OPINIÓN

Crítica de 'The Nevers': Steampunk contra la discriminación con la firma de Joss Whedon

La nueva apuesta de HBO tiene reminiscencias de cierta saga mutante, pero es capaz de construir un amplio mundo con personalidad propia.

HBO España

Por Óscar Arenas El 12 de Abril 2021 | 10:58

Ya desde la legendaria serie noventera 'Buffy, cazavampiros', Joss Whedon estableció un estilo propio a la hora de crear historias del que 'The Nevers', su más reciente creación que estrena HBO España el 12 de abril, es heredera directa. Ese tono tan propio, que combina el entretenimiento divertido y ligero para todos los públicos con una inteligencia y madurez que lo llevan un paso más allá, ha demostrado funcionar con solvencia hasta el momento, por lo que no cabría esperar menos de esta nueva ficción. Eso sí, en este caso tendrá que sobreponerse al abandono del propio Whedon y a las polémicas recientes que le rodean por el tratamiento a sus actrices, que hacen que los mensajes sobre empoderamiento femenino que tanto abundan en su obra se carguen de una negra ironía.

Amalia y Penance, interpretadas por Laura Donnelly y Ann Skelly en 'The Nevers'

¿Mujeres X?

El hogar de la señorita True es el que centraliza la acción. En él, un grupo de muchachas superpoderosas reunidas por esta figura enigmática trata de ser aceptadas por una sociedad que desconoce lo que son mientras trata de utilizar sus dones sobrehumanos para el bien. Las reminiscencias a los X-Men de Marvel son obvias, aunque en lugar de tener a un serio profesor en silla de ruedas para liderar a estas mutantes, su líder, Amalia True, es una mujer que, aparte de tener poderes precognitivos, posee un entrenamiento afinado en la lucha cuerpo a cuerpo y un carácter despreocupado y tenaz que desafía la moral y los preceptos de la época. Una combinación mucho más rompedora, perfecta para hacer interesante un grupo de mujeres del siglo XIX.

Por si fuera poco, la comparación con X-Men resulta todavía más precisa si establecemos que este grupo principal tiene a su propia Magneto en la figura de Maladie, la impredecible villana a la que interpreta una soberbia Amy Manson. Al igual que el antagonista mutante por excelencia, Maladie lidera a una facción de "tocados" que reniega de coexistir con aquellos que no tienen dones y se constituye como un grupo terrorista que ataca de forma directa a la alta sociedad londinense, que son sus principales opresores. Y, también del mismo modo que Magneto con el Profesor X, esta villana tuvo una relación que la unió a Amalia. Con tantos paralelismos, no es de extrañar que, como ha sucedido en incontables ocasiones con el amo del magnetismo en sus diferentes medios, el antagonismo de Maladie se convierta en una colaboración, dando lugar a un acercamiento en la postura de estos dos grupos que, en suma, defienden de formas diferentes a un mismo colectivo oprimido.

Más allá de comparaciones

Amalia True, interpretada por Laura Donnelly en 'The Nevers'

Esta simpleza inicial que luego va aprovechando esos elementos de partida para derivar en situaciones mucho más laberínticas es marca de la casa de Whedon, que suele necesitar de varios capítulos de desarrollo para mostrar todo el potencial de sus historias. Por ello, es más que probable que no dé tiempo a ver estos frutos en los 6 capítulos que forman la primera parte de la primera temporada, que es lo que se estrena en la primera mitad de 2021. No obstante, todo apunta a un apogeo épico, que probablemente deje a su segunda parte un desarrollo que dé una mayor perspectiva de todo el potencial de la serie.

Un Londres muy poblado

Nick Frost es el Rey de los Mendigos en 'THe Nevers'

Todos estos individuos son presentados con su propia personalidad, a cada cual más excéntrica y atractiva, gracias, en parte, a una caracterización muy bien pensada y, en parte, por supuesto, a unos intérpretes que los perfilan a la perfección. Con el tiempo, algunos de estos personajes se revelan al espectador como mucho más de lo que podrían parecer y otros se mueven estableciendo alianzas inesperadas sin resultar inverosímiles. Todo ello da lugar a una organicidad cambiante del panorama que, con una lista tan numerosa de actores, puede provocar toda clase de giros y desenlaces sorprendentes.

La chica de los chismes

Ann Skelly como Penance Adair en 'The Nevers'

Pero, aparte de todo esto, Penance es la responsable de que esta historia se pueda ubicar en el género del steampunk. Su poder consiste en ver la energía de su entorno, cosa que utiliza combinada con su gran intelecto para desarrollar toda clase de tecnología mucho más avanzada de lo que sería propio de su cultura. Aunque hay otras fuentes de ciencia avanzada, es principalmente ella quien produce estos inventos, que dotan al orfanato de Amalia True y, por extensión, a toda la ficción de una personalidad propia. La impecable recreación de la Inglaterra de finales del siglo XIX que se hace junto con los peculiares diseños tecnológicos dan como resultado un universo visual que en todo momento reclama la atención del espectador.

Un buen inicio que promete un mejor desarrollo

El patio del orfanato de 'The Nevers'

Elementos, todos ellos, que no podían faltar en una serie con el sello de Joss Whedon. El desafío que tiene por delante en la segunda mitad de esta primera temporada, que constará de 4 capítulos, es sobreponerse a la salida de este creador estrella, manteniendo su fórmula y desarrollándola a nuevos territorios. Por el momento, se plantea un universo amplio, rico e interesante, aderezado con el misterio del origen de estas personas superpoderosas, del que apenas se muestran unos hilos. Todo parece apuntar a que el argumento va a necesitar un largo recorrido de capítulos llenos de sorpresas y trepidantes enfrentamientos para florecer, pero, de llegar a hacerlo y si se encauza de forma correcta, podría ser la próxima referencia en el catálogo de ciencia ficción de HBO.