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La segunda temporada de 'Élite' se ha estrenado en Netflix con nuevos personajes, la continuación de la trama de quién mató a Marina y alguna que otra sonada baja. Sin embargo, la intensidad de los protagonistas sigue en aumento, y es que se encuentran en una atmósfera oscura y densa, en donde los secretos no hacen más que multiplicarse y todos parecen esconder algo, sea cual sea su clase social.
Carlos Montero y Darío Madrona, creadores de 'Élite'
¿Cómo surgió el nacimiento de cada uno de los nuevos personajes?
Carlos Montero: Va a ser un poquito más oscura porque los personajes estaban marcados por la muerte, por el asesinato de Marina. Queríamos tres personajes llenos de luz, de energía y que vinieran con mucha fuerza. Entonces, a partir de ahí decimos: "Venga, ¿qué tres personajes podemos crear?". Queríamos que fueran dos chicas y un chico, y nos pusimos a crear. Una surgió un poco a partir de una noticia del periódico y otro nos apetecían mucho que tuviera que ver con el entorno de Lu, nos parecía natural que fuera su hermano y la otra no sé muy bien.
Darío Madrona: En la primera temporada cada personaje aportaba como un punto de vista sobre la clase social: la clase social pobre, rica, la marquesa... Y aquí también pasa un poco lo mismo. Está la nueva rica, está el rico malcriado que desperdicia un poco su dinero, esto siempre al principio, y luego está el personaje de Cayetana, que también tiene que ver su relación con ello. Entonces comenzamos por ahí para empezar a desarrollarlos y después veíamos si los personajes hilaban más historias, etcétera, etcétera... Vamos, construir un personaje.
¿Desde un principio se planteó que el personaje que cargara con las culpas del asesinato fuera Nano o esto fue algo que tuvisteis que resolver con el rescate de 'La Casa de Papel' por Netflix?
D.M.: Cuando empezamos a escribir la primera temporada sabíamos ya quién era el culpable y quién iba a ser juzgado por ello porque formaba parte de la filosofía de la serie la idea de los ricos y poderosos que se ayudan entre sí, y la idea del que tiene menos medios y acaba pagando por un crimen que no ha cometido. No, para nada, eso no afectó para nada. La primera temporada, para que te hagas una idea, se terminó a escribir antes de que 'La Casa de Papel' fuera un súper boom a nivel mundial. Para nada estaba concebida así.
No teníamos una trama completamente definida, pero sí que estábamos muy enamorados de Christian
Viendo el primer episodio de la segunda temporada, ¿teníais otra trama pensada para Christian de cara a esta segunda temporada?
C.M.: Pues sí, para qué te vamos a mentir. No teníamos una trama completamente definida, pero sí que estábamos muy enamorados del personaje y del actor. En la primera temporada tenía mucha fuerza, un personaje que estaba muy bien... Entonces sí, claro que queríamos continuar con él. Pero bueno, tuvimos la suerte dentro de lo malo que nos avisó con bastante tiempo, pudimos reaccionar y estuvo bien. En ese sentido creo que no se nota nada su ausencia después.
El reparto está abriéndose a nuevos proyectos: Jaime Lorente ha fichado por 'El Cid', Álvaro Rico también. ¿Creéis que esto también puede afectar a la próxima temporada?
C.M.: En el caso de Álvaro no hay ningún problema, seguramente será compatible. De todas formas eso tiene que ver con la vida de las series, es decir, las series están vivas, las series están formadas por actores, por creadores, por mucha gente que a veces sus caminos se bifurcan, y es así. Forma parte también de algo muy chulo, que esté tan vivo todo. En una peli que está todo más cerradito..., pero bueno, en una serie te vas encontrando con esos escollos y si eres listo los juegas a tu favor.
Samu, Rebeca y Nadia en la segunda temporada de 'Élite'
Eso lo comentasteis en la rueda de prensa también, que si como creadores sabéis manejaros e introducirlo dentro de la serie incluso es hasta positivo porque le das más vida.
D.M.: De entrada te pegas la cabeza contra la pared, ¿pero sabes lo que pasa? Nuestro trabajo como guionistas es encontrar soluciones a problemas en nuestras historias. Entonces cuando nos surge un reto como este tenemos que buscar enseguida soluciones e intentar que en lugar de que ese lado juegue en contra, que vaya a favor de la historia.
¿Os habéis planteado introducir escenas de sexo más explícitas dado que Netflix es una plataforma?
Ambos: ¿Más? (Risas).
Nos parecía fuera de lugar que hubiera más sexo cuando había varios personajes atormentados
En una entrevista dijisteis que iba a ser una temporada más salvaje y más guarra.
C.M.: Eso lo dije yo un momento de broma y fue titular de todos lados, me arrepiento muchísimo. Yo no puedo evitar soltar burradas.
D.M.: Es verdad que cuando normalmente es una segunda temporada sientes que hay un poco más de tono que en la primera. Lo que pasa es que también esta segunda temporada, como decía Carlos, que tenemos un montón de personajes un poco atormentados por la muerte de un personaje de forma tan trágica, sigue habiendo sexo pero también me parecía un poco fuera de lugar que de repente hubiera más todavía, teniendo en cuenta que, además, en la primera temporada, yo recuerdo que nos vino un periodista francés a decirnos que le parecía una serie muy descarada. Nosotros estábamos alucinando, ¿sabes? Se supone que son gente bastante más abierta. De todas formas sigue habiendo sexo, no ha cambiado.
Tiene sentido porque conecta con el discurso que da Valerio al principio de la temporada, que dice que al fin y al cabo hay que disfrutar y no perderse ser joven.
C.M.: Sí, solamente queríamos que estuviera ahí. Otra cosa es que haya más que antes, porque también vamos a donde nos lleva la historia, ¿sabes? Si de repente la historia te lleva a que en un capítulo no haya sexo pues no puedes provocar... Yo lo intento, pero Darío no me deja.
D.M.: (Risas) Un poco sí, un poco sí.
C.M.: Darío es un talibán de la historia. Yo digo: "Venga, un poquito de algo...", pero no hay manera...
¿En qué temáticas os gustaría profundizar más aún de cara a próximas temporadas?
C.M.: Hay un tema que está por ahí siempre, Darío y yo lo contábamos en una entrevista, pero aún no hemos encontrado la manera, cuando la encontremos la haremos. Es el tema del consentimiento, de todo lo que tiene que ver cuando fuerzas, cuando no, con lo que pasa... Todo lo que hay ahí, y todo lo que ha ido cambiando con el tiempo, gracias a Dios. Sí nos apetece tratarlo, pero es verdad que hasta ahora no hemos encontrado la fórmula. Un poco la clásica denuncia, ponerse al lado siempre de la víctima de una manera clara, o sea, que evidentemente... Pero cuando encontremos la manera de hacerlo, yo creo que lo haremos.
D.M.: No hemos encontrado ni la historia ni a los personajes para hacerlo. Nos gusta hablar de temas cuando surgen a través de los personajes, y tenemos un número de personajes finito que sería un poco increíble que empezaran a la vez tres o cuatro temas en ellos. Entonces, la primera temporada ya vamos a muchos personajes por primera vez, pero según avanzan las temporadas es más difícil que vayamos incorporando porque siguen siendo los mismos personajes y tienes el riesgo de caer en el culebrón más desfasado en el que a una persona le pasan un montón de cosas muy distintas. Siempre va a haber temas de los que queramos hablar, pero nunca va a ser en una primera temporada en una explosión de temas porque conocemos a los personajes por primera vez.
C.M.: Pero sí, nos mueve. Y nos mueve siempre hacernos muchas preguntas, o sea, lo que más nos interesa a Darío y a mí son las preguntas que no tienes muy claras las respuestas, pero sí tienes muy clara la pregunta. Entonces empiezas a indagar, a buscar, a ver a dónde te lleva. Los temas que sé exactamente lo que pienso me aburren muchísimo.
Álvaro Rico como Polo en la segunda temporada de 'Élite'
En esta temporada habéis aumentado equipo de guionistas, ¿qué ha significado esto para el trabajo a la hora de escribir la temporada? ¿Qué cambios ha habido?
D.M.: Éramos más en la sala de guion, teníamos más ideas de otra gente diferente que además había visto la primera temporada y lo veía con una perspectiva distinta, y que probablemente nos hemos reído más. Porque son gente muy divertida, muy maja que apetecía un montón.
C.M.: Y Darío y yo ya nos teníamos muy vistos.
D.M.: Viene muy bien recibir ideas de fuera.
Hay mucha gente que compara 'Élite' con 'How to Get Away With Murder' por la estructura de flashfoward y el asesinato inicial que centra cada temporada. ¿Es uno de vuestros referentes?
C.M.: No. Nos dimos cuenta de que en la primera temporada mataban al malo con un trofeo. No fuimos conscientes de eso hasta el final, que yo lo había hecho, claro, me da mucha vergüenza. Pero fíjate, yo con lo fan que soy de Shonda Rhimes, la serie no la había visto y bueno, pues ha sido todo un poco casualidad, la verdad, suena un poco increíble pero es la verdad.
D.M.: Sí, pero bueno, el flashfoward que te cuenta cosas también viene de años antes, quiero decir, nada de esto está inventado. El ambiente escolar puede recordar un poco, pero no es universidad. ¿Sabes lo que pasa? Que no teníamos muchos referentes para la serie. Yo me acuerdo que cuando hablábamos de ella decía "puede que haya cosas que suenen de aquí y de allí", pero como esta especialmente ninguna. No teníamos una idea muy clara de qué quisiéramos que fuera como esta o la otra, la verdad.
C.M.: Sí, no sabíamos muy bien a quién estábamos copiando.
Al final todo está hecho y uno es un referente de otro...
D.M.: Claro, de hecho ahora salió la tercera de 'Por 13 razones' y dicen que se parece a nosotros cuando estoy seguro de que la temporada se empezó a escribir mucho antes que la nuestra. Pero en el fondo coincides un poco en los temas porque también se plantean los mismos problemas, situaciones parecidas.
C.M.: Sí, después ya solo el hecho de ser un ambiente escolar también nos comparan a veces con 'Al salir de clase' y dices "bueno, pues vale...".
Obligar a los jóvenes a sentarse frente a la tele a las diez de la noche es mucho pedir
¿Qué opináis del nuevo resurgimiento de la ficción juvenil en España? Porque sí es cierto que llevábamos muchos años sin tener ficciones juveniles o al menos con cierto éxito desde el final de 'Física o química' y ahora con 'Élite' y con 'Skam España' sí que hemos empezado a ver que hay una nueva vía.
C.M.: Las televisiones generalistas no pedían, no demandaban este tipo de series porque ya habían perdido ese público. Por lo tanto, no se hacían estas series, por eso no había. Todo se reduce a eso al final. Entonces cuando llegan las plataformas y sí ven que hay un público para eso, se ponen a pedirlo. Es lógico que Movistar+ haya pedido 'Skam', y es lógico que Netflix nos haya pedido 'Élite'.
D.M.: De todas formas, no sé si sería un resurgimiento porque falta un poco más de tiempo para saber si esto es algo más constante. Desde que salimos nosotros y 'Skam' tampoco ha habido más series de adolescentes.
C.M.: No ha dado tiempo, o sea que... Bueno, Flooxer...
D.M.: Ah, bueno, a ese nivel, a nivel bajo presupuesto sí que ha habido varias que están ahí. Pero creo que es un público al que las plataformas han encontrado la manera de llegar porque obligarles a sentarse frente la tele a las diez de la noche en la televisión generalista ya era mucho pedir. Yo recuerdo ya en el año 2012 ya a mí me comentaban en la productora en la que estaba trabajando que las cadenas habían dicho que no querían series para jóvenes ya, que el público ya no se sentaba delante de la televisión.
Ha cambiado mucho la situación, pero sí es cierto que TVE ha anunciado que va a hacer una especie de 'Merlí'. Igual con lo bien que ha funcionado 'Élite', 'Skam', también Merlí con el salto a Netflix... Puede ser que quieren apostar y ver.
D.M.: Está muy bien para el público juvenil, pero también está muy bien para los actores jóvenes porque hubo mucho tiempo en España que los actores jóvenes solo podían hacer de hijos de los protagonistas. Ahora, en series como las nuestras, como 'Skam', como 'Merlí', tienes toda una cantera de actores que están a la vez y sirve para crear una generación que luego alimenta a las series y las películas durante muchísimos años. Y para que los jóvenes tengan una oportunidad, que eso está muy bien.
Danna Paola y Jorge López en 'Élite'
¿Tenéis algún otro proyecto en mente al que estéis dándole vueltas?
C.M.: Yo ya estoy a punto de empezar a rodar mi siguiente serie con Netflix sobre mi novela "El desorden que dejas", empiezo a rodar en octubre, ya estoy ahí a tope.
D.M.: Yo no tengo nada, quiero vacaciones.
¿Y habéis pensado alguno vosotros dos juntos ya que habéis funcionado tan bien en 'Élite'?
C.M.: Ahora mismo no, pero yo espero que sí, y que no sea muy tarde, la verdad, o sea, a mí me apetece mucho seguir trabajando con Darío y espero que él diga lo mismo aunque sea mentira.
D.M.: Teníamos uno muy importante entre manos, pero al final se ha caído, por tanto, sí, claro, sería muy guay, la verdad. Lo que pasa es que Carlos es un tío ocupado haciendo series con otros, me tiene abandonado. (Risas) Me lo voy a pensar...
Si hay material para hacer más temporadas, por qué no darlo
¿Creéis que después de esta tercera temporada a 'Élite' le queda todavía más vida?
D.M.: Yo creo que sí.
C.M.: Esperemos que sí.
D.M.: Una serie que transcurre en un instituto es un poco serie contenedor donde no tienes por qué seguir con los mismos personajes, puedes seguir renovando. Claro, yo creo que la respuesta es siempre la misma, mientras el público siga queriendo...
C.M.: Yo creo que entre todos, no solo Darío y yo, los guionistas, los directores, los actores, todo el equipo técnico, que apenas hablamos, pero tenemos un equipo técnico y artístico cojonudo. Creo que entre todos hemos hecho un universo muy chulo que sería una pena, ¿no? Que si hay material para más por qué no darlo. Yo creo que sí.
Siguiendo lo que comentabais del universo, ¿os plantearíais hacer un spin-off?
D.M.: Sí, si vemos la manera sí. A mí me parece muy buena idea, y algunas de las series más guays han surgido de spin-offs, realmente. A veces nos enamoramos tanto de una trama o de un personaje que es como "jo, esto tiene una serie, tío". Yo creo que podría pasar, eh, sí, y además de una manera natural y nada forzada.