ENTREVISTA

Daniel Grao ('Perdida'): "No quería dibujar un héroe desde el principio porque me parecía una americanada"

El actor nos habla de su recién estrenada 'Perdida' y nos adelanta los primeros detalles de 'HIT', la serie que graba para TVE.

Por Sergio Navarro El 21 de Enero 2020 | 09:04

El martes 14 de enero, Antena 3 estrenó su primera serie de 2020 con Daniel Grao como protagonista. Se trata de 'Perdida', un thriller emocional en el que, ante la desesperada búsqueda de una hija, un padre se traslada hasta Colombia para infiltrarse en la cárcel y acercarse de este modo a la verdad. Hablamos con el actor para que nos cuente qué tiene de especial este proyecto y que nos explique cómo ha sido grabar en los localizaciones tan diferentes como son Colombia y Valencia, plasmando además dos etapas tan distanciadas de un mismo personaje. Grao también nos cuenta cómo está siendo el rodaje de 'HIT', su siguiente proyecto como protagonista para Televisión Española.

Daniel Grao, junto a Carolina Lapausa y Verónica Velásques, en 'Perdida'

Por fin se ha estrenado esta serie que nos consta que tenías muchas ganas de que viese la luz.

Ha sido muy intensa para mí y espero que guste el trabajo.

¿Qué tiene 'Perdida' para que sorprenda a un espectador que ya ha visto muchas series de desapariciones?

Se hacen tantas cosas que a mí tampoco me gusta ponerme a competir. Yo creo que una parte importante es dónde está rodada. No habría sido posible hacer esto en un decorado, pues meternos en una prisión colombiana con todo ese elenco y figuración que está súper profesionalizada. Yo aluciné, porque no solo están de bulto, sino que también tienen que actuar y a mí me ayudaron muchísimo a sentirme como personaje como un pez fuera del agua.

Arranca muy en clave de thriller, y eso lo mantiene a lo largo de toda la temporada, pero también es muy importante toda la cuestión dramática. El núcleo es esa prisión, pero la serie se abre bastante a partir del tercer capítulo a tramas que a priori no reconoces que tengan mucho que ver con la trama inicial, pero sin embargo luego todas las piezas van a ir encajándose. En ese sentido va a ir sorprendiendo por lo relacionados que están todos los personajes, más que lo que parece al principio.

Has comentado el tema de los escenarios y ya en casi todas las series se apuesta mucho por los reales. ¿Qué aporta a un actor olvidarse del cartón piedra?

Eso ayuda muchísimo. Todo lo que es hacerte a la realidad, a un actor le ayuda un montón. Es duro, pero el simple hecho de estar cuatro meses fuera de tu casa lo sufres por otro lado pero ayuda mucho porque al final estás solo en eso. Hay cierto paralelismo: estás al otro lado del charco, con otro horario, otra gente, otra cultura, una zona que no conozco con cierta peligrosidad... Y en ese sentido, para mí, por el personaje que me tocaba contar, había mucho paralelismo.

¿Qué diferencias ha habido en el rodaje en cuanto a las secuencias de Bogotá y las de España?

Es muy difícil que se grabe algo cronológicamente y muchas veces intentas hacer algo incluso con el aspecto físico. Yo por ejemplo de Valencia a Colombia bajé como 7 kilos y lo pude hacer gracias a que al principio hicimos todos los flashbacks en Valencia, el equipo se fue a Colombia y nosotros un mes después, y allí ya grabamos todo el presente de la serie. Entonces eso permite que puedas jugar con el aspecto. Aparte es muy diferente porque por ejemplo los flashbacks tienen una luz que no tiene nada que ver con la que hay cuando nos metemos en el meollo de la cuestión que es Bogotá.

Antonio (Daniel Grao), en los flashback de hace 10 años y en el presente, en 'Perdida'

Hay un Antonio mucho más luminoso en la primera parte, en la de Valencia. A mí me interesaba contar a un tipo normal, es decir, el hecho de que él esté en esta prisión y que vaya a pasar por donde pasa para conseguir su objetivo, visto desde fuera le convierte en un tipo casi heroico, de ese padre coraje. Pero a mí me interesaba mucho contarlo desde un mecánico de Valencia, normal y corriente, y me quise apoyar mucho en el miedo, como rasgo. Es desde el miedo desde donde actúa, y pasando por donde pasa a lo largo de la serie, se va viendo en unos contextos que ni se hubiera imaginado en su vida. Y eso le va fortaleciendo y eso le podríamos llamar heroico, pero no quería dibujar un héroe desde el principio porque me parece una americanada en plan: "Ya sabemos que este va a sobrevivir a todo".

Mejor contar cómo la propia situación le ha ido haciendo fuerte.

¿Es una serie de temporada única? Y en caso de que no, ¿la trama principal se cerrará al final de esta primera temporada?

Es un gran misterio, porque nosotros rodamos dos finales y no sé muy bien qué va a pasar. Lo que sí que te puedo decir es que lo troncal de la serie sí que se cierra. En ese sentido no va a dejar al espectador colgado y pendiente de nada.

Muy diferentes porque también lo fueron en el tiempo. Yo como actor, habiendo pasado por los cuatro meses en Colombia, me movieron mucho; fue un proyecto muy intenso. Entonces ahora cuando miro para atrás y me voy hasta Valencia, que fue antes, pues me veo a mí mismo como mucho más ingenuo: no sabes lo que te espera. De alguna manera, eso está en el personaje y en la relación con ella (Carolina Lapausa). En esa parte es en la que viven el drama, pero justo antes de eso también contamos cómo es esta pareja ilusionada y que quiere que le salgan bien las cosas. Nosotros, de alguna manera, estábamos en ese punto, que teníamos todo el rodaje por delante, sobre todo yo que aún tengo todo el viaje y la cárcel.

¿Qué te parece como actor y espectador que muchas series españolas hayan reducido la duración de los capítulos?

A mí me parece un acierto. Es verdad que cada cosa tiene que se contada en su tiempo. Si algo necesita más tiempo y la historia lo aguanta... Pero yo en general creo que muchas veces la ficción gana cuando está en tiempo algo más reducido. Las series en España de 70 o 75 minutos, y lo sé de primera mano, había cosas que estaban puestas para estirar por una cuestión de horarios, audiencias y demás, y eso va en detrimento del ritmo y al final se lo tiene que comer el espectador. Incluso en 'Perdida', de los primeros montajes que yo vi a lo que se emitirá, está más sintetizado y va más al grano.

Llevas un tiempo empalmando series de televisión y ahora has empezado las grabaciones de 'HIT'. ¿Cómo está siendo el rodaje?

Cuando se anunció este proyecto, se comparó mucho con 'Merlí'.

No tiene nada que ver. Entiendo que hay paralelismos muy fuertes, como un profesor, un colegio... Pero partiendo de la base de que Merlí era un profesor de filosofía, los alumnos eran mayores en edad, los conflictos eran otros, hablábamos de gente buena con sus conflictos emocionales... Aquí, se parecería más a 'Hermano mayor' que a 'Merlí'. Aquí es gente de 4º de ESO y concretamente en un instituto donde hay 9 vándalos que queman coches, trafican con droga, que uno graba compañeros con conductas sexuales y los chantajea, y verdaderamente se mete en temas complejos.

Lo que llama la atención es que TVE apueste por una serie en la que se critica el sistema educativo en España.

Bueno, yo estoy alucinando. No solo porque apuesten por esta crítica, sino que realmente, cuando me la comentaron, pensé: "Qué bonita manera de hablar de tantos temas interesantes". La conexión que hay en que los jóvenes vean o no pornografía en que luego se desaten o no manadas, el consumo de drogas, el autolesionarse... Pensé que hablaba de temas muy interesantes y la cuestión es cómo los va a abordar. Están con total libertad y sin ningún tipo de filtros, incluso en el lenguaje. El otro día teníamos a dos verdaderos actores porno porque HIT les lleva para explicar las diferencias entre la pornografía y la sexualidad de verdad, y cómo está muy bien si tú disfrutas masturbándote con el porno, pero que no necesariamente la vida real es eso.