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'The Good Doctor' se ha convertido en un gran éxito para el canal ABC. La serie es seguida por millones de espectadores, y uno de sus principales ganchos es su protagonista, Shaun, un joven cirujano con autismo y síndrome de Savant que utiliza sus habilidades extraordinarias para salvar vidas, al que le cuesta conectar con su entorno.
Freddie Highmore es Shaun Murphy en 'The Good Doctor'
La disputa entre Shore y WME, la compañía en cuestión, fue por un tema del empaquetado de tarifas (o packaging fees), una práctica común entre las agencias, que cobran por organizar un equipo a partir de sus clientes (actores, escritores y directores) para una serie, en lugar de recibir la comisión habitual del 10% sobre el honorario de cada cliente, según informa Los Angeles Times.
Poner fin a las tarifas de empaquetado se ha convertido en un tema controvertido entre los guionistas, incluido Shore, cuyo sindicato ha dado el paso de pedir a sus miembros que despidan a sus agentes cuando éstos se preocupan más por sus propios resultados financieros que por las carreras y beneficio de sus clientes. Antes de que 'The Good Doctor' fuera comprada por una cadena de televisión para su distribución, Shore le dijo a sus agentes de ICM Partners que no quería que su serie recurriese a esa práctica.
El productor estaba preocupado porque ese sistema inflaría el costo de la serie para pagar a agencias que no contribuirían en la producción diaria de 'The Good Doctor', ya que esos costes no se verían reflejados en la calidad de la serie. Ante esto, la agencia William Morris Endeavour amenazó con romper el acuerdo el día antes que el programa fuera presentado a las cadenas de televisión.
La apuesta de David Shore
'The Good Doctor' finalmente se produjo sin tener que pagar una tarifa de empaquetado, algo inusual en la industria. Shore tiene gran influencia en los acuerdos con las agencias, ya que es un showrunner de largo recorrido, responsable de éxitos como 'House'. El productor opina que el hecho de no pagar la tarifa empaquetada, le ha permitido gastar miles de dólares en contratar a un equipo de escritores más grande, e invertirlo en la producción de la serie de una forma más directa. Parece que ha sido una apuesta acertada, ya que la serie fue la más vista en ABC la temporada anterior, y su tercera entrega ya está en desarrollo.
