¿Qué pasaría si estando cerca de los 40 sientes la llamada de la maternidad o la paternidad y te marcas como objetivo encontrar a tu pareja ideal para compartir este momento tan especial? Esto es precisamente lo que les sucede a Marta y Javi, los protagonistas de 'Pequeñas coincidencias', la primera ficción española que lanza Amazon Prime Video y que supone su salto definitivo a nuestro panorama televisivo. La compañía ha querido iniciar este viaje junto a Atresmedia Studio, Onza Entertainment y MedioLimón. Juntos se han encargado de producir esta comedia de ocho episodios en la que humor y amor se entremezclan gracias a una sencilla historia que sí, no nos engañemos, a más de uno le sonará.
Marta Hazas y Javier Veiga ('Pequeñas coincidencias')
Marta G. De Vega, Abraham Sastre, María Miranda, Germán Aparicio, Alonso Laporta, Daniel Monedero, Jorge López, Gerald Fillmore y Cristina Pons (coordinadora) son los guionistas elegidos para el proyecto en el que también ejerce ese rol Javier Veiga. Él es también director junto a Mario Montero y Miguel Conde mientras que Javier Salmones es el director de fotografía, Nico Tapia es el director de producción, Rosa Solano figurinista y Jani Madrileño es el editor. Juntos han sacado adelante un producto ideado por Veiga y Marta Hazas que sin duda no tiene grandes pretensiones ni reinventa la ficción española pero que es un claro sí. Su sencillez puede que sea su gran valor ya que es un producto no intenta ir más allá, es una honesta ficción de género, que además es efectiva, entretenida y perfecta para la temporada navideña. ¿Gustará esto a la crítica? Posiblemente lo tenga complicado pero parece claro que al público sí, es un producto altamente comercial y ligero de consumir.
Cercana a las grandes comedias estadounidenses
'Pequeñas coincidencias' es la historia de amor entre dos personas que desean una estabilidad sentimental e iniciar una nueva etapa en la que un bebé sea protagonista. No está basada en la vida de dos desesperados por buscar pareja pero sí en la de dos jóvenes que quieren darle un giro a su vida con el amor como protagonista. Esta serie bebe mucho de las grandes comedias románticas norteamericanas a las que nos hemos enganchado en infinidad de ocasiones, un tipo de historia muy habitual en el cine pero no en la pequeña pantalla española, por ello, apostar por un producto así es un acierto. Nos alejamos de las comedias del chiste fácil, que muchas veces han inundado nuestra televisión, 'Pequeñas coincidencias' tiene un tipo de comedia diferente en la que la sonrisa es más común que la carcajada.
Marta Hazas y Alfonso Bassave ('Pequeñas coincidencias')
Un claro pro: su realidad
Es una serie en la que sin duda la realidad es su auténtico sello. Sus personajes hablan con el lenguaje de la calle, se viven situaciones muy cercanas a nuestro día a día y con su estética e imagen se consigue que la historia la sintamos cercana, bastante nuestra y eso es un acierto. Es una comedia romántica actualizada a nuestros días, en la que las redes sociales tienen un papel vital por ejemplo. Se denota el cuidado por crear un producto nuevo, que podrá gustar más o menos, que hará más reír o quizás nada, pero que no está desfasado, todo lo contrario. Y esta es una de las grandes bazas de la serie, su realismo y autenticidad.
Un contra: la estructura de su piloto
Pero no todo es positivo en 'Pequeñas coincidencias' y es que la estructura de su primer episodio puede convertirse en uno de sus principales inconvenientes. Parece evidente que está creada para ver en forma de maratón, por ello su primer episodio resulta excesivamente introductorio. Conocer a los dos protagonistas, a todo su entorno y llevarles al punto de arranque de toda la historia acaba ocupando demasiado tiempo del capítulo. Aprovechemos los 50 minutos para ir mucho más allá, ya habrá tiempo de conocerles a todos a lo largo de la temporada. En una comedia así era fundamental empezar con ritmo, con fuerza y sin tener la necesidad de pararse a presentar todo de una forma tan evidente. Aunque para nada es un episodio lento, ni pesado ni que acaba aburriendo al espectador sí peca de no ir mucho más directo al conflicto central.
'Pequeñas coincidencias'
Marta y Javi, la combinación perfecta
Uno de los grandes aciertos de 'Pequeñas coincidencias' es contar con Marta Hazas y Javier Veiga como protagonistas. Se evidencia de una forma clara que la serie ha sido creada por ellos, con personajes hechos a su perfecta medida. Es posiblemente uno de los proyectos televisivos en los que mejor están ambos y teniendo en cuenta que son el auténtico centro de la serie, es todo un plus para la misma. A él no le vemos estridente ni exagerado, tiene el punto de humor perfecto, que además sirve como punto neutro en las tramas que protagoniza junto al grupo de amigos de Javi. Ella también está muy bien, consiguiendo equilibrar su papel, mucho más que en 'Velvet', y logrando a una Marta natural, feminista, que lucha por lo suyo y que, aunque pueda parecerlo, no depende de los hombres. Son dos personajes que en absoluto abusan del humor fácil, ni de los chistes y eso se agradece porque esta serie no es eso.
Por ello, el grupo de amigos de Javi que forman los personajes interpretados por Juan Ibáñez, Xosé Touriñan y Tomás Pozzi es sin duda el punto más flojo de la serie. En una ficción así se puede jugar con el grupo de chicos de otra forma, sin necesidad de chistes fáciles y evidentes, sin cambiar el tono del resto de la serie y hacer que nos desconectemos de ella. Una vuelta de tuerca más ingeniosa, inteligente y actual hubiese sido perfecta. Y es precisamente lo que sucede con los personajes de Alicia Rubio, Mariano Peña o Alosian Vivancos, que sin duda complementan a la perfección al de Marta Hazas, abren el espectro de tramas de forma considerable y lo hacen sin irse a lo fácil, a lo típicamente visto siempre en nuestra pequeña pantalla.
Javier Veiga y Lucía Balas en 'Pequeñas coincidencias'
Lo más leído
¿Y entonces, qué?
En definitiva, esta serie es un claro sí... pero con peros. ¿Sus grandes defectos? Ser demasiado obvia en algunos puntos y abusar de estereotipos en otros, no era necesario hacer algo así para gustar y llegar a todos los públicos. Pese a ello, es un producto fresco, actual y que sin duda abusa muco más de la sonrisa que de la carcajada. Cuenta con un reparto muy equilibrado, con dos protagonistas que enamoran y que sabiendo la química que tienen bien seguro serán lo mejor de la ficción en el resto de episodios. Pese a contar con un episodio poco directo, engancha y deja entrever lo que está por venir: un sinfín de citas, líos y pequeñas coincidencias que Javi y Marta deberán ir superando para lograr acabar juntos. ¿Lo conseguirán como en todo comedia romántica que se precie?