencia ese trabajo de deconstrucción para que pongan los pies en la tierra en un mundo cambiante. Triste pero cierto, las mujeres suelen tomar este rol y las propias actrices lo han comentado. No obstante, aquí se deja un rayito de luz a cómo uno de los cuatro hombres inicia este proceso gracias a su hija y ayuda a sembrar el germen en su grupo de amigos.
'Machos Alfa' tampoco busca una criminalización del hombre cis heterosexual, sino que admite que esas cuatro figuras casposas tienen también sus virtudes, como ser comprensivos o dedicados con sus novias. Precisamente aquí encuentra la balanza idónea para no realizar una caza de brujas, sino mostrar que personas con actitudes machistas pueden comenzar a cambiar. El machismo no deja de ser consecuencia de la educación patriarcal que recibimos desde la infancia y, por eso mismo, todos y todas tenemos en nuestro interior micromachismos que erradicar. Justo por esto, los zascas lanzados hacia los hombres se han realizado de una manera natural y orgánica, sin pretensión de entrar en discursos profundos. En resumen, se prioriza la práctica frente a la teoría en busca de que ese mensaje llegue con mayor facilidad.
Cambio en la estética y la producción
Como he comentado anteriormente, 'Machos Alfa' no es 'La que se avecina' y esto se aprecia en diferentes aspectos. Además de la mencionada duración, el diseño de producción y la estética nos llevan a otro universo alejado de los contenidos a los que estamos acostumbrados en los hermanos Caballero. Es un modo de hacer comedia diferente y sin pasar por unos personajes caricaturizados e histriónicos. Es más, por momentos cuesta identificar su sello propio, como si hubiesen caído más en el modo de producción de Netflix y menos en el de Contubernio Films.
Respecto al reparto, todas las parejas consiguen demostrar mucha química entre ellos, algo muy beneficioso pues, pese a ser una serie coral, se rige principalmente por las tramas entre unidades familiares. Todos tienen una dilatada trayectoria en la comedia, e incluso encontramos a caras conocidas en los proyectos de Contubernio como es María Hervás, protagonista de 'El pueblo', que vuelve a demostrar un nuevo registro. Merece especial mención Paula Gallego, pues ha dado un gran salto cualitativo desde que la vimos por última vez en 'Cuéntame cómo pasó' encarnando a María Alcántara.
Fernando Gil y María Hervás en 'Machos Alfa'
Esta serie original de Netflix toca diferentes temas que potencian esa lucha patriarcal, como es el techo de cristal en los altos cargos o las relaciones abiertas que, de forma excepcional, se representan sin una demonización y a través de una mujer segura con sus ideas y que toma esa decisión pensando en sí misma. Este es un ejemplo más del acierto a la hora de representar a las mujeres en la serie, ya que están empoderadas, saben qué quieren, qué buscan y qué necesitan y no caen en priorizar los deseos de sus novios, maridos o padres solo por su satisfacción.
'Machos Alfa' es, en definitiva, una comedia de media hora rápida, quizá incluso demasiado en su primer episodio, que según transcurre gana al ver cómo se desarrollan las relaciones entre personajes. Retrata con fidelidad esas relaciones poco comunicativas entre hombres y las contrapone con los atributos que necesitan cambiar. Todo esto sin buscar ser moralista y dar lecciones, sino haciendo comedia del ridículo y vergüenza ajena que muchos y muchas hemos sentido en ocasiones al ver situaciones en la vida real como las representadas. De mantener el nivel los capítulos restantes, podríamos estar ante una buena ficción que ha sabido nutrirse y representar con acierto un tema tan peliagudo como la masculinidad tóxica.