La noche del viernes 28 de julio, Telecinco estrenó 'La última noche', el programa que la principal cadena de Mediaset España eligió como sustituto de 'Viernes deluxe', tras su cancelación. Un formato que arrancó con un número musical que desconcertó y avergonzó a muchos de sus espectadores, los cuales no se mostraron muy entusiasmados por el tono que mantuvo el programa.
"El título es ideal y casi premonitorio", compartía un espectador, lanzando una referencia sobre el nombre del formato, en medio de unas críticas que ya arrancaron con un inicio un tanto surrealista, con una representación del cielo y del infierno y un ritmo rockero que, a algunos, les produjo "vergüenza ajena".
En medio de algunos espectadores puntuales que se mostraron a favor del programa o de Barneda, fueron muchos los que recordaron la cancelación del 'Deluxe', predecesor de 'La última noche'. "Y pensar que se han cargado el 'Deluxe' para poner un programa como este", señalaba un espectador, en medio de las críticas por aspectos como el ritmo lento y de un tono poco animado a pesar de la insistencia de los presentadores en que el programa se ceñía a la idea de que fuera su "última noche" en este mundo.
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El contenido, lo más señalado
No obstante, lo más criticado del programa resultó ser el contenido, empezando por el hecho de que, a pesar de la animada introducción, el formato se sumergió en una entrevista con Miguel Ángel Revilla y, en consecuencia, se abordó la política. "¿En serio que arrancan con esa intro cargada de energía y heavy rock para acabar entrevistando a Revilla y hablar de política?", cuestionaba un espectador, sumándose a otros comentarios que criticaban el hecho de que se abordara el tema siendo un viernes por la noche. Asimismo, la variedad de temas que se abordaron, algunos un tanto sinsentido, tampoco convenció a una parte importante del público, el cual también señaló en algunos casos lo poco animado que resultaba el formato.