OPINIÓN

Crítica de 'Todo lo otro': Abril Zamora firma el camino correcto para normalizar al colectivo LGTB en ficción

La ficción creada, escrita, dirigida y protagonizada por Abril Zamora es una de las bazas de HBO Max en su desembarco en España.

HBO Max

Por Fernando S. Palenzuela El 22 de Octubre 2021 | 11:22

Tras demostrar su buen hacer como cocreadora de 'Señoras del (h)AMPA', Abril Zamora se ha metido de lleno en un nuevo proyecto televisivo: 'Todo lo otro', la primera serie de ficción de HBO Max para España que se estrena el 26 de octubre, coincidiendo con el desembarco de la plataforma en nuestro país. En esta ocasión, la que fuera actriz de 'Vis a vis' toma las riendas como guionista, directora y protagonista, contando de nuevo con Mandarina como productora del proyecto.

Abril Zamora, guionista, directora y protagonista de 'Todo lo otro'

Abril Zamora ha preparado un relato en donde pone el foco en la generación que ronda los 30 años y que, pese a ser una de las más preparadas, es la primera que tendrá una peor vida que sus padres. A través de un grupo de amigos que viven en Madrid, vamos descubriendo diferentes realidades de este problema en el que muchos y mucha se sentirán ampliamente identificados. Pero esto no es lo único, y es que 'Todo lo otro' también pone de manifiesto la realidad trans.

Dafne, que recientemente ha realizado la transición, vive el duelo de que su novio la haya dejado. Esto le supone un auténtico golpe de realidad, pues va descubriendo la transfobia interiorizada por medio de algunos personajes secundarios. 'Todo lo otro' trae a primera plana una protagonista trans interpretada por una actriz trans, algo que solo se había presentado con 'Veneno', pues es común ver cómo otras ficciones recurren a personajes trans mediante intérpretes cis, lo cual merma la realidad y el compromiso por visibilizar y romper con la desigualdad.

Buscando el camino a la normalización

Pese a esto, la ficción de HBO Max no se centra en el colectivo trans ni LGTB, y es que precisamente, con la dirección que va tomando la ficción (con 3 episodios vistos), el hecho de que Dafne sea trans no es una cuestión central. Abril Zamora busca normalizar la identidad de su personaje, pues tan solo es una mujer con el corazón roto que vive una historia de amor no correspondida con su compañero de piso. Precisamente el alegato que realiza la creadora es intentar que lo LGTB no sea un género como tal, sino que se vaya sumergiendo con total naturalidad en los guiones, un camino por el que la ficción televisiva debe avanzar para que su público sienta con total normalidad que una persona LGTB no es un evento en sí.

Juan Blanco y Abril Zamora en 'Todo lo otro'

Continuando con este punto, merece atención la escena que sirve de apertura a 'Todo lo otro', donde se exhibe muy bien el tono que va a tener la serie. A través de la narración de una voz en off, un recurso recurrente en cada episodio, vamos conociendo poco a poco a los personajes. Además, esta no duda en realizar bromas políticamente incorrectas sobre Dafne, haciendo alusión a la cuestión trans y su sexo biológico previo a la transición. Sin duda, este es otro punto que sirve para normalizar al colectivo, dado que también se permite frivolizar con lo LGTB al igual que se haría con una persona heterosexual.

En cuanto al recurso de la voz en off, la cual está guiada por Alberto Casado, podría parecer algo manido y ya visto, pero bien es cierto que está enfocada a sacar los peores pensamientos que todos tenemos en la cabeza y que, por tanto, los protagonistas de la serie también tienen. Es a través de ella donde busca las situaciones más cómicas, echando por tierra sin miramientos a los personajes como esa vocecilla que te dice lo mal que haces las cosas.

La generación perdida

Otra de las temáticas que aborda 'Todo lo otro', como hemos mencionado previamente, es esa generación perdida que reina en la actualidad. Personajes como los que interpretan Juan Blanco y María Maroto son los que mejor representan a una infinidad de jóvenes que, pese a haber estudiado y haberse formado, o bien no tienen trabajo o, de tenerlo, está muy alejado a lo que ellos quieren.

César, a quien da vida Blanco, es el que mejor casa con esta idea, pues es un treintañero que quiere ir un paso por delante de su situación, repitiendo patrones que a todos nos han inculcado, como tener piso, trabajo y pareja para formar una familia, pero que con la inestabilidad social es prácticamente imposible. Abril Zamora ha sabido condensar todas estas preocupaciones, y es precisamente en los momentos dramáticos cuando 'Todo lo otro' saca su mayor esplendor, algo que no le ocurre con tanta eficacia en el contrapunto cómico.

Las ventajas de escribir para amigos

Abril Zamora vuelve a contar con sus amigos para protagonizar 'Todo lo otro'. Si has visto 'Señoras del (h)AMPA', es posible que la mayor parte del reparto te suene, pues son pocos los que no han estado en la ficción de Mediaset y Amazon Prime Video. Sin embargo, esto no es un handicap ni mucho menos, puesto que la jugada le sale con maestría.

David Matarín en 'Todo lo otro'

Es más que palpable la química que todos ellos tienen y, además, da gusto poder descubrir a algunos intérpretes como David Matarín o María Maroto, mucho más desconocidos, y ver a otros que no son los típicos rostros que repiten en cada serie. Además, el hecho de que la guionista haya escrito los personajes pensando en ellos es un acierto, pues les facilita el trabajo y regala situaciones como la gran bronca del episodio 3, donde se muestra una relación de amistad en un mal momento, pero con una gran verdad.