Crítica de 'Mira lo que has hecho' (Temporada 2): La familia crece... y el drama también

Berto Romero y su equipo regresan a Movistar+ con la segunda temporada de 'Mira lo que has hecho'. La primera ya dio de lleno en la diana con seis episodios en donde la comedia y el drama se entrelazaban a la perfección en un fiel reflejo no solo de las dificultades y alegrías de tener un hijo, abriéndose a mostrar una narración que albergaba a todos los miembros de la familia. En esta ocasión, los nuevos capítulos siguen ahondando en las complicaciones familiares, solo que centradas en el embarazo.

Sandra, el personaje al que da vida Eva Ugarte, se encuentra embarazada de gemelos y tratando de lidiar con un hijo rebelde de tan solo 3 años. Y si los embarazos ya son complicados de por sí, Berto se mete en el rodaje de una serie, por lo que su ocupación será mucho mayor y su tiempo en casa se reducirá. Aquí comienzan los primeros roces y enfrentamientos del matrimonio en una espiral que no hará más que hundir la relación y que será la columna vertebral de la ficción.

El drama se apodera de la comedia

Aunque en esencia es una serie de comedia, 'Mira lo que has hecho' destaca en sus puntos dramáticos. La primera temporada ya nos dejó ver esta línea, que llegó a introducirse en la tragedia con su final. Al igual que la vida evoluciona, la serie de Berto Romero ha hecho lo mismo y ha tornado al drama con mayor intensidad, aunque sin dejar nunca de lado la vis cómica de su creador, su principal sello de identidad.

Precisamente es esta dramedia lo que más se agradece de la segunda temporada. 'Mira lo que has hecho' gana en aquellos momentos en donde se pone en jaque el matrimonio de Sandra y Berto, donde se muestran las debilidades que tienen como personas y como pareja y todos sus miedos y preocupaciones por la inminente llegada de dos hijos más cuando todavía están aprendiendo a ser padres del revoltoso Lucas. Ahora bien, esto no quiere decir que haya empeorado en la parte de comedia. La naturalidad en los diálogos y en los apuntes cómicos sigue aflorando, y es que lo bueno de la serie de Movistar+ se encuentra en que no busca la carcajada, sino solo representar la vida con normalidad sin tratar de dar giros imposibles e increíbles.

Muchos temas que abordar... Y muy poco tiempo

A lo largo de sus seis episodios que rondan entre los 20 y los 25 minutos, 'Mira lo que has hecho' encaja diferentes temáticas al mismo tiempo que desarrolla la trama principal. Estos se encuentran introducidos con maestría en situaciones cotidianas, como el hecho de emplear el humor negro al hablar de los fetos y poner de este modo en cuestión los límites del humor o la crítica a la democracia en la elección por los niños del nombre de su clase. Son únicamente píldoras que no afectan a la historia principal, pero que sí consiguen que, en su conjunto, la serie se vea enriquecida.

Otro de los puntos clave de la temporada es el uso de la metaficción a raíz de la serie que está creando Berto. Esta serie es una réplica homónima de 'Mira lo que has hecho', que incluso cuenta con Carlos Therón como director a modo de guiño, pues él no se encuentra al frente de la segunda temporada, una de las ausencias más palpables. La serie es la punta del iceberg de los principales problemas que se encuentran en la pareja y la que desencadenará la complicación de trabajar y cuidar de los hijos, pero sobre todo de aquellas familias en las que todo el peso recae en la mujer, quien trabaja y se encarga de las tareas del hogar.

Este es uno de los aspectos más interesantes que ofrece la temporada, pues aunque el punto de vista se encuentra en Berto, no se deja de lado el esfuerzo de Sandra, mostrando cómo afronta su embarazo, la rutina de su hijo, su trabajo como médica y las obras en casa sin la casi presencia de su marido, mientras que Berto vive por y para la serie que está grabando. De este modo, 'Mira lo que has hecho' se introduce en la vida conyugal y familiar, realizando una crítica muy acertada de este tipo de matrimonios existentes todavía hoy en día que no han evolucionado a una igualdad entre los dos miembros.

El reparto, su punto estrella

Berto Romero ha sabido rodearse de lo mejor para el elenco de su serie. Eva Ugarte vuelve a corroborar que es un gran acierto y que la química entre los dos traspasa la pantalla, habiendo creado un tándem muy solvente; pero lo cierto es que el resto de actores no se quedan atrás. A los ya vistos en la primera temporada se suman Belén Cuesta y Núria Gago. La sevillana se interpreta a sí misma como fichaje de la serie que prepara Berto y será una pieza clave del matrimonio de los protagonistas, mientras que la barcelonesa supone una gran incorporación a la ficción.

No obstante, la presencia de Gago es muy escasa, limitada a pequeñas apariciones en tan solo unos pocos episodios. Y es una auténtica pena. La actriz se desenvuelve a la perfección en su papel de madre soltera embarazada y de amiga confidente de Sandra, pero no tiene espacio para desarrollar más. Quizá este es el problema de 'Mira lo que has hecho', que cuenta con subtramas dignas de verse en pantalla y otras de las que incluso muestran pequeños retazos que, finalmente, se quedan en nada por el poco metraje de la ficción y por estar enfocada únicamente a la vida de los dos protagonistas.

En definitiva, 'Mira lo que has hecho' regresa con una segunda temporada que repite los aciertos de su predecesora y en donde se vuelve a demostrar el saber hacer de Romero y Ugarte en la sucesión de la comedia al drama. Sin embargo, una vez concluida la temporada, da la sensación de que el final es muy precipitado, y eso que el previo es una de las escenas más potentes de la ficción, y de que falta mucho por ver. Estos seis episodios saben a poco y, es más, la posibilidad de una tercera temporada se avecina muy interesante. 'Mira lo que has hecho' puede tener una larga vida y mucho que contar, especialmente si sigue por el camino que están marcando.