Maisie Williams se convirtió en una de las actrices más queridas del mundo de la actuación a una muy temprana edad, cuando interpretaba al icónico personaje de Arya Stark en 'Juego de Tronos'. Sin embargo, hasta ahora nunca había explicado que, tras esa joven valiente y lanzada se ocultaba una niña atormentada por los traumas provocados por su padre a lo largo de su infancia, que ha descrito como marcada por "el dolor, el temor y el miedo" . En el podcast "The Diary Of A CEO", la actriz se ha abierto en canal y ha dado detalles sobre esta durísima época de su vida: "Tuve una relación bastante traumática con mi padre. Tuve problemas para dormir, desde que me alcanza la memoria".
Partiendo de ciertas declaraciones de Williams en las que mencionaba de pasada este infierno que le tocó vivir, Steven Bartlett le pidió profundizar en la cuestión. "¿Sabes cuando ves a niños jugar y hay una completa inhibición? En esas situaciones yo me detenía y pensaba que algo horrible iba a suceder", contó la actriz. Expresó su sensación continua de que algo no iba bien, y la dificultad de sanarla. La situación se postergó hasta que, cuando tenía ocho años, una profesora habló con ella para preguntarle qué le sucedía.
Maisie Williams en el podcast "The Diary Of A CEO"
Ella le contó su delicada situación familiar y cómo afectaba a su día a día, por ejemplo, provocando que fuera a clase por las mañanas sin desayunar: "Me preguntó si había desayunado, le dije que no. Me preguntó si otras mañanas desayunaba, le dije que no". Llegado este punto, fue incapaz de seguir hablando o de contener las lágrimas, y Bartlett se levantó para abrazarla. Continuando con la historia, Williams reveló que su madre tuvo que recogerla del colegio, pero ella se negaba a reconocer que hubiera problemas con su padre y le defendía, comparando su situación con la de la víctima de una secta infantil.
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Canalizando el dolor
"Todo mi mundo se puso del revés", expresó, reconociendo la alegría que en el fondo sintió por no tener que volver a ver a su padre. "Pensaba que había algo inherentemente mal en mí", se sinceró la intérprete, que ha tardado años en poner una conclusión a su dolor. En referencia a su paso por 'Juego de Tronos', recordó cómo la gente se extrañaba por su capacidad para interpretar de manera tan realista el dolor y el trauma. En este sentido, su infancia provoca emociones reales en su trabajo: "Ha influido enormemente en todo lo que hago como actriz", reveló.