Crítica de 'Sky Rojo': Un thriller frenético lleno de purpurina con una arriesgada mezcla de tonos

Ante el inminente desenlace de 'La Casa de Papel y el discreto paso de 'White Lines', Netflix y Vancouver siguen estrechando su relación con la llegada de 'Sky Rojo'. El 19 de marzo se estrena esta producción llena de gloss y la purpurina que quizás haya sido la más compleja de crear para Álex Pina y Esther Martínez Lobato, no solo por su temática sino también por el tono en el que se cuenta.

'Sky Rojo' nos introduce en una escapada frenética de tres prostitutas de están hartas de las condiciones en las que trabajan en "Las novias", un prostíbulo regentado por Romeo (Asier Etxeandía), una de las personas más crueles con las que jamás desearías encontrarte. Coral (Verónica Sánchez), Wendy (Lali Espósito) y Gina (Yany Prado) unen fuerzas para huir y comenzar una nueva vida a partir de una fuga que no será un campo de rosas.

Son muy diferentes pero muy necesarias la una para la otra. Las tres chicas se unen por un objetivo común, que no se queda en escapar de ahí, sino en salvar sus vidas. Coral es inteligente, Wendy es impulsiva y Gina es la inocencia. Juntas forman un trío perfecto para que nadie pueda con ellas al convertirse en Los Ángeles de Charlie con pistola en mano, mucha acción y fuegos artificiales.

Un tercer acto constante

Evidentemente, su huída no pasa desapercibida y, rápidamente, Moisés (Miguel Ángel Silvestre) y Christian (Enric Auquer) se ponen manos a la obra para hacerse con ellas en una persecución que lleva al límite a nuestras protagonistas. Y así comienza la serie, con una escapatoria que nos traslada automáticamente a lo que estamos acostumbrados a ver en un tercer acto, el del desenlace, mientras que el primero y el segundo lo vamos descubriendo mediante flashbacks y voces en off (marca de la casa de Vancouver).

Y es que si estos creadores nos tenían acostumbrados a un ritmo acelerado, pero aquí han tirado la casa por la ventana, ayudados también por la duración de 25 minutos por episodio. Aunque no es ninguna gran novedad, no es habitual ver thrillers de este metraje, algo que sin duda ayuda a mantener en todo momento el alto voltaje apoyado en una estética de cómic, una realización atrevida y un montaje con ritmo elevado. Y todo ello, con una gama cromática de lo más variopinta, olvidándose desde la productora a apostar por un color principal como el rojo en 'La Casa de Papel' o el amarillo en 'Vis a vis'.

Entre la denuncia social y el puro entretenimiento

Temas tan duros como la prostitución y la trata de blancas en un tono que mezcla el drama más complejo con la comedia que le saca más de una carcajada al espectador es uno de los grandes retos que ha tenido el equipo creativo de esta serie. No es nada fácil si se pretende que, además, todo ello esté bien engrasado y funcione como un tono único. El de esta serie, como se puede intuir, es muy delicado, pues es fácil caer en la banalización de un tema tan serio. Por lo tanto, la balanza se posiciona entre el entretenimiento en todo su esplendor y la crítica y denuncia social que se pretende hacer mostrando la situación que vive más gente de la que pensamos.

Es cierto que la denuncia social si es con comedia entra mucho mejor. De hecho, sus creadores utilizan una expresión que es: "'Sky Rojo' es un entretenimiento frenético que esconde un caballo de Troya para golpear al espectador cuando más se está divirtiendo". Y es completamente cierto. El problema es cuando nos vamos de ese golpe a una carcajada sin todavía habernos recuperado. De este modo, el espectador no llega a entrar en el drama tanto como se pretende en esas escenas, porque un gag divertido, por mucho que se pueda agradecer, te saca de ese sufrimiento y esa empatía a la que se estaba queriendo llevar al espectador. Y la mezcla de tonos no es mala, pero sí que falla el fuerte contraste que hay al saltar de uno a otro.

Un elenco que juega perfectamente a los dos géneros

El reto de saltar de un tono a otro no solo lo han tenido los creadores a la hora de escribir sus guiones, sino que también lo ha sido para el reparto. Los seis protagonistas están espléndidos en sus papeles, con los que habrán gozado pudiéndolos llevar hasta el extremo, en el caso de las chicas, sorprendiéndose a ellas mismas por todo aquello a lo que van a tener que ir haciendo frente y, en el caso de los chicos, con la crueldad más bestia posible. Y por difícil que resultase, están todos impecables, habiendo encontrado juntos esa arriesgada personalidad que tiene esta serie yendo todos a una.

En conclusión...

'Sky Rojo' va a tener éxito pero no va a ser un fenómeno. La verán millones de espectadores en todo el mundo, pues si ya estamos acostumbrados a los maratones de Netflix de 8 capítulos, si encima le sumamos que son de corta duración y que se estrenan en un día festivo en gran parte de España... Además, es muy entretenida y, cuando te quieres dar cuenta, ya estás atrapado frente a la pantalla viendo el siguiente. Sin embargo, esta apuesta diferente no se convertirá en ningún boom aun ya contando con una segunda temporada. ¿O habrá una marea roja que consiga que esta ficción continúe? El tiempo lo dirá.